Los dirigentes de la Unión Europea han mantenido en Bruselas las primeras conversaciones formales sobre la estrategia conocida como "Europa 2020", que la Comisión presentó el mes pasado.

En una declaración conjunta, los 27 anuncian su acuerdo en torno a la mayoría de los puntos del plan, entre los que figura una mayor coordinación entre las políticas económicas nacionales y la europea. Y es que, a su juicio, hará falta mayor cooperación no sólo para salir de la crisis financiera, sino también para afrontar desafíos a largo plazo tales como la globalización, el cambio climático y el envejecimiento demográfico.

El acuerdo incluye tres objetivos cuantitativos sobre creación de empleo, mayor gasto en I+ D y cumplimiento de objetivos medioambientales. Otros dos objetivos propuestos por la Comisión – aumentar los niveles educativos y la inclusión social – se estudiarán más detenidamente en la cumbre del próximo mes de junio.

Tal como recomendaba el Ejecutivo europeo, los dirigentes han acordado que toda meta general para el conjunto de la Unión se desglose en objetivos particulares para cada país miembro, lo que no ocurría en la anterior estrategia a diez años. En los debates sobre esos objetivos nacionales participará la Comisión, pero será cada gobierno quien decida.

En junio los dirigentes echarán cuentas y decidirán si hacen falta medidas de la UE para que las metas europeas sean iguales a la suma de las nacionales.

Los gobiernos también deberán explicar en detalle cómo piensan alcanzar esos objetivos a través de los llamados "Planes Nacionales de Reforma", que también deberán abordar los principales obstáculos al crecimiento. Los resultados se someterán a escrutinio en forma de informes anuales publicados para toda la UE.

Por otra parte, y tras el acuerdo de la eurozona sobre el plan de rescate de Grecia, el Consejo ha pedido a la Comisión que en junio proponga cómo mejorar la coordinación entre los países que utilizan la divisa común. En los últimos meses el euro ha perdido valor debido a los temores que entre los inversores suscita el alto nivel de endeudamiento de Grecia y otros países miembros.