El hospital de Sant Rafael de Barcelona tendrá ha sido sancionado con una multa de 60.000 € por haber falicitado datos personales de sus pacientes a una empresa privada contratada por la Generalitat para hacer un estudio sobre el uso del catalán en el sector hospitalario.
La Agencia Española de Protección de Datos considera que el centro sanitario barcelonés "ha incurrido en la infracción muy grave tipificada en el artículo 44 de la Ley Orgánica de Protección de Datos", al haber quedado acreditado que "permitió el acceso a los datos incluidos en la historia clínica de distintos pacientes del Hospital de Sant Rafael".
El procedimiento sancionador se inició después de que se produjeran diversas denuncias impuestas ante Protección de Datos por la Asociación Nacional de Consumidores y Usuarios de Servicios de Salud (Asusalud), el sindicato de funcionarios Manos Limpias y el grupo parlamentario del Partido Popular en Cataluña, quienes denunciaron la "vulneración del principio de confidencialidad en los expedientes clínicos de los pacientes de Cataluña, al no constar de forma expresa e inequívoca el consentimiento de éstos" para realizar los estudios lingüísticos.