El Consejo General de Procuradores (CGPE), reunido esta mañana en Madrid en Comisión Permanente, ha valorado "muy positivamente" los pasos dados por el Gobierno tras la aprobación del Proyecto de Ley de Enjuiciamiento Civil, que confiere a este cuerpo nuevas atribuciones.
Esta reforma contempla, entre otros aspectos, modificar las funciones del procurador para agilizar los trámites procesales y reducir la carga de trabajo de los órganos judiciales, eliminando la necesidad de contar con dos testigos para la validez de la notificación.
El nuevo texto atribuye igualmente a los procuradores la realización de todos los actos de comunicación al resto de partes, testigos, peritos y otras personas que, sin ser parte en el juicio, deban participar en él. Para ello, los colegios de procuradores estarán obligados a habilitar los medios necesarios de forma que pueda garantizarse el envío y recepción de notificaciones electrónicas en todo el territorio nacional a partir del 1 de enero de 2016.
En opinión de su presidente, Juan Carlos Estévez, la acción del Ejecutivo "viene a llenar, al menos parcialmente, una vieja reivindicación de la Procura al haber conseguido la capacidad de certificación para la realización de actos de comunicación, lo que redundará en una justicia más ágil y más temprana".
El máximo representante de los procuradores españoles también ha puesto de manifiesto su satisfacción "por la exención de las personas físicas en lo referente al pago de la tasa judicial".
Con todo, el CGPE considera que "todavía quedan pasos que dar para la modernización de nuestra Justicia" y ofrece su colaboración al Ministerio de Justicia para cualquier avance "legislativo y práctico".