El Consejo de Ministros ha recibido un informe del Ministro de Industria, Turismo y Comercio sobre la Orden Ministerial que actualiza la tarifa eléctrica a partir del próximo 1 de julio. Esta Orden Ministerial ajusta las tarifas a la evolución real que ha tenido el coste de los carburantes en los primeros seis meses del año y a la mejor estimación para el segundo semestre, y propone un incremento del 5,6 por 100 de media de la tarifa eléctrica.
Según se afirma, no habrá más revisiones de las tarifas este año. Los objetivos de la revisión tarifaria propuesta serían:
Evitar que se incremente el “déficit tarifario”. El déficit tarifario es un reconocimiento de deuda a las empresas eléctricas, por el hecho de que suministran la electricidad a los consumidores a un precio tarifario que es inferior al precio de coste de la energía. Es una “hipoteca invisible”.
Los usuarios, a través de las tarifas futuras, pagarán esta deuda. La normativa establece que el déficit se recuperará en un periodo de quince años y se repercute en partes proporcionales cada año en la tarifa. Mientras tanto, las compañías cobran la deuda a través de un crédito bancario a largo plazo. El retorno del crédito principal y los intereses anuales es la parte que automáticamente se incluye en la tarifa del año siguiente.
Es necesario acabar con el déficit tarifario porque es insostenible desde el punto de vista de su financiación y porque perjudica a los consumidores actuales y futuros. Además, aumenta las emisiones de CO2, contribuyendo negativamente al cambio climático.
Consumo responsable de electricidad. La propuesta de revisión de tarifas eléctricas a partir del 1 de julio persigue el ahorro y la eficiencia en el consumo eléctrico, mediante las siguientes medidas:
- Facturación mensual. La Orden establece que la facturación a los consumidores domésticos se efectúe con periodicidad mensual, lo que les permitirá contar con una mayor inmediatez en la reacción ante sus consumos, aumentando la elasticidad de la demanda y fomentándose el ahorro y la eficiencia energética.
- Mínimo de consumo gratuito (12,5kWh al mes). Todos los consumidores domésticos tendrán un mínimo gratuito en su factura eléctrica. Se trata de una cantidad de kWh que no tendrá coste alguno y se sitúa en torno al 10 por 100 del consumo de un hogar tipo. Esto significa que cualquier consumidor doméstico pagará sólo el término de potencia cuando el consumo sea inferior al mínimo, por ejemplo, si se va de vacaciones.
- Progresividad intra-tarifaria. La progresividad intra-tarifaria significa que, dentro de una tarifa concreta, cuánto menor es el consumo total, menor resultará el precio de cada kWh consumido. Ello fomenta el ahorro y se concreta en un diseño tarifario con las siguientes características:
- Toda la subida se produce en el término de energía, congelándose el de potencia.
- La facturación del término de energía es por escalones. Los primeros kWh son gratuitos para todos los consumidores domésticos, el consumo medio se tarifica al precio normal de la tarifa y los excesos sobre el consumo familiar normal se penalizan con un recargo.
- La tarifa social. Serán susceptibles de acogerse a la nueva tarifa social unos 4,5 millones de hogares españoles. Para ello, deberán justificar que cumplen los requisitos de potencia (menos de 3KW de potencia contratada) y que se trata de su residencia habitual. Hay que señalar que 3KW permiten el uso simultáneo de la iluminación, el frigorífico, la televisión y otro electrodoméstico intensivo en electricidad, como la lavadora, el ordenador, la plancha, etc. Los hogares también tendrán que tener instalado el Interruptor de Control de Potencia, lo cual ya es obligatorio y evitará el fraude en la aplicación de la medida. Habrá un formulario estandarizado de fácil cumplimentación y que se entregará en la oficina de la compañía para que ésta lo tramite. Periódicamente, cada añLa , el cliente deberá justificar que sigue cumpliendo estos requisitos.
Las tarifas sociales tendrán el término de potencia gratuito. Esto quiere decir que si no se consume nada, no se paga nada. Como consecuencia de esta medida, los consumidores de la tarifa social se ahorrarán cerca del 16% respecto a la factura que vienen pagando hasta ahora.
Competitividad y empleo. Con el objetivo de incrementar la competitividad del tejido empresarial y fomentar el empleo, por primera vez la subida de la tarifa eléctrica que afecta mayoritariamente a las pymes es inferior a la subida de las tarifas domésticas.