El Juzgado de Menores número 1 de Las Palmas ha impuesto una medida de 55 horas de prestaciones en beneficio de la comunidad a tres menores que asaltaron el colegio donde ensayaban los niños del proyecto llamado “Barrio Orquestados”, robando e inutilizando instrumentos musicales por valor de más de 2.100 euros. La organización, que forma a niños sin recursos, renunció expresamente a reclamar por daños y perjuicios, y aceptó que los autores del robo se redimieran colaborando con el proyecto
Las medidas impuestas por la autoridad judicial se concretan en la asistencia y ayuda en las clases de Barrios Orquestados, “limpiando instrumentos, participando y colaborando con las distintas tareas que les asignen los profesores en ensayos y actuaciones que lleven a cabo”.
La sentencia declara probado que en junio de 2017 los tres menores isleños de entre 14 y 15 años, junto a otros niños inimputables -menores de 14 años- asaltaron un colegio de Las Palmas y se apoderaron, entre otras cosas, de instrumentos musicales por valor de 2.190 euros, propiedad del proyecto Barrios Orquestados.
Durante el juicio de ayer, los responsables del proyecto no sólo renunciaron expresamente a reclamar a los condenados daños y perjuicios por el robo de los instrumentos sino que aceptaron que los menores fueran condenados a trabajar para la organización a la que habían perjudicado.
Con esta medida, dice el fallo, los menores a los que se ha impuesto la medida “deberán aprender el daño que han causado a otros niños que, como ellos, se vieron durante un tiempo privados de poder tocar sus instrumentos, y disfrutar haciéndolo y aprendiendo”.
La magistrada del juzgado canario insta a los niños a “interiorizar” la labor encomendada, y les invita a que su actividad con Barrios Orquestados “les sirva también como instrumento, pues el instrumento que mejor están aprendiendo a tocar los niños de Barrios Orquestados es el del cambio, y (los condenados) lo deberán aprender también".