El vicepresidente primero ha destacado, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, que la voluntad del Gobierno es acelerar la reestructuración del sistema financiero, "singularmente de las cajas de ahorro". Para ello, el Ministerio de Economía y Hacienda está elaborando un plan en contacto con la Confederación Española de Cajas de Ahorro y con el Banco de España.

El objetivo del plan, según Alfredo Pérez Rubalcaba, es "reforzar la solvencia y la credibilidad de las cajas de ahorro". Para mejorar la solvencia, ha dicho, hace falta incrementar el capital, y para mejorar la credibilidad es necesario hacer esfuerzos de transparencia.

El vicepresidente primero ha asegurado que el Ejecutivo está trabajando en ambas líneas y no tardará mucho en presentar el plan. "Estamos en este momento más en los contenidos que en los instrumentos jurídicos", ha indicado.

Pérez Rubalcaba ha añadido: "Si hemos pedido una reforma acelerada del sector, lo lógico es que nosotros lo hagamos también aceleradamente". Pero ha matizado: "Cuando el Gobierno habla de acelerar, está hablando de ganar solvencia y credibilidad y esto no quiere decir que no la tengamos ahora, sino que queremos tener más".

Preguntado por la posibilidad de que se hayan depreciado los activos de las cajas desde los test de estrés que se realizaron en el mes de  julio, ha subrayado que "aunque se han pasado con brillantez los test de solvencia, algunas circunstancias macroeconómicas han cambiado", y, "para salir al paso de dudas que existen", hay que hacer "un plus de transparencia".

Pacto social

El Consejo de Ministros ha analizado el trabajo que está llevando a cabo el Gobierno con los sindicatos para alcanzar un acuerdo en distintos temas, en especial en materia de pensiones.

Alfredo Pérez Rubalcaba ha informado de que hay varias reformas encima de la mesa, que se están tratando en distintas mesas de diálogo. En estas mesas se han incluido materias como las pensiones, el mercado laboral, los expedientes de regulación de empleo, la negociación colectiva y las políticas activas de empleo.

El vicepresidente ha aclarado que, a petición de los sindicatos, se incluyeron en la agenda de negociación otras materias como las políticas industriales y energéticas, aunque esas mesas aún no se han creado.

"No hemos hablado de política industrial ni de política energética. No hemos hablado de I+D+i", ha dicho. "Lo que hemos hecho es configurar una agenda y en algún momento pretendemos hablar de estos temas, y ya veremos con qué profundidad y extensión porque algunos de ellos son de ámbito estrictamente parlamentario", ha añadido.

Pérez Rubalcaba ha reiterado: "Sólo se ha hablado de los temas que competen a los agentes sociales: pensiones, empleo, políticas activas y expedientes de regulación de empleo".

Asimismo, ha confirmado que, en paralelo a la negociación con los agentes sociales, el Gobierno está hablando con los grupos parlamentarios: "Hemos hablado con CiU, con el PNV y con el PP".

El vicepresidente primero considera que para llegar a acuerdos "es mejor negociar con discreción", y cree que "una negociación televisada es muy difícil que salga".

Alfredo Pérez Rubalcaba ha asegurado que ha constatado una voluntad firme de diálogo de las tres partes: empresarios, sindicatos y Gobierno. "No sólo porque he oído declaraciones de la CEOE y de los sindicatos, es que he visto su comportamiento en la mesa. Y por tanto, si de algo no tiene ninguna duda el Gobierno es que hay una voluntad de dialogar, o lo que es lo mismo una voluntad de acordar", ha afirmado.

En cuanto a la posibilidad de acuerdo con los agentes sociales para alcanzar un gran pacto laboral y social, ha asegurado: "No lo veo cerca, pero es posible. Creo que todavía son muchas las cosas que nos separan porque las restricciones de unos y de otros son importantes".

Pérez Rubalcaba estima que alcanzar un acuerdo sería muy beneficioso para la economía, para la credibilidad interior y exterior de España, para la confianza de los agentes financieros, de los mercados, de los empresarios y trabajadores y para la fortaleza institucional. "No veo más que ventajas a un acuerdo de esta naturaleza y en consonancia está el trabajo que estamos desarrollando para sacarlo adelante", ha añadido.

Preguntado sobre si el Gobierno mantendría la fecha del viernes 28 de enero para aprobar su anteproyecto de ley de reforma de las pensiones si en esa fecha no se hubiera alcanzando un acuerdo, el vicepresidente ha afirmado que sí.