La Dirección General de Tráfico ha anunciado que no esperará a la reforma del Código Penal que castiga como delito determinadas infracciones viales y pone en marcha un paquete de medidas especiales para retirar de la circulación a los conductores que incumplen las normas de forma sistemática y reiterada.
Según cifras de la DGT, estos conductores son aproximadamente 5.000 pilotos que, desde la entrada en vigor del nuevo permiso de conducir, acumulan más de 20 puntos negativos por infracciones de tráfico, quienes debido a la lentitud del proceso sancionador todavía conducen.
Entre las iniciativas que sugiere Tráfico cabe destacar el seguimiento que se realizará a estos conductores en colaboración con las Policías Locales, la agilización de los trámites de las denuncias, el endurecimiento de las sanciones, la inmovilización del coche en caso de infracción flagrante o el envío de expedientes a la Fiscalía del Estado para su tratamiento penal.
En referencia al cobro de multas, la DGT pretende disuadir a los conductores peligrosos mediante el embargo de la nómina para cobrar la sanción, cuando ello sea posible, y ampliar la suspensión del permiso de conducir desde los seis meses hasta el año y medio cuando cometan nuevas infracciones viales.
Según explica Javier Villalba, subdirector general de recursos de la DGT, estas medidas vienen motivadas por la "necesidad de buscar fórmulas para apartar a estos conductores multi-reincidentes hasta que no haya un adecuado tratamiento penal de sus delitos", todo ello siempre dentro del marco que permita la legislación vigente.
Se han enviado las instrucciones necesarias a los jefes provinciales de la DGT para agilizar las denuncias y endurecer las sanciones a aquellos conductores que acumulen varios expedientes por conducir con altas tasas de alcoholemia en sangre. Además, siempre que la ley lo permita, se podrá inmovilizar sus vehículos llevarlos a estacionamientos públicos, cuyo coste correrá siempre a cargo del infractor.
De la misma manera se va a potenciar el intercambio de información con las autoridades municipales para que estos conductores reciban toda la presión posible, además de favorecer a la Agencia Tributaria el cobro de las sanciones. La DGT apunta, sin embargo, que será selectiva con los medios con los que sancionar a los infractores según la situación económica de éstos.