Sumario

EL PRESIDENTE DE LA COMUNIDAD AUT�NOMA DE LA RIOJA

Sepan todos los ciudadanos que el Parlamento de La Rioja ha aprobado, y yo, en nombre de su Majestad el Rey y de acuerdo con lo que establece la Constituci�n y el Estatuto de Autonom�a, promulgo la siguiente Ley:

EXPOSICI�N DE MOTIVOS

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El uso de drogas es un fen�meno que ha estado presente en la humanidad desde tiempos remotos.

La utilizaci�n de sustancias que alteran el psiquismo, ha estado ligada a la cultura como parte de fen�menos religiosos y curativos. Precisamente la utilizaci�n dentro de fen�menos culturales arraigados, es lo que confiere una dimensi�n radicalmente diferente al uso de sustancias que se tienen ahora, que est� ligado a fen�menos de ocio, diversi�n o estimulaci�n.

La utilizaci�n de drogas, por ello, est� ligada a la cultura de los pueblos, de tal modo que �sta act�a como protectora contra el mal uso o uso inadecuado de sustancias psicotr�picas. Por el contrario, el uso actual se realiza dentro de una din�mica ligada al enriquecimiento econ�mico, regida por las leyes del mercado y generando en los que consumen ilusiones de para�sos y soluci�n de muchos problemas.

El problema del uso y abuso de drogas precisa de los poderes p�blicos una acci�n de protecci�n ante el uso inadecuado de sustancias, ya que ha pasado a ser un problema de Salud P�blica. Es deber de los poderes p�blicos garantizar la protecci�n a los colectivos m�s vulnerables socialmente ante las drogas, velar por el control sobre esas sustancias en la vida cotidiana y procurar la reducci�n de su disponibilidad.

Al hablar de drogas encontramos dos grandes grupos de sustancias, aquellas cuyo uso est� aceptado socialmente como son el tabaco o el alcohol; y tambi�n, productos potencialmente adictivos como los juegos de azar y otro gran grupo de sustancias no admitidas socialmente como la hero�na, coca�na, cannabis y otras. Dentro de este �ltimo grupo est� irrumpiendo con fuerza una tercera v�a de fabricaci�n qu�mica clandestina de drogas, como es el caso de los derivados anfetam�nicos. En todos los casos los efectos devastadores sobre la salud son incuestionables produci�ndose en unos casos una influencia m�s directa sobre la salud f�sica de los individuos, y en otros con una influencia m�s clara sobre la salud mental, y en todos los casos un empobrecimiento de la salud social. Esto �ltimo, se concreta en aislamiento entre la juventud, carencia o escepticismo ante los ideales, baja estima de s� mismos y aumento de la probabilidad de inadaptaci�n social y laboral. En definitiva, esta falla en la salud social provocada por el uso inadecuado de droga puede minar los cimientos sobre los que se puede asentar una sociedad sana y libre.

Sin perjuicio de lo anterior, es indudable que La Rioja presenta una ancestral vinculaci�n con la cultura del vino en su m�s amplia extensi�n y constituye adem�s un sector estrat�gico de la econom�a regional. Precisamente esta singularidad, obliga a las Instituciones riojanas y al propio sector vitivin�cola a conjugar adecuadamente la protecci�n de los grupos sociales m�s vulnerables al alcohol con el responsable fomento y divulgaci�n de la cultura del vino. P�rrafo 6.� del apartado 1 de la Exposici�n de Motivos introducido por el n�mero 4 del art�culo 20 de la Ley [LA RIOJA] 7/2001, 14 diciembre, de Medidas Fiscales y Administrativas (�B.O.L.R.� 25 diciembre).Vigencia: 1 enero 2002

El Gobierno de La Rioja, para dar respuesta al problema de la drogodependencia, cre� en 1985 la Comisi�n Regional de Coordinaci�n para la prevenci�n y asistencia en drogodependencias que elabor� un Plan Regional sobre Drogas aprobado en marzo de 1986. La citada Comisi�n ha sido objeto de diferentes modificaciones hasta que en el Decreto 43/1997, de 22 de agosto (B.O.R. de 26 de agosto de 1997) se crea la Comisi�n T�cnica de seguimiento del Plan Riojano de Drogodependencia, que busca dotar de un car�cter m�s t�cnico y de consenso a las acciones que se lleven a cabo y elevar las propuestas a los distintos �rganos de instituciones y asociaciones.

Este Decreto fue modificado para ajustarlo a las necesidades de organizaci�n del trabajo de las subcomisiones y al cambio de instituciones, por la asunci�n de nuevas competencias, por el Decreto 46/1998, de 10 de julio (B.O.R. de 14 de julio de 1998).

Adem�s de articularse los instrumentos de coordinaci�n institucional y de desarrollo de las iniciativas en drogodependencias, se han establecido normativas que regulan la autorizaci�n y acreditaci�n de Centros de atenci�n sociosanitaria a drogodependientes (Decreto 10/1991, de 4 de abril), y sobre la acreditaci�n de centros para la realizaci�n de programas con sustitutivos opi�ceos. Asimismo se ha regulado, con car�cter anual, la subvenci�n a Corporaciones Locales para programas de prevenci�n de drogodependencias.

La aprobaci�n del Plan Riojano de Drogodependencias y otras adicciones por la Comisi�n T�cnica y de Seguimiento del citado Plan el 15 de septiembre de 1998 y su posterior aprobaci�n en Consejo de Gobierno el 9 de octubre de 1998, han supuesto una apuesta firme desde el Gobierno de La Rioja, de sus instituciones, entidades y asociaciones por la acci�n coordinada en materia de drogodependencias. Uno de los objetivos del Plan en el �rea de prevenci�n y dentro del denominado Subprograma Normativo, es la promulgaci�n y desarrollo de una Ley Auton�mica sobre drogas. La promulgaci�n de esta ley, ser� una oportunidad �nica para hacer que el compromiso institucional y la corresponsabilidad ante las drogodependencias sean efectivos y que la coherencia y efectividad de las pol�ticas preventivas sobre drogas sean m�s factibles. Asimismo los esfuerzos de actuaci�n de asociaciones, instituciones p�blicas o privadas, organizaciones empresariales y sindicales, tendr�n un referente normativo que ponga el bien de los j�venes y afectados por la drogodependencia por encima de cualquier otro inter�s.

Los principios rectores de esta ley son los mismos que han inspirado al Plan Riojano de Drogodependencias y otras adicciones, y son:

• 1. Flexibilizaci�n, en cuanto a su car�cter necesariamente din�mico en la medida en que el problema que trata es cambiante y en cuanto su necesaria posibilidad de renovaci�n por los agentes a los que les incumbe.
• 2. Globalizaci�n, por su abordaje de aspectos sanitarios, sociales, educativos, laborales, econ�micos, policiales, normativos etc., con relaci�n a la prevenci�n, asistencia, reinserci�n y control de la oferta de alcohol, tabaco, drogas ilegales, psicof�rmacos y otros productos adictivos.
• 3. Integraci�n de las acciones contra la drogodependencia, a trav�s de programas conjuntos de actuaci�n en �mbitos de promoci�n y prevenci�n de la salud, de bienestar social, de inserci�n laboral y control de la oferta; procurando una cobertura m�s all� del individuo, para incluir a familias y comunidades.
• 4. Corresponsabilizaci�n, en cuanto a que la reducci�n de la oferta tambi�n es una responsabilidad compartida necesariamente de todos a los que les incumbe el problema.
• 5. Planificaci�n ya que es la �nica manera de llevar a cabo las acciones interinstitucionales y coordinar actuaciones intersociales para abordar la prevenci�n, asistencia, inserci�n y control de la oferta de drogas.
• 6. Participaci�n, por ser la esencia de las actuaciones de esta ley, al apoyarse en la comunidad tanto la definici�n de los problemas sobre las drogas y la drogodependencia, como la b�squeda de soluciones a los mismos.

2

Los preceptos legales de esta ley se apoyan en la Constituci�n Espa�ola, que en su art�culo 43 reconoce el derecho a la protecci�n de la salud y establece que compete a los poderes p�blicos organizar y tutelar la salud p�blica a trav�s de medidas preventivas y de las prestaciones y servicios necesarios.

La Ley Org�nica 3/1982, de 9 de junio, de Estatuto de Autonom�a de La Rioja, reformada por la Ley Org�nica 2/1999, de 7 de enero, delimita las competencias de nuestra Comunidad Aut�noma y establece en el art�culo 8.1.30 la competencia exclusiva de asistencia y servicios sociales y en el art�culo 9.5 la competencia de desarrollo legislativo y ejecuci�n en materia de seguridad e higiene.

La Ley 7/1985, de 2 de abril, reguladora de las Bases del R�gimen Local, establece que los municipios ejercer�n, en los t�rminos de la legislaci�n del estado y de las Comunidades Aut�nomas, competencias, sobre protecci�n de la salubridad p�blica y prestaci�n de los servicios sociales y promoci�n y reinserci�n social.

3

Esta ley incorpora la experiencia en el �mbito de drogodependencias de otras Comunidades Aut�nomas, acoge recomendaciones de organismos internacionales como la Convenci�n �nica de 1961 sobre Estupefacientes y su enmienda por el Protocolo de 1972, el Convenio sobre sustancias psicotr�picas de 1971 y la Convenci�n de las Naciones Unidas contra el tr�fico il�cito de estupefacientes y sustancias psicotr�picas de 1988. Asimismo la Convenci�n sobre los Derechos del Ni�o, en su art�culo 33 sobre la protecci�n de la infancia en el uso indebido de estupefacientes y sustancias psicotr�picas. Igualmente importante es el c�digo de pr�ctica sobre el manejo de problemas de alcohol y las drogas en el lugar de trabajo de la O.I.T. y el Convenio de este mismo organismo relativo a la discriminaci�n en materia de empleo y ocupaci�n.

Del mismo modo, y en atenci�n al inter�s del menor, la Ley incorpora limitaciones a la venta y consumo de alcohol y tabaco a menores, conductas que la propia Ley 4/2000 de Espect�culos y Actividades Recreativas de la Comunidad Aut�noma de La Rioja regula en beneficio del correcto mantenimiento del orden p�blico.

Desde un �mbito sanitario se recogen en especial las recomendaciones de la O.M.S. sobre la necesidad de garantizar una actuaci�n integral de las drogodependencias y otras adicciones y de modo normalizado.

4

La presente ley se articula en los T�tulos que a continuaci�n se detallan:

• T�TULO PRELIMINAR. DISPOSICIONES GENERALES
• T�TULO I. MEDIDAS PREVENTIVAS
• T�TULO II. ASISTENCIA E INSERCI�N SOCIAL DE LAS PERSONAS CON DROGODEPENDENCIAS Y OTRAS ADICCIONES
• T�TULO III. DE LA REDUCCI�N DE LA OFERTA A TRAV�S DE LAS MEDIDAS DE CONTROL
• T�TULO IV. DE LA ORGANIZACI�N INSTITUCIONAL Y DE LA PROMOCI�N DE LA INICIATIVA SOCIAL
• T�TULO V. DE LA FORMACI�N, INVESTIGACI�N Y DOCUMENTACI�N
• T�TULO VI. DE LAS COMPETENCIAS DE LAS ADMINISTRACIONES P�BLICAS
• T�TULO VII. DE LAS INFRACCIONES Y SANCIONES
• T�TULO VIII. DE LA FINANCIACI�N

Se compone de un total de 84 art�culos y contiene, adem�s, siete Disposiciones Adicionales, tres Transitorias, una Derogatoria y dos Finales.

Por razones de sistem�tica legislativa, la ley incorpora aspectos de legislaci�n b�sica o exclusiva del Estado que se entender�n autom�ticamente modificados cuando se produzca la revisi�n de la legislaci�n estatal. En caso de que ocurra esta modificaci�n continuar�n vigentes los preceptos que sean compatibles o permitan una interpretaci�n arm�nica con los preceptos estatales, en tanto no exista una adaptaci�n expresa de la legislaci�n auton�mica.