La votación de esta semana podría significar que once Estados miembros de la Unión Europea siguen adelante con el impuesto sobre las transacciones financieras destinado a garantizar una distribución más justa de los costes necesarios para lidiar con la crisis. Un acuerdo sobre el impuesto, respaldado por el Parlamento en mayo, no logró el consenso, lo que llevó a algunos países a solicitar que el procedimiento pueda llevarse a cabo por los Estados miembros que lo deseen.

En mayo de 2012, los diputados apoyaron la propuesta de la Comisión Europea (0,1% en acciones y bonos y 0,01% para los derivados) argumentando que el impuesto aseguraría una justa contribución del sector financiero a la solución de la crisis. El Parlamento Europeo trató de ampliar este impuesto al mayor número de operadores (incluidos los de fuera de la Unión Europea frente a los instrumentos usados en la Unión Europea)

Algunos Estados miembros se opusieron, en especial Reino Unido y Suecia, indicando que el Consejo no puede alcanzar la unanimidad requerida.

Bélgica, Alemania, Estonia, Grecia, España, Portugal, Francia, Italia, Austria, Portugal, Eslovenia y Eslovaquia indicaron su deseo de introducir una tasa a  las transacciones financieras, acompañando a las propuestas de la Comisión bajo un marco de procedimiento de cooperación.

Compromiso de cooperación

Si no se alcanza el consenso entre todos los Estados miembros, nueve o más de ellos tendrán que considerar la posibilidad de continuar, sin los países que no quieren formar parte del acuerdo. Desde que la cooperación reforzada fue introducida en el Tratado de Amsterdam en 1997, esto solo ha ocurrido dos veces: con una ley de divorcio en 2010 y con la patente europea, que se votará durante esta sesión plenaria.

Votación del Parlamento: un paso necesario en el procedimiento

Esta votación permite evaluar la existencia de condiciones legales para llevar a cabo el mecanismo de la cooperación reforzada. La revisión de la propuesta de la Comisión relativa a un impuesto común de transacciones financieras para países que quieran participar será presentada en una etapa posterior, y luego el Parlamento Europeo evaluará su contenido.

La resolución de la ponente socialista griega Anni Podimata pide a la Comisión que examine las consecuencias de la adopción de este impuesto en los países participantes y no participantes y prepare una revisión de la propuesta original a la vista de esta evaluación.

El Presidente del Parlamento Europeo, Martin Schulz, se pronunció sobre la adopción de la tasa en octubre de 2012. En su opinión, "durante más de dos años, el Parlamento Europeo ha pedido y apoyado la adopción de esta tasa, y aunque hubiéramos preferido una adopción en toda la Unión Europea, la participación de once Estados miembros es un buen comienzo".

El debate en el pleno del PE tendrá lugar el martes 11 de diciembre, y la votación, el miércoles 12.