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15/02/2012 10:30:00 Parlamento Europeo TRANSFERENCIAS BANCARIAS 3 minutos

Las transferencias internacionales podrían ser pronto tan sencillas como las nacionales

Hacer pagos bancarios a otro Estado miembro de la UE debería ser tan fácil como hacerlos dentro del propio país, según la legislación que debate este lunes el PE. Las propuestas, de las que es responsable en el PE la eurodiputada popular finlandesa Sari Essayah, buscan establecer una zona única de pagos en euros (SEPA, por sus siglas en inglés), que disminuirá los cargos y acelerará las transferencias. De aprobarse, las regulaciones se harán efectivas en los bancos el 1 de febrero de 2014.

Hacer pagos bancarios a otro Estado miembro de la UE debería ser tan fácil como hacerlos dentro del propio país, según la legislación que debate este lunes el PE. Las propuestas, de las que es responsable en el PE la eurodiputada popular finlandesa Sari Essayah, buscan establecer una zona única de pagos en euros (SEPA, por sus siglas en inglés), que disminuirá los cargos y acelerará las transferencias. De aprobarse, las regulaciones se harán efectivas en los bancos el 1 de febrero de 2014.

El Parlamento discutió el informe de la eurodiputada Sari Essayah este lunes, y lo votará el martes. El texto refleja el acuerdo alcanzado por el Parlamento y los Estados miembros el pasado mes de diciembre, que aboga por hacer más eficientes los pagos transfronterizos hasta que casi no se distingan de las transferencias domésticas.

La Zona única de Pagos en Euros no cubre solamente la eurozona, ya que la iniciativa incluye a 32 países europeos (los 27 Estados miembros más Suiza, Noruega, Mónaco, Islandia y Liechtenstein). Según el informe, los países no pertenecientes a la zona euro tendrán hasta el 31 de octubre de 2016 para hacer efectivas las nuevas medidas en sus bancos.

La Comisión Europea publicó un cálculo del efecto positivo de la apertura del sector de pagos en el conjunto de la economía europea y estimó que sería de al menos 123.000 millones de euros en seis años, aunque cabe la posibilidad de que alcance hasta los 300.000 millones de euros.

"Si una persona trabaja en el extranjero, no necesitaría abrir una cuenta nueva en ese país porque le ingresarían su sueldo en la cuenta bancaria de su país de origen", explica Essayah, que pone como ejemplo que "si tienes una casa en España podrías pagar el agua y la electricidad desde tu país". "También las empresas se benefician si no necesitan más que una cuenta en toda Europa para hacer los pagos", añade.

Compras en internet

"La facilidad de pago también hace más sencillo comprar bienes y servicios online en toda la UE y proporciona al ciudadano opciones reales de comparar precios y elegir el que mejor se ajuste a su bolsillo", asegura la eurodiputada finlandesa. "Comprar un ordenador en internet al minorista más barato puede hacer que ahorremos cientos de euros y además los precios bajarían en el mercado", señala. En su opinión, "la Zona única de Pagos en Euros es esencial en muchas maneras para el buen funcionamiento del mercado interno, ya que uno siempre tiene que hacer pagos".

La ponente también destaca que las transferencias crediticias o del  pago directo de deudas están principalmente incluidos en los cargos que uno paga por tener su propia cuenta. Afirma que a largo plazo  deben ser más baratos como consecuencia de la competitividad. Puntualiza también que estos costes no se muestran claramente a los consumidores y el efecto de reducirlos no será perceptible abiertamente, pero afirma que puede ser significativo para la capacidad de ahorro.

El nuevo sistema de pago se efectuará en base al uso del reconocido internacionalmente código IBAN, con el que se efectuarán los pagos únicos en las cuentas de la UE. Se suprimirá la necesidad actual del identificador bancario conocido como código BIC.

Los consumidores podrán dar instrucciones a sus bancos de limitar sus deudas directas a cierta cantidad o periodicidad y establecer listas de pagos positivas o negativas.

Legislación anterior

De acuerdo con la Directiva de Servicios de Pagos, desde el 1 de enero de 2012 los proveedores de servicios de pago (normalmente los bancos) tiene que procesar los mismos al final del día siguiente al que se realizó el pago, es decir, en un día o 24 horas. "Estoy segura de que en el futuro avanzaremos hacia los pagos en tiempo real", sentencia rotunda la eurodiputada Essayah.

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