La valoración social de la Abogacía continúa mejorando, situándose por encima de otros organismos e instituciones relacionadas con el ámbito jurídico y de la Justicia, como los notarios, los jueces y la propia administración de Justicia.

Así lo puso de manifiesto el sociólogo y director del estudio, Juan José Toharia, en la presentación del V Barómetro externo de la Abogacía, que tuvo lugar en la sede del CGAE.

Razones para una buena imagen

Según Toharia, las razones que justifican esta opinión son las siguientes:

1. La Abogacía es percibida como una entidad orientada a la defensa del bien común.

2. Ha aumentado el número de ciudadanos que ha acudido a un abogado durante el último año, y su experiencia ha sido positiva (se aprecia en los abogados buena preparación, entrega a la defensa de los intereses de su cliente y precios razonables).

3. Se aprecia la labor de la Abogacía en relación con la justicia gratuita, en contraste con la falta de atención dispensada por las instituciones públicas.

3. Se aprecia una buena organización colegial de la profesión, a distintos niveles, que garantiza un nivel homogéneo de calidad en la Abogacía española, de forma que no se aprecian diferencias de calidad entre los abogados de distintas zonas geográficas.

Este dato se confirma, además, por la buena valoración que presentan los Colegios de abogados entre los propios colegiados, sobre todo entre los abogados jóvenes y las mujeres. Los profesionales perciben a los Colegios como un cauce para el mejor desarrollo de la profesión.

Alta valoración de la atención, trato y preparación de los abogados

El Barómetro muestra que entre quienes alguna vez han acudido al despacho de un abogado (56% de la población), el grado de satisfacción con los servicios profesionales recibidos sigue manteniéndose a un nivel muy elevado.

La satisfacción de conjunto es puntuada con un 7.0, destacando de modo especial la atención y el trato recibidos (7.9 de nota media), así como la preparación técnica del abogado y su interés por el asunto encomendado (7.3 y 7.2, respectivamente).

Incluso el importe de los honorarios cobrados merece una evaluación positiva (6.5): la relación coste/beneficio que implica recabar asistencia letrada es percibida de forma favorable por quienes han utilizado alguna vez los servicios de un abogado. Algo que queda confirmado por el hecho de que el resultado conseguido sea evaluado con un asimismo sustancial 6.6.

La imagen de la Administración de Justicia

En contraste con la imagen anterior, la percepción social que muestra el estudio sobre la Administración de Justicia es menos positiva.

En concreto, un 53% de los encuestados cree que funciona mal y un 80% que no está bien organizada, por lo que, con los medios de los que dispone no puede contribuir con eficacia y rapidez a investigar y castigar la corrupción.

Además, y como dato quizás más preocupante, la percepción social más extendida es que en muchas ocasiones no sirve de nada ganar un pleito pues, en la práctica las sentencias o no se cumplen o se cumplen tarde y mal.

El Barómetro muestra que se la percibe como una  entidad compuesta por profesionales competentes, tan buenos como los de cualquier otro país de la UE, y razonablemente independientes, pero sometidos a muchas presiones, especialmente políticas.

La percepción unánime es que todos los Gobiernos han mostrado más interés en alinearla con sus intereses que en dotarla de los medios necesarios para cumplir sus fines. Nadie ha conseguido convencer a la ciudadanía de que ha hecho lo posible por mejorar la Justicia.

Este estudio se ha llevado a cabo entre el 29 de octubre y el 2 de noviembre de este año, por medio de 1.000 entrevistas telefónicas a individuos mayores de 18 años de todo el territorio nacional, con un error de muestro estimado de +/- 3.2 puntos.