La Inteligencia Artificial generativa pondrá patas arribas el sector legal. Aunque algunas profesiones desaparecerán, el mundo jurídico se adaptará, pues la IA será una ayuda para los abogados, no su sustituto. Un gran reto, no obstante, se dibuja en el horizonte: que las respuestas que den los futuros chats jurídicos sean fiables. Un desafío al que, por el momento, el mercado aún no ha encontrado solución.
Fueron algunas de las conclusiones que se alcanzaron en el sexto Encuentro LegalTech organizado por LA LEY, que tuvo lugar el pasado jueves en Madrid. Moderada por Alejandro Sánchez del Campo, la cita, abierta a la participación del público, abordó el debate sobre cómo la IA generativa cambiará el sector jurídico. Un gremio conservador y con reticencia al cambio que, sin embargo, presenta poco a poco indicios de aperturismo.
"En el ámbito jurídico la fiabilidad y la precisión de la respuesta es crítico. La respuesta que devuelve la máquina debe ser fiable y beber de contenidos actualizados, de bases jurídicas en vigor y constantemente actualizadas", remarcó en el encuentro Beatriz Pérez-Olleros, directora de producto y soluciones de mercado de Aranzadi LA LEY. "La aplicación de la IA al sector jurídico es clarísima", opinó en el debate Asier Crespo, director legal de Microsoft España y Portugal. Y agregó: "No fabricamos camisas, nuestro trabajo es al fin y al cabo el lenguaje», y en este terreno herramientas como ChatGPT «han marcado un antes y un después", pues son capaces de crear borradores de texto de gran utilidad.
Los intervinientes coincidieron en el enorme potencial de la inteligencia artificial generativa en la producción de textos jurídicos. Sin embargo, también remarcaron que, en este sector, la precisión en las respuestas es clave. Y eso es algo que ChatGPT aún no ofrece. "No hay que olvidar", recordó Crespo, que "debe haber alguien al volante". "La Inteligencia Artificial es una herramienta poderosísima, nuestra estrategia es utilizarla de una forma responsable, con salvaguardas, para que sea una herramienta y no sea un arma". Porque, por el momento, "ChatGPT comete errores". "No es una varita mágica, pero sí es una herramienta", enfatizó.
¿Un ChatGPT legal?
Los fallos son aceptables en otros sectores. No en el jurídico. "En el mundo legal la fiabilidad y la precisión de la respuesta es un factor crítico", remarcó Beatriz Pérez-Olleros. No hay, en su opinión, ninguna herramienta de conversación jurídica, en formato chat, que pueda considerarse fiable. No obstante, es una tarea en la que están trabajando. "En Aranzadi LA LEY trabajamos en la puesta en marcha de un chat que nos ayude a conversar, con inteligencia artificial, sobre temas jurídicos". Esta tecnología, anunció la experta, se apoyará en un repositorio de información con más de diez millones de datos jurídicos, lo que englobará sentencias, contratos, formularios, doctrinas y artículos jurídicos. "Lo que capta ChatGPT está recogido en la web y no es fiable", aportó en el debate José Medina, CTO del grupo KARNOV en la región sur. En este punto de desarrollo, lo importante, remarcó el experto, es "identificar los casos de uso que aportan valor".
La irrupción de la Inteligencia Artirficial plantea otra derivada: ¿cómo afectará a la enseñanza de los bufetes? Para Asier Crespo, se plantea un reto, pues "antes era costumbre pedir los borradores a los juniors y ahora los hace la máquina". "La profesión como escuela de abogados se tiene que reinventar", subrayó el experto.
