El ministro de Justicia anunció ayer, en el marco de la Conferencia de Embajadores celebrada en la AECID (Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo), que la prioridad de la futura Presidencia española de la UE en el sector Justicia, prevista para el primer semestre de 2010, se centrará en la continuación con el interés por avanzar en la lucha contra el terrorismo y en la aproximación de la acción europea a los ciudadanos.

El ministro afirmó que la guía de trabajo para la Presidencia española será el Programa Plurianual para el Desarrollo del Espacio de Libertad, Seguridad y Justicia. En este sentido, el ministro avanzó que España trabajará en medidas como la aplicación del principio de reconocimiento mutuo (tanto en el ámbito civil como en el penal), la facilitación de la ejecución de las resoluciones judiciales, la aproximación de legislaciones y el proyecto E-Justice, que pretende adaptar la actuación en el ámbito de justicia de la Unión Europea a la revolución tecnológica.

En relación con las novedades que afectarán de forma más obvia al trabajo de las embajadas y consulados en un futuro próximo, Fernández Bermejo destacó la reforma de la nacionalidad a raíz de la entrada en vigor de la llamada “Ley de Memoria Histórica”.

El ministro añadió que los Ministerios de Justicia y Asuntos Exteriores y Cooperación trabajan en la elaboración de una Instrucción, que tendrá como fin servir de herramienta de trabajo de los Registros Civiles, de cara a permitir que la tramitación de las peticiones de nacionalidad al amparo de la Ley 52/2007 se haga con la mayor eficacia posible, determinando los colectivos afectados por la reforma, los documentos que se tendrán que aportar para acreditar las circunstancias contenidas en la disposición transitoria mencionada, así como el propio procedimiento de tramitación de las peticiones.

Asimismo, como anexo a la Instrucción, se incluirán unos modelos de solicitud, destinados a que los interesados puedan formular sus peticiones. Ante la previsible incidencia de la ampliación del derecho de opción en las representaciones españolas en el extranjero, también se están realizando las oportunas adaptaciones de los aplicativos informáticos de los Registros Civiles españoles a las particularidades de la actuación registral consular, con el fin de dotar a los Consulados y Embajadas de herramientas informáticas que faciliten la gestión de los expedientes de nacionalidad abiertos en aplicación de esta ley.

Por otra parte, Fernández Bermejo instó a los asistentes a seguir trabajando en la intensificación de la red de convenios y tratados con otros países, dada su evidente incidencia de cara a los administrados. Actualmente, se encuentran en negociación 3 convenios en materia de extradición, traslado de personas condenadas y asistencia jurídica en materia penal con Emiratos Árabes Unidos, se ha firmado ad referendum un convenio sobre traslado de personas condenadas con Arabia Saudí y están pendientes de ratificación por los respectivos parlamentos otros textos firmados con Filipinas, Cabo Verde y Mauritania. También se acaban de negociar sendos convenios que afectan al territorio de Hong Kong, pendientes de la preceptiva autorización china.

No obstante, la cooperación jurídica internacional ha experimentado un avance muy significativo en los últimos años con la implantación de la figura de los magistrados de enlace. España tiene destacados actualmente magistrados de enlace en Paris, Roma, Bogotá y Rabat y en Madrid se cuenta con la presencia de los magistrados de enlace italiano, francés, británico y marroquí.

El ministro animó a los embajadores que hoy acogen a estos profesionales a aprovechar lo más posible su condición de expertos juristas y a integrarles al máximo en la labor de la embajada, “lo que sin duda redundará en una mayor eficiencia y en un seguimiento más cercano de los asuntos relacionados con la Justicia”, añadió.

Finalmente, el ministro abordó el asunto de la cooperación al desarrollo y el papel que debe desempeñar el Ministerio de Justicia en la aplicación de los objetivos que establece el actual Plan Director de Cooperación. En este sentido, afirmó que tanto la AECID como la Dirección General de Cooperación Internacional tienen la voluntad de trabajar en estrecha coordinación para asegurar que haya una respuesta eficiente ante las demandas de los países y organismos receptores de la ayuda en este sector.