La Eurocámara aprobó la semana pasada un informe relativo al lugar prioritario que ocupa la protección de la infancia en la acción exterior de la UE. El informe sugiere introducir un etiquetado para los productos importados que asegure que han sido realizados sin trabajo infantil. En la misma línea, exige a los gobiernos de los terceros países que respeten las normas internacionales sobre los derechos del niño, especialmente las referidas a la prestación de servicios sociales básicos.
El 98% de los niños que sufren una situación de pobreza extrema viven en países en vías de desarrollo. Los diputados enfatizan que, en su acción exterior, la Unión Europa debe exigir firmemente a los gobiernos de los terceros países el cumplimiento de las normas internacionales en materia de derechos del niño, en particular en lo que respecta a la prestación de servicios sociales básicos (párrafo19). Además, piden que se incluya la lucha contra la impunidad en sus acciones exteriores y en las relaciones con los terceros países como una medida importante para prevenir violaciones de los derechos del niño (párrafo 25).
El documento insta a la Comisión a que proponga un método uniforme para el etiquetado de productos importados en la UE de manera que se certifique que han sido fabricados sin recurrir trabajo infantil en cada fase de la cadena de producción (párrafo 42).
Además, insiste en que ningún niño debe ser privado del derecho fundamental a la educación debido a la falta de recursos económicos y reitera su llamamiento a todos los gobiernos de los países en desarrollo para abolir las tasas escolares directas e indirectas para la educación básica (párrafo 37).
La ponente del informe, Glennys KINNOCK (PSE, Reino Unido) recalca la situación especialmente difícil de los niños infectados de VIH, enfermos de sida y huérfanos del sida, y anima a la Comisión a invertir en programas destinados a prevenir y responder a la violencia sexual, y que debe incluir el suministro de equipos de profilaxis a posteriori, para evitar la infección (párrafo 52).
Destaca la necesidad urgente de prestar una atención especial a los niños más vulnerables y excluidos socialmente, como los discapacitados, los inmigrantes, los niños de las minorías, o los menores que no están al cuidado de sus padres. Sugiere a la Unión Europea que, en su acción exterior, preste especial atención a la situación de los niños ante la discriminación, incluidos los niños en conflicto con la ley y los niños privados de su libertad y ubicados en instituciones cerradas (párrafo 55).
Perspectiva de género
El texto insta a la Unión a que conceda prioridad al derecho a la educación, especialmente para las niñas, en los programas de ayuda y en el marco del diálogo con los países socios, y subraya la necesidad de luchar contra las discriminaciones persistentes en las familias desheredadas que no pueden sufragar los costes de escolarización para todos sus hijos y optan por escolarizar sólo a los niños (párrafo 33).
Asimismo, solicita que se preste una atención especial a las necesidades de las madres niñas en situaciones de conflicto y de postconflicto, de las niñas internamente desplazadas, así como de las niñas que son víctimas de violaciones y violencia sexual (párrafo 49).
Acción de la UE
Los parlamentarios recomiendan el nombramiento de un representante especial de la UE en este ámbito, con el fin de garantizar la visibilidad y la representación de los derechos del menor (párrafo 21).
Alientan a los Estados miembros a que cumplan sus compromisos de ofrecer financiación suficiente (párrafo3). Remarcan que el apoyo presupuestario general de la UE debe incluir fondos para la creación de capacidades para ministerios relevantes (tales como los ministerios de Bienestar, Sanidad, Educación y Justicia), con el fin de asegurar que tienen las políticas y las herramientas adecuadas para presupuestar y aplicar servicios para los niños (párrafo 18).
