Los abogados de toda la Unión Europea, a través de sus colegios, consejos  y otras instituciones de representación profesional, se han comprometido a trabajar en sus respectivos países por la armonización de los actuales códigos deontológicos con el objetivo de establecer una “ética común de la abogacía”.

El compromiso fue alcanzado como conclusión final de la reunión intermedia de la Federación Europea de Colegios de Abogados (FBE), celebrada estos días en el Colegio de Abogados de Valencia (ICAV), y contó con el voto unánime de los representantes de un colectivo constituido por más de 525.000 letrados distribuidos en un total de 21 países.

Tal como explicó el decano de la abogacía valenciana, Francisco Real, “Los abogados europeos hemos dado un gran paso adelante en Valencia, al adoptar la decisión unánime de impulsar las normas que sean necesarias en los países de la Unión para llegar a armonizar el código deontológico de la abogacía. El ciudadano europeo tiene cada vez mayor movilidad y, por ello, debe encontrar las mismas garantías en su asistencia jurídica tanto en España como en Francia o en Alemania, para la correcta y legítima defensa de sus intereses”.

El diputado responsable del área de Internacional del ICAV y co-organizador de la reunión de FBE en Valencia, Mariano Durán, resaltó el gran trabajo desarrollado por los representantes de la abogacía europea reunidos en Valencia durante tres jornadas y ha subrayado la necesidad de “impulsar conjuntamente la cultura de la resolución extrajudicial de conflictos, algo por lo que el Colegio de Abogados de Valencia está invirtiendo un gran esfuerzo desde hace años”.

Acuerdo por la mediación

La otra gran conclusión de la reunión de la abogacía europea en Valencia ha sido la adopción de una resolución conjunta en materia de mediación, por la cual todos los miembros de la Federación Europea de Colegios de Abogados (FBE) se han comprometido a impulsar esta figura alternativa al pleito judicial en sus respectivos países, y a defender el papel protagonista del abogado en estos procesos.

Tal como recoge la resolución de la FBE alcanzada en Valencia este fin de semana, “la participación del abogado debería ser obligatoria en los ámbitos en los que la mediación pueda tener una consecuencia jurídica, sin perjuicio de que otros profesionales puedan participar activamente en el proceso, con el objetivo de salvaguardar las garantías de los ciudadanos”.

Finalmente, en el marco de la reunión intermedia de la FBE, se ha creado una comisión o stage que funcionará como red de intercambio de información entre los abogados de los distintos países miembros en materia de mediación, tanto desde el punto de vista de la formación como para actualizar los conocimientos de los profesionales en cuanto a legislación internacional en la materia.