J.M. Barjola. -Parece que el monopolio de Renfe y Adif sobre la red ferroviaria española tiene los días contados. La CNMC ha vuelto a instar al Gobierno a tomar cartas en el asunto sobre la liberalización del sector del transporte ferroviario de pasajeros, esta vez a través de un informe donde avisa de los retos a afrontar para atraer a nuevos competidores. 

En el documento, de más de cien páginas, el órgano regulador cree que existe una gran oportunidad para atraer a la competencia por el poco uso de las instalaciones ferroviarias, pero al mismo tiempo considera un obstáculo para la competencia que Renfe y Adif permanezcan suscritas al Ministerio de Fomento, lo que les otorga una situación de ventaja.

La CNMC exige garantías de estabilidad en el sector para garantizar las nuevas inversiones. Renfe ha ostentado el monopolio de la gestión de los ferrocarriles en España durante más de seis décadas, lo que la convierte en el gestor histórico de las vías ferroviarias del país. Por ello, la ventaja con respecto a los competidores será aplastante, tanto en experiencia como en personal e infraestructuras, y por ello, dice la Comisión, es necesario tomar medidas para que esto no ocurra. 

Por ello la Comisión avisa: la venida de competidores no es segura si no se otorgan garantías de que la competencia se dará en igualdad de condiciones, lo que conllevará el fin de alguno de los privilegios históricos de Renfe. 

Las medidas para garantizar la competencia según la CNMC

Para conseguir su objetivo, la CNMC lanza una batería de medidas a ejecutar antes de diciembre de 2020. Con ello, a criterio de la Comisión, se garantizaría una sana competencia que beneficie en última instancia a los usuarios y mejore las redes. 

Las medidas que enumera la CNMC son las siguientes:
1.    Mantener la separación estructural de ADIF y ADIF Alta Velocidad respecto de Renfe.
2.    Asegurar la plena autonomía de ADIF, ADIF Alta Velocidad y de Renfe.
3.    Garantizar un acceso adecuado y suficiente a la capacidad en la infraestructura ferroviaria e instalaciones de servicio.
4.    Mejorar el sistema por el que se deciden los cánones ferroviarios.
5.    Asegurar el acceso de los nuevos operadores al material rodante y a su mantenimiento.
6.    Garantizar una competencia efectiva en los mercados de formación y de contratación de maquinistas.
7.    No prorrogar el contrato de adjudicación directa de los servicios OSP (Obligación de servicio público) a Renfe.
8.    Evitar que la prestación de los servicios OSP proporcione una ventaja competitiva en los mercados liberalizados al operador histórico

Acabar con la adjudicación directa de los media y corta distancia

La CNMC quiere aniquilar la adjudicación directa a Renfe de la gestión de las obligaciones de servicio público (OSP), lo que ocupa básicamente la gestión de Cercanías y Media Distancia. 

La concesión de Renfe con respecto a Cercanías y Media Distancia acaba en 2027. Llegada esta fecha, la CNMC quiere que no se vuelva a renovar más y se renuncie a la posibilidad de prórroga del contrato. Los competidores nuevos no podrán luchar por un lugar en el mercado si Renfe dispone de un sistema de subvenciones privilegiado. Por ello, la Comisión aboga por que el acceso a la gestión de Cercanías y Media Distancia se realice por concurso público, para apartar al operador histórico de su posición dominante. 

Según el informe, la experiencia de liberalización ya se ha dado en otros países de la Unión Europea como Alemania y Francia, con resultados, en general, beneficiosos para los usuarios.