Barak Obama firmó la orden de cierre de la controvertida prisión de Guantánamo el pasado 22 de enero. Desde entonces, la Unión Europea se plantea si acoger a aquellos prisioneros que no puedan regresar a sus países de origen.
Ya en 2006, el Parlamento Europeo reclamó a la administración estadounidense el cierre de la prisión de Guantánamo. Los eurodiputados también pidieron garantías de que no se devolvería a los detenidos a algún país en el que corrieran el riesgo de sufrir torturas o ser tratados de formar cruel, inhumana o degradante. Recordaron, asimismo que el trato a cualquier prisionero debe ajustarse a las provisiones de la legislación humanitaria internacional y ser juzgado por un tribunal independiente e imparcial.
¿Un problema de seguridad?
Aunque algunos países comunitarios ya han mostrado su disposición a acoger a los prisioneros que sean liberados de Guantánamo, los Estados miembros de la Unión Europea no han acordado aún una posición común al respecto, ya que se plantea el debate de que independientemente del país que acogiera a los prisioneros, éstos podrían desplazarse libremente por toda la Unión Europea.
El pleno del Parlamento Europeo debatió ayer sobre la materia, en presencia de representantes del Consejo y la Comisión que comunicarán a los europarlamentarios la posición de estas instituciones.
Cooperación
Algunos eurodiputados adelantaron. Para la socialista española Bárbara Dührkop, viuda del senador asesinado por ETA en 1984 Enrique Casas, "si Estados Unidos dice que podemos efectivamente contribuir a una solución, creo que Europa debería cooperar, mostrar solidaridad y ayudar a Estados Unidos acogiendo prisioneros". En cualquier caso, puntualiza que "habría que decidir caso por caso, y tendríamos que estudiar a cada prisionero y ver de qué se le acusó".
También se muestra favorable a que Europa colabore con Estados Unidos a vaciar las celdas de Guantánamo el liberal alemán Alexander Alvaro, que recuerda que "durante años los europeos hemos intentado ser la conciencia moral de la administración Bush, y reclamamos el cierre inmediato de Guantánamo".
"Ahora hay un Presidente estadounidense que quiere hacer exactamente eso, pero que necesita que le ayudemos, que seamos sus socios", continúa, agregando: "¿qué hacemos nosotros entonces? dejarlo de lado". Alvaro espera que los europeos "asumamos nuestra responsabilidad humanitaria y hagamos lo que podamos por los prisioneros de Guantánamo".
Algo muy similar a lo que piensa la holandesa de Los Verdes Kathalijne Buitenweg, que cree que los países comunitarios deben asumir su responsabilidad "en que se dé un trato justo y seguro a los prisioneros", especialmente a quienes no puedan ser enviados de vuelta a sus países de origen. "Por ejemplo los chinos musulmanes no pueden ni ir a Estados Unidos ni volver a China, donde podrían ser torturados", explica.
Peligro
Otros europarlamentarios, como el alemán del grupo del Partido Popular Europeo Manfred Weber, dan la bienvenida a la decisión del nuevo Presidente estadounidense, pero creen que "Estados Unidos es el único responsable de los prisioneros". "¿Por qué debería Europa acoger a personas que pueden suponer un peligro?", se pregunta, agregando que "en los casos en los que se trate de posibles inocentes, Estados Unidos es aún más responsable". "Obama tiene que resolver sus problemas él solo", agrega.
Tampoco el danés del grupo Unión por la Europa de las Naciones Morgens Camre es favorable a que Europa acoja a los prisioneros liberados. "Los prisioneros de Guantánamo no son problema de la Unión Europea", afirma tajante, subrayando que "no debemos traer terroristas, la Unión Europea ya tiene suficientes". "Si fueran inocentes no estarían en Guantánamo", reflexiona, insistiendo en que "sería negativo traerlos a la Unión Europea, matarían a ciudadanos europeos".
