Ley 7/1998, de 6 de julio, de caza de Canarias

• Expandir / Contraer 韓dice sistem醫ico
• Exposici髇 de Motivos
• CAPITULO I.�Disposiciones generales
  • Art韈ulo 1燨bjeto y finalidad
  • Art韈ulo 2燣a acci髇 de cazar
  • Art韈ulo 3燛l cazador
  • Art韈ulo 4燣as especies de caza
  • Art韈ulo 5燫educci髇 y ampliaci髇 de especies cineg閠icas
  • Art韈ulo 6燣as armas
  • Art韈ulo 7燚e los perros de caza y del hur髇
  • Art韈ulo 8燭itular de derechos cineg閠icos
• CAPITULO II.�De los terrenos en relaci髇 con la caza
  • Art韈ulo 9燙lasificaci髇
  • Art韈ulo 10燭errenos de aprovechamiento cineg閠ico com鷑
  • Art韈ulo 11燭errenos sometidos a r間imen cineg閠ico especial
  • Art韈ulo 12燣a caza en los espacios naturales protegidos y zonas especiales de conservaci髇
  • Art韈ulo 13燣os refugios de caza
  • Art韈ulo 14燣as zonas de caza controlada
  • Art韈ulo 15燣os cotos sociales de caza
  • Art韈ulo 16燣os cotos privados de caza
  • Art韈ulo 17燣os cotos intensivos de caza
  • Art韈ulo 18燣os terrenos cercados
  • Art韈ulo 19燣as zonas de seguridad
• CAPITULO III.�De la propiedad de las piezas de caza
  • Art韈ulo 20燚isposici髇 general
• CAPITULO IV.�De la planificaci髇 y de la gesti髇 de la caza
  • Art韈ulo 21燣os planes insulares de caza
  • Art韈ulo 22燣os planes t閏nicos de caza
  • Art韈ulo 23燣a orden regional de caza
  • Art韈ulo 24燣os vedados de caza
  • Art韈ulo 25燩rotecci髇 de los cultivos
  • Art韈ulo 26燙ontrol de poblaciones animales
  • Art韈ulo 27燣os concursos de caza y los campos de entrenamiento y adiestramiento
• CAPITULO V.�De los requisitos generales para cazar
  • Art韈ulo 28燫equisitos generales
  • Art韈ulo 29燣a licencia de caza
  • Art韈ulo 30燣a prueba de aptitud
  • Art韈ulo 31燣os permisos
• CAPITULO VI.�De la responsabilidad por da駉s
  • Art韈ulo 32燫esponsabilidad por da駉s
  • Art韈ulo 33燛l seguro obligatorio
  • Art韈ulo 34燛l seguro voluntario
• CAPITULO VII.�De los aspectos sanitarios de la caza
  • Art韈ulo 35燛nfermedades
• CAPITULO VIII.�De la representaci髇 y de la vigilancia de la caza
  • Art韈ulo 36燛l Consejo Regional de Caza
  • Art韈ulo 37燣os Consejos Insulares de Caza
  • Art韈ulo 38燚isposiciones comunes al Consejo Regional y a los Consejos Insulares de Caza
  • Art韈ulo 39燣as sociedades colaboradoras de cazadores
  • Art韈ulo 40燣a vigilancia de la caza
• CAPITULO IX.�De las limitaciones y prohibiciones
  • Art韈ulo 41燫eintroducci髇, traslado y suelta de especies cineg閠icas
  • Art韈ulo 42燩rohibiciones generales
  • Art韈ulo 43燗rtes y medios de caza prohibidos
• CAPITULO X.�De las infracciones y sanciones
  • Art韈ulo 44燚isposiciones generales
  • Art韈ulo 45燛l Registro Regional de Infractores de Caza
  • Art韈ulo 46燚efinici髇 y clasificaci髇
  • Art韈ulo 47營nfracciones leves
  • Art韈ulo 48營nfracciones menos graves
  • Art韈ulo 49營nfracciones graves
  • Art韈ulo 50營nfracciones muy graves
  • Art韈ulo 51燬anciones
  • Art韈ulo 52燙omisos
  • Art韈ulo 53燫etirada de armas de caza
  • Art韈ulo 54燚evoluci髇 de armas de caza
  • Art韈ulo 55燙ircunstancias modificativas de la responsabilidad
  • Art韈ulo 56燩rescripci髇 de infracciones
  • Art韈ulo 57燚elitos y faltas de caza
  • Art韈ulo 58燫esponsabilidad civil del cazador
• DISPOSICIONES ADICIONALES
  • Primera
  • Segunda
  • Tercera
  • Cuarta
• DISPOSICIONES TRANSITORIAS
  • Primera
  • Segunda
  • Tercera
  • Cuarta
• DISPOSICIONES FINALES
  • Primera
  • Segunda
  • Tercera

Art韈ulo 1 Objeto y finalidad

Es objeto de la presente Ley regular el ejercicio de la caza dentro de sus distintas modalidades en el 醡bito territorial de la Comunidad Aut髇oma de Canarias, y su finalidad, la de fomentar, proteger, conservar y aprovechar ordenadamente los recursos cineg閠icos, armoniz醤dolos con los diversos intereses afectados y con la preservaci髇 y mejora de los h醔itats de las diferentes especies objeto de la caza.

Art韈ulo 2 La acci髇 de cazar

Se considera acci髇 de cazar la actividad deportiva ejercida por el hombre mediante el uso de armas, artes y otros medios apropiados o autorizados para buscar, seguir, rastrear y cobrar los animales definidos por esta Ley u otras disposiciones como piezas de caza, para apropiarse de ellas o facilitar su captura.

Art韈ulo 3 El cazador

1. El derecho a cazar sin armas corresponde a toda persona mayor de catorce a駉s que est� en posesi髇 de la licencia de caza y cumpla con los dem醩 requisitos establecidos en la presente Ley. Para obtener la licencia de caza, el menor de edad no emancipado necesitar� autorizaci髇 escrita de la persona que legalmente lo represente.

2. No obstante lo dispuesto en el apartado anterior, para poder cazar con cualquier tipo de armas autorizadas, las personas mayores de diecis閕s a駉s y menores de diciocho a駉s deber醤 ir acompa馻das por uno o m醩 cazadores mayores de edad que est閚 en posesi髇 de licencias de armas.

3. Los morraleros, auxiliares y acompa馻ntes tendr醤 que llevar la documentaci髇 correspondiente seg鷑 se establezca reglamentariamente.

Art韈ulo 4 Las especies de caza

Las especies objeto de caza se clasifican en dos grupos: caza mayor y caza menor. Se consideran piezas de caza mayor el mufl髇 y el arru�, y piezas de caza menor el conejo, la perdiz moruna, la perdiz roja, la t髍tola com鷑, la codorniz com鷑, la paloma brav韆 y los animales asilvestrados.

Art韈ulo 5 Reducci髇 y ampliaci髇 de especies cineg閠icas

El Gobierno de Canarias, o韉os los cabildos insulares y mediante Decreto, podr� reducir motivadamente, en todo o en parte del archipi閘ago, las especies enumeradas en el art韈ulo 4, as� como determinar otras especies susceptibles de aprovechamiento cineg閠ico, sin m醩 limitaciones que las previstas en las Leyes territoriales, del Estado y de la Uni髇 Europea.

Art韈ulo 6 Las armas

1. Respecto al uso y tenencia de armas de caza, se estar� a lo dispuesto en la legislaci髇 espec韋ica del Estado.

2. Para utilizar armas o medios que precisen de autorizaci髇 especial ser� necesario estar en posesi髇 del correspondiente permiso.

Art韈ulo 7 De los perros de caza y del hur髇

1. Los propietarios de los perros de caza cumplir醤 las normas sobre medidas higi閚ico-sanitarias generales y las ordenanzas municipales dictadas al respecto, as� como lo previsto en la Ley 8/1991, de 30 de abril, de protecci髇 de los animales.

2. El tr醤sito de perros por los terrenos cineg閠icos y su utilizaci髇 con fines de caza se ajustar� a lo previsto en esta Ley y a lo que se determine reglamentariamente.

3. El hur髇 se utilizar� como elemento auxiliar para la caza del conejo siempre que cuente con el registro sanitario y vaya provisto del correspondiente z醠amo o bozal atado al cuello, y s髄o cuando el cazador est� acompa馻do de perros podencos canarios u otros de caza de pelo.

4. Los cabildos insulares llevar醤 un registro y control de los perros de caza y promover醤 la conservaci髇 y el fomento de las razas aut骳tonas por s� o en colaboraci髇 con las sociedades de cazadores.

Art韈ulo 8 Titular de derechos cineg閠icos

Los derechos y obligaciones establecidos en la presente Ley, en cuanto se relacionan con los terrenos cineg閠icos, corresponder醤 a la Administraci髇 de la Comunidad Aut髇oma y a cuantas entidades o particulares obtuvieran la autorizaci髇 administrativa correspondiente para el aprovechamiento cineg閠ico privado.

Art韈ulo 9 Clasificaci髇

A los efectos de la presente Ley, los terrenos se clasificar醤 en terrenos de aprovechamiento cineg閠ico com鷑 y en terrenos sometidos a r間imen cineg閠ico especial.

Art韈ulo 10 Terrenos de aprovechamiento cineg閠ico com鷑

1. Son terrenos de aprovechamiento cineg閠ico com鷑 todos los que no est閚 sometidos a r間imen cineg閠ico especial y los rurales cercados o no que, teniendo accesos practicables, carezcan de se馻les perfectamente visibles que proh韇an la entrada a los mismos.

2. La condici髇 de terrenos de aprovechamiento cineg閠ico com鷑 es independiente, en todo caso, del car醕ter p鷅lico o privado de su propiedad.

3. En los terrenos de aprovechamiento cineg閠ico com鷑, el ejercicio de la caza es libre, sin m醩 limitaciones que las fijadas en la legislaci髇 civil, en la presente Ley y disposiciones que la desarrollen.

4. La gesti髇 y administraci髇 de la caza en los terrenos de aprovechamiento cineg閠ico com鷑 corresponde a los distintos cabildos insulares.

Art韈ulo 11 Terrenos sometidos a r間imen cineg閠ico especial

1. Son terrenos sometidos a r間imen cineg閠ico especial:

• a) Los espacios naturales protegidos y zonas especiales de conservaci髇.
• b) Los refugios de caza.
• c) Las zonas de caza controlada.
• d) Los cotos sociales de caza.
• e) Los cotos privados de caza.
• f) Los cotos intensivos de caza.
• g) Los cercados.
• h) Las zonas de seguridad.

2. Los cabildos insulares podr醤 establecer un registro de los terrenos sometidos a r間imen cineg閠ico especial.

3. Los terrenos sometidos a r間imen cineg閠ico especial deber醤 estar perfectamente se馻lizados en la forma y condiciones que reglamentariamente se determinen o se establezcan en los planes insulares de ordenaci髇 del territorio.

Art韈ulo 12 La caza en los espacios naturales protegidos y zonas especiales de conservaci髇

En los espacios naturales protegidos y en las zonas especiales de conservaci髇 que se establezcan, el ejercicio de la caza se ajustar� a lo dispuesto tanto en la legislaci髇 b醩ica del Estado como en la auton髆ica, as� como en las normas declarativas y en los instrumentos de ordenaci髇 de dichos espacios o zonas.

Art韈ulo 13 Los refugios de caza

1. Cuando por razones biol骻icas, cient韋icas o educativas sea necesario asegurar la conservaci髇 de determinadas especies de la fauna cineg閠ica, a propuesta de los cabildos insulares, y en su caso, a instancia del propietario de los terrenos o de entidades p鷅licas o privadas cuyos fines sean culturales o cient韋icos, se podr醤 crear refugios de caza. Las entidades promotoras acompa馻r醤 memoria justificativa de su conveniencia y finalidad.

2. Corresponder� a la Consejer韆 del Gobierno de Canarias competente en materia de medio ambiente y conservaci髇 de la naturaleza, a propuesta de los cabildos insulares, el establecimiento de refugios de caza, previa audiencia al propietario de los terrenos, o韉o el Consejo Regional de Caza y los consejos insulares. Su vigilancia se ejercer� en los t閞minos dispuestos en el art韈ulo 40 de esta Ley.

3. La administraci髇 de los refugios de caza corresponder� en todo caso a los cabildos insulares.

4. En los refugios de caza est� prohibido, con car醕ter permanente, el ejercicio de la caza, salvo que, por razones de orden biol骻ico, t閏nico o cient韋ico, debidamente justificadas, el cabildo insular conceda la oportuna autorizaci髇, fijando las condiciones aplicables en cada caso.

5. La declaraci髇 de desafecci髇 de los refugios de caza se har� igualmente por resoluci髇 de la Consejer韆 del Gobierno de Canarias competente en materia de medio ambiente, a propuesta de los cabildos insulares o a instancias del propietario del terreno, con el informe favorable de la instituci髇 insular, acompa馻do de las razones t閏nicas que fundamenten la ausencia o desaparici髇 de los hechos que motivaron la afecci髇 del terreno. A tales efectos, ser醤 o韉os los consejos insulares correspondientes y el Consejo Regional de Caza.

Art韈ulo 14 Las zonas de caza controlada

1. Se denominan zonas sometidas a r間imen de caza controlada aqu閘las que se constituyan sobre terrenos cineg閠icos de aprovechamiento com鷑, en los cuales la protecci髇, conservaci髇, fomento y aprovechamiento de su riqueza cineg閠ica deber醤 adaptarse a los planes t閏nicos de caza que con este objeto aprueben los cabildos insulares.

2. El se馻lamiento, gesti髇 y administraci髇 de la caza en las zonas de caza controlada corresponde a los cabildos insulares, los cuales controlar醤 y regular醤 el ejercicio de la caza por s� o a trav閟 de sociedades de cazadores colaboradoras o agrupaciones de sociedades que obtengan la preceptiva declaraci髇 de entidad colaboradora. Su adjudicaci髇 se har� mediante concurso.

3. Los propietarios de los terrenos sometidos a r間imen de caza controlada tendr醤, a efectos del ejercicio de la caza en la zona, consideraci髇 de socios de la sociedad o sociedades colaboradoras adjudicatarias de su gesti髇, debiendo, en su caso, abonar la misma cuota que la estatuida para los restantes socios.

4. En los terrenos de caza controlada gestionada por una sociedad colaboradora, deber� reservarse a los cazadores ajenos a la sociedad, un n鷐ero de permisos no inferior a la cuarta parte del total, sin que el importe de los mismos pueda exceder del 50 por 100 de lo que por el mismo concepto abonan los socios. Tendr醤 preferencia en la adjudicaci髇, las sociedades federadas ubicadas en la isla y entre ellas las que, por su alcance, repercusi髇 social de sus actividades y el mayor n鷐ero de afiliados, as� lo aconsejen.

5. El tiempo m韓imo de gesti髇 de la caza controlada ser� de cinco a駉s y m醲imo de diez a駉s.

Art韈ulo 15 Los cotos sociales de caza

1. Se denominan cotos sociales de caza aqu閘los cuyo establecimiento responde al principio de facilitar el ejercicio de la caza en r間imen de igualdad de oportunidades.

2. La constituci髇 de un coto social de caza, cuya declaraci髇 y autorizaci髇 corresponde al cabildo de la isla donde aqu閘 se pretenda establecer, requerir� la aprobaci髇 de un plan t閏nico de caza, debiendo contar con el preceptivo informe del Consejo Insular de Caza.

3. La administraci髇 y la gesti髇 de estos cotos corresponder� a los distintos cabildos insulares, que deber醤 destinar en sus presupuestos las cantidades necesarias para su constituci髇 y mantenimiento.

4. El establecimiento de estos cotos podr� llevarse a cabo en terrenos propios de los cabildos insulares o sobre aquellos terrenos sometidos a r間imen cineg閠ico especial o com鷑, que, para dicha finalidad, puedan quedar a disposici髇 de los cabildos por contrataci髇 directa o por cualquier otro negocio jur韉ico v醠ido.

5. Los cazadores residentes en los municipios donde los cotos sociales est閚 ubicados, tendr醤 preferencia para disponer de un cupo m醲imo del 50 por 100 de los permisos que se otorguen.

Art韈ulo 16 Los cotos privados de caza

1. Se podr醤 constituir cotos privados de caza, con o sin 醤imo de lucro, siempre que 閟tos tengan una superficie m韓ima de 200 hect醨eas, cualquiera que sea el aprovechamiento cineg閠ico que se persiga. Los cabildos insulares, teniendo en cuenta las propuestas de los consejos insulares, podr醤 variar la superficie m韓ima exigida.

2. La constituci髇 de un coto privado de caza est� sujeta a la previa autorizaci髇 del cabildo insular donde aqu閘 radique y requerir� la aprobaci髇 de un plan t閏nico de caza y el previo dictamen del Consejo Insular de Caza.

3. Los terrenos integrantes de estos cotos podr醤 pertenecer a uno o varios propietarios colindantes que se hayan asociado voluntariamente con esta finalidad. Cuando se trate de fincas cuya propiedad corresponda pro indiviso a varios due駉s, para constituir o integrarse en un acotado, ser� preciso que concurra la mayor韆 establecida en el art韈ulo 398 del C骴igo Civil.

4. En estos terrenos la caza deber� estar protegida y fomentada, aprovech醤dose de forma ordenada. Especial protecci髇 deber� propiciarse a las especies de la fauna silvestre no cineg閠ica, con independencia de que est閚 o no incluidas en el cat醠ogo de especies amenazadas.

5. Cuando los cotos de caza no cumplan su finalidad de protecci髇, fomento y ordenado aprovechamiento cineg閠ico, los cabildos insulares podr醤 ordenar, previa incoaci髇 del oportuno expediente, la declaraci髇 de un vedado de caza y, en su caso, la revocaci髇 de la resoluci髇 que autorizaba la creaci髇 del coto.

6. Los terrenos acotados deber醤 estar perfectamente se馻lizados y delimitados por su titular.

7. Queda prohibido el subarriendo de los cotos privados de caza.

8. En los terrenos acotados de caza, los titulares cineg閠icos ser醤 responsables del cumplimiento de esta Ley y de las disposiciones que la desarrollen, sin perjuicio de la responsabilidad individual de los cazadores.

Art韈ulo 17 Los cotos intensivos de caza

1. Tendr醤 la consideraci髇 de cotos intensivos de caza aqu閘los que, localizados generalmente en terreno cineg閠ico de bajo rendimiento, se dediquen a la liberaci髇 de especies cineg閠icas criadas en cautividad con el fin de propiciar pr醕ticas deportivas, como adiestramiento de perros de caza, adem醩 de posibilitar en ellos las pruebas de aptitud del examen del cazador.

2. La constituci髇, declaraci髇 y autorizaci髇 de un coto intensivo de caza corresponde a los cabildos insulares, los cuales fijar醤 las normas de uso y funcionamiento del mismo y elaborar醤 el correspondiente plan t閏nico de caza.

3. Los cotos intensivos s髄o podr醤 ser de titularidad p鷅lica y su gesti髇 podr� llevarse a cabo de forma indirecta a trav閟 de un concesionario o de una sociedad colaboradora de cazadores.

Art韈ulo 18 Los terrenos cercados

1. A los efectos de esta Ley, son terrenos cercados aqu閘los que se encuentren rodeados materialmente por cercas, muros, vallas, setos o cualquier otro medio construido con el fin de impedir o prohibir el acceso de las personas o animales ajenos o el de evitar la salida de los propios.

2. En los terrenos cercados no acogidos a otro r間imen cineg閠ico especial, la caza estar� permanentemente prohibida, siempre que tengan se馻lizaci髇 visible, prohibiendo el paso a los mismos en los accesos practicables. Si carece de accesos practicables, no se podr� cazar en ning鷑 caso.

Art韈ulo 19 Las zonas de seguridad

1. A los efectos de la presente Ley, son zonas de seguridad aqu閘las en las que deben adoptarse medidas precautorias especiales encaminadas a garantizar la adecuada protecci髇 de las personas y sus bienes, estando permanentemente prohibido en las mismas el ejercicio de la caza con armas, as� como disparar en direcci髇 a las mismas aunque no se est� dentro de ellas.

2. Se consideran zonas de seguridad:

• a) Las v韆s y caminos de uso p鷅lico.
• b) Las aguas p鷅licas o de dominio p鷅lico y los embalses.
• c) Los n鷆leos de poblaci髇 urbanos y rurales.
• d) Las zonas habitadas y sus proximidades.
• e) Los terrenos afectos a los centros p鷅licos de investigaci髇.
• f) Los lugares concurridos o donde se evidencie una concurrencia.
• g) Cualquier otro lugar que por sus caracter韘ticas sea declarado por los cabildos insulares, o韉os los Consejos Insulares de Caza, en raz髇 de lo previsto en el n鷐ero anterior.

3. En los supuestos contemplados en las letras a) y b) del apartado anterior, los l韒ites de las zonas de seguridad, ser醤 los mismos que para cada caso establezca su legislaci髇 espec韋ica, en cuanto al uso del dominio p鷅lico y utilizaci髇 de las servidumbres correspondientes. Para cazar con armas se considerar�, en todo caso, a los efectos de esta ley, como zona de seguridad en los supuestos de las letras a) y b) del apartado anterior una distancia m韓ima de 50 metros desde el borde de la calzada.

4. En los supuestos contemplados en las letras c) y d) del apartado 2 de este art韈ulo, para cazar con armas, los l韒ites de la zona de seguridad ser醤 los que alcancen las 鷏timas edificaciones o instalaciones habitables, ampliadas en una franja de 100 metros en todas las direcciones. Se considerar� la misma franja de seguridad de 100 metros, en el caso de edificaciones aisladas que no formen parte de un n鷆leo rural o urbano.

5. En los supuestos contemplados en las letras e) y f) del apartado 2 de este art韈ulo, podr� determinarse reglamentariamente tanto la se馻lizaci髇 preceptiva de la zona de seguridad y sus l韒ites en las disposiciones que las declaren como la colocaci髇 de esta se馻lizaci髇.

Art韈ulo 20 Disposici髇 general

1. Cuando la acci髇 de cazar se ajuste a las prescripciones de esta Ley, el cazador adquiere la propiedad de las piezas de caza mediante la ocupaci髇. Se entender醤 ocupadas las piezas de caza desde el momento de su muerte o captura.

2. El cazador que hiera a una pieza en terreno donde le sea permitido cazar, tiene derecho a cobrarla aunque entre en propiedad ajena. Cuando el predio ajeno estuviere cercado o sometido a r間imen cineg閠ico especial, necesitar� permiso del due駉 de la finca, del titular del aprovechamiento o de la persona que los represente. El que se negare a conceder el permiso de acceso estar� obligado a entregar la pieza herida o muerta, siempre que fuere hallada y pudiere ser aprehendida.

3. En los terrenos abiertos sometidos a r間imen cineg閠ico especial, y para piezas de caza menor, no ser� necesario el permiso a que se refiere el apartado anterior cuando el cazador entre a cobrar la pieza solo, sin armas ni perro, y aqu閘la se encuentre en lugar visible desde la linde.

4. Cuando en terrenos de aprovechamiento cineg閠ico com鷑 o especial, uno o varios cazadores o sus perros levantaren y persiguieren una pieza de caza, cualquier otro cazador deber� abstenerse, en tanto dure la persecuci髇, de abatir o intentar abatir dicha pieza.

5. Se entender� que una pieza de caza es perseguida cuando el cazador que la levant�, con o sin ayuda de perro u otros medios, vaya en su seguimiento y tenga una razonable posibilidad de cobrarla.

6. Cuando haya duda respecto a la propiedad de las piezas de caza, se aplicar醤 los usos y costumbres del lugar. En su defecto, la propiedad corresponder� al cazador que le hubiere dado muerte cuando se trate de caza menor, y al autor de la primera sangre cuando se trate de caza mayor.

Art韈ulo 21 Los planes insulares de caza

Los cabildos insulares, previo informe de los consejos insulares, podr醤 establecer planes insulares de caza como instrumento de planificaci髇 cineg閠ica. Su finalidad ser� la de definir un marco de actuaci髇 general y un modelo de organizaci髇 cineg閠ica basados en la estructura y clasificaci髇 de los terrenos de la isla, as� como contemplar actuaciones especiales cuya ejecuci髇 se concrete en el tiempo a trav閟 de unos objetivos espec韋icos.

Los citados planes deber醤 remitirse antes de su aprobaci髇 a informe de la Consejer韆 del Gobierno de Canarias competente en materia de medio ambiente y conservaci髇 de la naturaleza, quien deber� o韗, a estos efectos, al Consejo Regional de Caza.

Art韈ulo 22 Los planes t閏nicos de caza

1. El plan t閏nico de caza es un instrumento de gesti髇 aplicado a un determinado terreno, que tiene por finalidad su aprovechamiento cineg閠ico de acuerdo con el tama駉 de las poblaciones objeto de caza, y como prioridad la preservaci髇 y conservaci髇 de los h醔itats, as� como el mantenimiento del potencial biol骻ico de las especies en el medio natural.

2. El plan t閏nico de caza, redactado y suscrito por facultativo competente, deber� contener, al menos, los siguientes apartados:

• a) Situaci髇 geogr醘ica del terreno, descripci髇 f韘ica, superficie y colindancias.
• b) Situaci髇 legal del terreno.
• c) Caracter韘ticas socioecon髆icas, tales como posibilidades tur韘ticas, carga ganadera, aprovechamientos agr韈olas y forestales.
• d) Condiciones ambientales, descripci髇 de ecosistemas, inventario de fauna cineg閠ica y no cineg閠ica, haciendo especial referencia a las especies catalogadas.
• e) Evaluaci髇 del potencial cineg閠ico y factores limitantes.
• f) Plan de mejoras.
• g) Plan de capturas y modalidades de caza.
• h) La conservaci髇 y mejora de los h醔itats cineg閠icos.
• i) Programa de seguimiento, control y vigilancia.
• j) Evaluaci髇 b醩ica de impacto ecol骻ico.

3. Los planes t閏nicos de caza se aprobar醤 por los cabildos insulares, previo informe de la Consejer韆 del Gobierno de Canarias competente en materia de medio ambiente y conservaci髇 de la naturaleza, y su vigencia ser� de cinco a駉s a partir de la fecha de su aprobaci髇.

4. Estos planes t閏nicos ser醤 de obligado cumplimiento por parte de los titulares cineg閠icos y deber醤 someterse, en su caso, a las determinaciones de los Planes de Ordenaci髇 de Recursos Naturales de la zona.

5. Todo aprovechamiento cineg閠ico en terrenos sometidos a r間imen cineg閠ico especial deber� hacerse por el titular del derecho, de forma ordenada y conforme al plan t閏nico de caza.

Art韈ulo 23 La orden regional de caza

1. Con el fin de realizar un adecuado aprovechamiento de las especies cineg閠icas, la Consejer韆 del Gobierno de Canarias competente en materia de medio ambiente y conservaci髇 de la naturaleza, o韉os el Consejo Regional de Caza y los cabildos insulares, aprobar� la orden regional de caza, estableciendo el r間imen de la actividad y las 閜ocas de veda, sin perjuicio de poder adoptar posteriormente medidas que corrijan situaciones excepcionales tendentes a preservar o controlar dichas especies cineg閠icas.

2. La publicaci髇 anual de la orden regional de caza en el 獴olet韓 Oficial de Canarias� se efectuar� antes del 30 de junio.

3. En la orden regional de caza se har� menci髇 expresa de los d韆s y periodos h醔iles de caza seg鷑 las distintas especies, modalidades, cuant韆s y limitaciones generales en beneficio de las especies cineg閠icas, as� como las medidas preventivas para su control en los terrenos cineg閠icos y en las zonas de r間imen cineg閠ico especial.

V閍se la Orden [CANARIAS] de 22 de junio de 2016, por la que se establecen las 閜ocas h醔iles de caza para el a駉 2016, as� como las condiciones y limitaciones para su ejercicio en la Comunidad Aut髇oma de Canarias (獴.O.I.C.� 30 junio).LE0000578195_20160701

Art韈ulo 24 Los vedados de caza

1. Son aquellos terrenos en los cuales se proh韇e con car醕ter temporal el ejercicio de la caza. Tal prohibici髇 podr� ser establecida por los cabildos insulares en los casos previstos en el apartado 5 del art韈ulo 16 de la presente Ley o por orden de la Consejer韆 del Gobierno de Canarias competente en materia de medio ambiente y conservaci髇 de la naturaleza, o韉os los cabildos insulares o a iniciativa de los mismos cuando se trate de:

• a) Aquellas zonas de cotos privados de caza en los que la titularidad cineg閠ica pueda ser discutida y lesionar, en su caso, intereses ajenos, pudiendo generar conflictos de orden p鷅lico o social.
• b) Aquellas zonas que por razones de 韓dole biol骻ica as� lo aconsejen.

2. La condici髇 de los vedados se dar� a conocer materialmente por medio de carteles en los accesos y caminos principales, en la forma que reglamentariamente se determine.

Art韈ulo 25 Protecci髇 de los cultivos

Con el fin de proteger zonas en las que predominen los huertos o los campos de frutales y en los montes plantados recientemente, s髄o se podr� cazar en las 閜ocas y condiciones que determinen los cabildos insulares.

Art韈ulo 26 Control de poblaciones animales

1. El cabildo insular, de oficio o a petici髇 de parte, y con el previo informe de la Consejer韆 del Gobierno de Canarias competente en materia de medio ambiente y conservaci髇 de la naturaleza, y las consultas y comprobaciones que estime oportunas, podr� declarar zona de emergencia cineg閠ica temporal a una comarca, cuando exista en ella determinada especie cineg閠ica en abundancia tal, que resulte especialmente peligrosa para las personas o perjudicial para la agricultura, la ganader韆, la flora, la vegetaci髇 o la caza; asimismo determinar� las 閜ocas y medidas conducentes a eliminar el riesgo y reducir el n鷐ero de estos animales.

2. El control biol骻ico de poblaciones animales que de alguna forma afecten a las especies cineg閠icas requerir� la autorizaci髇 de la Consejer韆 del Gobierno de Canarias competente en materia de medio ambiente y conservaci髇 de la naturaleza.

Art韈ulo 27 Los concursos de caza y los campos de entrenamiento y adiestramiento

Para la celebraci髇 de los concursos de caza, organizados por las sociedades federadas de cazadores, federaciones insulares o Federaci髇 Canaria de Caza, tales como Campeonato de Caza Menor con Perro, San Huberto, Campeonato de Podenco y Hur髇, y otros, as� como el establecimiento de campos de entrenamiento y adiestramiento, se requerir� la autorizaci髇 del cabildo insular. Dichos concursos podr醤 celebrarse en los cotos intensivos de caza a los que se refiere el art韈ulo 17 de esta Ley o en terrenos habilitados al efecto.

Art韈ulo 28 Requisitos generales

1. Para la pr醕tica legal de las actividades cineg閠icas, es necesario cumplir con los siguientes requisitos:

• a) Tener licencia de caza en vigor.
• b) Tener suscrito el seguro obligatorio de responsabilidad civil del cazador.
• c) Contar con los permisos para utilizar los medios de caza que reglamentariamente se establezcan.
• d) Disponer de la licencia o permiso de armas y la gu韆 de pertenencia, seg鷑 la legislaci髇 espec韋ica, en el caso de utilizar armas de fuego.
• e) Permisos necesarios para cazar en terrenos sometidos a r間imen cineg閠ico especial as� como para practicar otras modalidades espec韋icas de caza.

2. El cazador deber� llevar consigo los documentos en que se acrediten los requisitos anteriores.

Art韈ulo 29 La licencia de caza

1. La licencia de caza de Canarias es imprescindible para practicar la caza en esta Comunidad Aut髇oma.

Dicha licencia se otorga a t韙ulo personal e intransferible.

2. La licencia ser� otorgada por el cabildo de la isla donde resida el solicitante, y tendr� plenos efectos en todo el territorio de la Comunidad Aut髇oma de Canarias. La vigencia de la misma comprender� desde el 1 de enero al 31 de diciembre del a駉 para el que se otorgue, pudiendo ser renovada, previo pago de la tasa correspondiente, por per韔dos iguales de tiempo para los a駉s naturales sucesivos.

3. No podr醤 obtener licencia de caza ni renovarla aqu閘los que se encuentren inhabilitados para la pr醕tica cineg閠ica en virtud de sanci髇 penal o administrativa firme, a cuyos efectos deber醤 presentar para su obtenci髇 el correspondiente certificado de antecedentes, expedido por el Registro Regional de Caza y Pesca.

4. Los cabildos insulares podr醤 otorgar licencias temporales de caza, v醠idas hasta tres meses, cuando se trate de solicitantes no residentes en Canarias. La cuant韆 de dichas licencias ser� la misma que se haya establecido para el cazador residente.

Art韈ulo 30 La prueba de aptitud

1. La Consejer韆 del Gobierno de Canarias competente en materia de medio ambiente y conservaci髇 de la naturaleza, o韉os la Federaci髇 Canaria de Caza y los cabildos insulares, establecer� las pruebas de aptitud que considere necesarias para otorgar por primera vez la licencia de caza.

2. Las pruebas, que efectuar醤 los cabildos insulares o, por delegaci髇 de 閟tos, las sociedades colaboradoras, versar醤 sobre el conocimiento de la legislaci髇 cineg閠ica, armas y artes, materiales empleados en la caza, distinci髇 de las diversas especies de animales, 閠ica y comportamiento del cazador y todas aquellas materias que se establezcan reglamentariamente.

3. Superado el examen, el cabildo insular o las sociedades colaboradoras expedir醤 al interesado el correspondiente certificado de aptitud v醠ido para la obtenci髇 de la licencia de caza.

4. Se reconocer醤 como v醠idos para obtener la licencia de caza en Canarias, los certificados de aptitud expedidos por otras Comunidades Aut髇omas, o la documentaci髇 equivalente en el caso de los cazadores extranjeros.

V閍se la O [CANARIAS] 13 octubre 2004, por la que se establece el contenido y modo de realizaci髇 de las pruebas de aptitud para el ejercicio de la caza en Canarias (獴.O.I.C.� 25 octubre).LE0000206176_20041026

Art韈ulo 31 Los permisos

1. Para el ejercicio de la caza en los terrenos sometidos a r間imen cineg閠ico especial, es necesario contar con un permiso escrito, otorgado por los titulares cineg閠icos a los que se refiere el art韈ulo 8 de esta Ley.

2. Los permisos de caza son personales e intransferibles y autorizan a su titular al ejercicio de la actividad cineg閠ica, en las condiciones fijadas en los planes t閏nicos de caza.

Art韈ulo 32 Responsabilidad por da駉s

1. Los da駉s producidos por las especies cineg閠icas procedentes de los terrenos sometidos a r間imen cineg閠ico especial, ser醤 indemnizados por los titulares de aprovechamientos cineg閠icos sobre dichos terrenos. Subsidiariamente ser醤 responsables los propietarios de los terrenos.

2. Las entidades p鷅licas o privadas responsables de la administraci髇 y gesti髇 de un terreno cineg閠ico especial, ser醤 responsables de los da駉s producidos por la caza existente en los citados terrenos sometidos a su jurisdicci髇.

3. Los da駉s ocasionados por especies cineg閠icas procedentes de terrenos sometidos a r間imen cineg閠ico com鷑, ser醤 indemnizados de acuerdo con lo establecido en la legislaci髇 civil ordinaria.

4. Todo cazador estar� obligado a indemnizar los da駉s que causare con motivo del ejercicio de la caza, excepto cuando el hecho fuera debido 鷑icamente a culpa o negligencia del perjudicado o a fuerza mayor. En la caza con armas, si no consta el autor del da駉 causado a las personas, responder醤 solidariamente todos los miembros de la cuadrilla de caza.

Art韈ulo 33 El seguro obligatorio

1. Todo cazador deber� concertar un contrato de seguro de suscripci髇 obligatoria de responsabilidad civil que cubra la obligaci髇 de indemnizar a las personas como consecuencia del ejercicio de dicha actividad, con arreglo a las normas sectoriales del Estado en materia de seguro.

2. No podr� practicarse la caza con o sin armas de fuego sin la existencia de este contrato en plenitud de efectos.

Art韈ulo 34 El seguro voluntario

Todo cazador podr� suscribir una p髄iza de seguro voluntario para garantizar las diferencias, en caso de indemnizaciones, que excedan de los l韒ites fijados por la p髄iza del seguro obligatorio.

Art韈ulo 35 Enfermedades

1. Las Consejer韆s del Gobierno de Canarias competentes en materia de medio ambiente y conservaci髇 de la naturaleza y de agricultura, adoptar醤 coordinada y conjuntamente con el cabildo insular correspondiente las medidas necesarias para evitar la difusi髇 de epizootias y zoonosis que puedan padecer las especies comprendidas en el 醡bito de esta Ley.

2. A los efectos anteriores, las citadas consejer韆s, o韉o el cabildo insular correspondiente, podr醤 prohibir o limitar el ejercicio de la caza en aquellas zonas o comarcas en que se compruebe la aparici髇 de epizootias y zoonosis.

3. Los titulares de terrenos acotados, as� como cualquier autoridad o particular que tenga conocimiento de la aparici髇 o existencia de cualquier epizootia o zoonosis estar醤 obligados a notificar esta circunstancia a la Consejer韆 del Gobierno de Canarias competente en materia de medio ambiente y conservaci髇 de la naturaleza, o bien al cabildo insular correspondiente o a cualquier otra Administraci髇 o sociedad colaboradora, quienes deber醤 ponerlo en conocimiento de la referida Consejer韆.

Art韈ulo 36 El Consejo Regional de Caza

1. El Consejo Regional de Caza de Canarias, adscrito a la Consejer韆 del Gobierno de Canarias competente en materia de medio ambiente y conservaci髇 de la naturaleza, actuar� como 髍gano asesor de la misma en las materias relacionadas con las actividades cineg閠icas, a cuyos efectos deber� ser o韉o en cuantas cuestiones expresamente se determinen en la presente Ley o en otras normas sectoriales de aplicaci髇.

2. El Consejo Regional de Caza de Canarias estar� integrado por los miembros que reglamentariamente se determinen.

Art韈ulo 37 Los Consejos Insulares de Caza

1. Los Consejos Insulares de Caza est醤 adscritos al Consejo Regional de Caza y son 髍ganos asesores de los cabildos insulares en todas las materias relacionadas con las actividades cineg閠icas.

2. Los Consejos Insulares de Caza estar醤 integrados por los miembros que reglamentariamente se determinen.

Art韈ulo 38 Disposiciones comunes al Consejo Regional y a los Consejos Insulares de Caza

1. El Consejo Regional de Caza y los consejos insulares se reunir醤 necesariamente antes del mes de junio de cada a駉, para informar sobre la orden regional de caza.

El Consejo Regional de Caza y los consejos insulares se reunir醤, por lo menos, una y dos veces al a駉, respectivamente.

2. La elecci髇 de los cargos que lo sean a t韙ulo personal se efectuar� como m醲imo en el plazo de cuatro a駉s, pudiendo ser reelegidos los Vocales salientes.

3. Los Vocales del Consejo Regional de Caza y de los consejos insulares representantes de las organizaciones y colectivos, que reglamentariamente se determinen, ser醤 elegidos por mayor韆 simple entre sus miembros.

4. Los Presidentes, por s� o a petici髇 de alg鷑 miembro de los consejos, podr醤 incorporar a las sesiones, a efectos informativos, a expertos en las materias que se vayan a tratar.

Art韈ulo 39 Las sociedades colaboradoras de cazadores

1. Los cabildos insulares podr醤 declarar sociedades colaboradoras a aquellas que, con car醕ter abierto y sin 醤imo de lucro, contribuyan a la consecuci髇 de los fines perseguidos por esta Ley.

2. Las sociedades de cazadores o agrupaciones de sociedades que traten de obtener el t韙ulo de sociedades colaboradoras deber醤 cumplir los siguientes requisitos:

• a) Estar legalmente constituidas.
• b) Estar federadas.
• c) Acreditar que la sociedad posee un marcado car醕ter deportivo con un m韓imo de 60 socios federados.
• d) Invertir, como m韓imo, el 75 por 100 de todos los ingresos de la sociedad en actividades o trabajos que contribuyan a la protecci髇, conservaci髇 y fomento de la riqueza cineg閠ica.

Art韈ulo 40 La vigilancia de la caza

1. Sin perjuicio de las competencias que en materia de vigilancia corresponde a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, son los agentes de medio ambiente los que est醤 obligados a cumplir y hacer cumplir las disposiciones de esta Ley y dem醩 normas que la desarrollen.

Tendr醤 la consideraci髇 de agentes de medio ambiente los funcionarios titulares o interinos o personal laboral fijo o contratado que, siendo nombrados como tales, desempe馿n funciones de vigilancia al servicio de la Administraci髇, los cuales deber醤 estar debidamente uniformados y con los distintivos y acreditaci髇 oportuna.

2. Las sociedades de cazadores y los titulares de concesiones administrativas sobre explotaciones cineg閠icas podr醤 tener a su servicio guardas de caza, cuya misi髇 es observar y hacer observar las prescripciones de esta Ley y sus normas reglamentarias como auxiliares de los agentes de medio ambiente.

Los guardas de caza podr醤 prestar servicios de vigilancia fuera de las zonas a las que estuvieren adscritos, a requerimiento de los agentes de medio ambiente, en caso de necesidad.

3. Los cabildos insulares acreditar醤 como guardas de caza a aquellas personas que, previa superaci髇 de las correspondientes pruebas, sean propuestos por la Federaci髇 Canaria de Caza o sociedades colaboradoras y por los titulares de concesiones administrativas de explotaciones cineg閠icas.

Art韈ulo 41 Reintroducci髇, traslado y suelta de especies cineg閠icas

1. La reintroducci髇, repoblaci髇, traslado y suelta de especies cineg閠icas vivas en el medio natural requerir� autorizaci髇 del cabildo insular correspondiente, previo informe favorable de la Consejer韆 del Gobierno de Canarias competente en materia de medio ambiente y conservaci髇 de la naturaleza.

V閍se O [CANARIAS] 14 agosto 2014, por la que se aprueban las instrucciones y directrices para la reintroducci髇, repoblaci髇, traslado y suelta de especies cineg閠icas vivas en el medio natural (獴.O.I.C.� 9 septiembre).LE0000536044_20140929

2. Queda prohibida la introducci髇 y proliferaci髇 de especies y subespecies distintas a las aut骳tonas en la medida en que puedan competir con 閟tas, alterar su pureza gen閠ica u ocasionar desequilibrios en los ecosistemas.

3. No obstante lo dispuesto en el apartado anterior, si se considerase en alg鷑 caso aconsejable la introducci髇 de alguna especie no aut骳tona, el cabildo insular podr� autorizarla, previo informe favorable de la Consejer韆 del Gobierno de Canarias competente en materia de medio ambiente y conservaci髇 de la naturaleza.

Art韈ulo 42 Prohibiciones generales

Queda prohibido:

• 1. Cazar en 閜oca de veda.
• 2. Cazar antes de la salida y despu閟 de la puesta del sol.
• 3. Cazar cuando la lluvia, nieve, niebla, falta de luz u otras causas similares reduzcan la visibilidad, de forma tal que pueda producirse peligro para las personas o sus bienes.
• 4. Cazar en zonas de seguridad con armas de fuego rayadas.
• 5. Cazar en las proximidades de lugares concurridos o donde se est閚 celebrando actos p鷅licos.
• 6. Cazar en los llamados d韆s de fortuna, es decir, en aqu閘los que como consecuencia de incendios, epizootias, inundaciones, sequ韆s y otras causas, los animales se ven privados de sus facultades normales de defensa y obligados a concentrarse en determinados lugares.
• 7. Entrar con armas, perros o artes dispuestas para cazar, en terrenos sometidos a r間imen cineg閠ico especial debidamente se馻lizados sin estar en posesi髇 del permiso necesario.
• 8. Cazar en aquellos terrenos sometidos a r間imen cineg閠ico especial en los que est� prohibido por esta Ley el ejercicio de la caza, salvo que se est� en posesi髇 del correspondiente permiso emitido por el cabildo insular, atendiendo a razones de orden biol骻ico, t閏nico o cient韋ico que aconsejen la captura o control de determinadas especies. En el caso de los parques nacionales, estos permisos podr醤 ser otorgados por sus 髍ganos gestores.
• 9. Portar armas de caza desenfundadas o dispuestas para su uso cuando se circule por el campo en 閜oca de veda, careciendo de autorizaci髇 competente.
• 10. Cazar con armas de fuego quienes no re鷑an los requisitos exigidos para ello o no dispongan de los permisos pertinentes.
• 11. Cazar sin estar provisto de la documentaci髇 preceptiva o no llev醤dola consigo.
• 12. Cazar o transportar especies cineg閠icas cuya edad o sexo, en el caso de que sean notorios, no concuerden con los legalmente permitidos o no cumplan los requisitos reglamentarios.
• 13. El transporte y comercializaci髇 de piezas de caza muertas en 閜oca de veda, sin cumplir los requisitos previstos en la legislaci髇 vigente sobre la materia.
• 14. Cazar en bebederos, cebaderos y comederos.
• 15. La destrucci髇 de vivares y nidos de especies cineg閠icas, as� como la recogida de cr韆s o huevos y su circulaci髇 y venta, salvo los destinados a repoblaciones, para lo que ser� preciso disponer de autorizaci髇 de la Consejer韆 del Gobierno de Canarias competente en materia de medio ambiente y conservaci髇 de la naturaleza.
• 16. Cazar con perros de caza que no est閚 debidamente identificados con su cartilla de vacunaci髇, o con hurones que no cumplan los requisitos establecidos en el art韈ulo 7.3 de la presente Ley.
• 17. Cazar en 閜oca de celo, reproducci髇 y crianza, as� como durante su trayecto hacia los lugares de cr韆 en el caso de las aves migratorias.
• 18. Cazar en terrenos en los que no est閚 recogidas las cosechas.

Art韈ulo 43 Artes y medios de caza prohibidos

1. Se proh韇e, con car醕ter general, la utilizaci髇 de todos los procedimientos masivos o no selectivos para la captura o muerte de animales, en particular venenos o trampas, as� como aqu閘los que puedan causar localmente la desaparici髇 o turbar gravemente la tranquilidad de las poblaciones de una especie.

2. Quedan prohibidos los siguientes medios para cazar:

• a) El ojeo y la caza con reclamo.
• b) Liga, lazos, anzuelos, trampas, cepos y rozaderas.
• c) Aparatos electrocutantes o paralizantes.
• d) Faros, linternas, espejos y otras fuentes luminosas artificiales.
• e) Redes o artefactos que requieran para su funcionamiento el uso de mallas, como redes abatibles, redes niebla o verticales y redes-ca耋n.
• f) Cebos, gases o sustancias venenosas, paralizantes, tranquilizantes, atrayentes o repelentes y explosivos.
• g) Armas semiautom醫icas o autom醫icas o de repetici髇 cuyo cargador pueda contener m醩 de dos cartuchos, rifles del calibre 22, armas de aire comprimido y las provistas de silenciador o de visor para el disparo nocturno, as� como las que inyecten sustancias paralizantes.
• h) Utilizar postas o balas explosivas, as� como cualquier tipo de bala en el que se hayan producido manipulaciones en el proyectil.
• i) Aeronaves, veh韈ulos terrestres, animales y embarcaciones como lugar desde donde realizar los disparos.

3. No obstante, previa autorizaci髇 de la Consejer韆 del Gobierno de Canarias competente en materia de medio ambiente y conservaci髇 de la naturaleza, podr醤 quedar sin efecto algunas de las prohibiciones expresadas en el art韈ulo anterior y en los apartados 1 y 2 del presente art韈ulo, cuando concurran algunas de las circunstancias y condiciones siguientes:

• a) Si de su aplicaci髇 se derivaran efectos perjudiciales para la salud y seguridad de las personas.
• b) Si de su aplicaci髇 se derivaran efectos perjudiciales para especies protegidas.
• c) Para prevenir perjuicios importantes en los cultivos, el ganado, los bosques, la caza, la pesca y la calidad de las aguas.
• d) Cuando sea necesario por raz髇 de investigaci髇, educaci髇, repoblaci髇 o reintroducci髇 o se precise para la cr韆 en cautividad.
• e) Para prevenir accidentes con relaci髇 a la seguridad de la navegaci髇 a閞ea.

4. La autorizaci髇 administrativa a que se refiere el apartado anterior deber� ser motivada y especificar:

• a) Las especies a que se refiera.
• b) Los medios, los sistemas o los m閠odos a emplear y sus l韒ites, as� como el personal cualificado, en su caso.
• c) Las condiciones de riesgo y las circunstancias de tiempo y lugar.
• d) Los controles que se ejercer醤, en su caso.
• e) El objetivo o la raz髇 de la acci髇.

Art韈ulo 44 Disposiciones generales

1. Las acciones u omisiones que vulneren las prescripciones de esta Ley generar醤 responsabilidad administrativa, sin perjuicio de la exigible en v韆 penal o civil.

2. La incoaci髇, ordenaci髇, instrucci髇 y resoluci髇 de los expedientes sancionadores se realizar� por los cabildos insulares, con arreglo a lo dispuesto en la legislaci髇 de procedimiento administrativo com鷑.

Art韈ulo 45 El Registro Regional de Infractores de Caza

1. Se crea el Registro Regional de Infractores de Caza, dependiente de la Consejer韆 del Gobierno de Canarias competente en materia de medio ambiente y conservaci髇 de la naturaleza, en el que mediante soporte inform醫ico se inscribir醤 de oficio todos los que hayan sido sancionados por resoluci髇 firme, en expediente incoado por los cabildos insulares por infracci髇 de las disposiciones de la presente Ley.

2. En el Registro Regional deber� figurar el motivo de la sanci髇, cuant韆 de las multas e indemnizaciones, si las hubiere, as� como la inhabilitaci髇, en su caso, para el ejercicio de la caza y su duraci髇 en los t閞minos de lo resuelto por los cabildos insulares.

3. El sistema registral garantizar� la integraci髇 inform醫ica en el Registro Regional de las anotaciones efectuadas en los respectivos registros insulares, de tal manera que simult醤eamente quede constancia de que las inscripciones y variaciones que se produzcan en el Registro Regional sean id閚ticas que las que se anoten en los cabildos insulares. Asimismo, las inscripciones y variaciones que se produzcan en el Registro Regional ser醤 remitidas al Registro Nacional de Infractores de Caza y a todos los Registros Insulares de Infractores de Caza.

4. Los cabildos insulares llevar醤 un Registro Insular de Infractores de Caza y comunicar醤 al Registro Regional las anotaciones referidas en el apartado 2 de este art韈ulo en el plazo de treinta d韆s.

V閍se O [CANARIAS] 22 abril 2008, por la que se regula la inscripci髇 en el Registro Canario de Infractores de Caza (獴.O.I.C.� 5 mayo).LE0000259602_20080506

Art韈ulo 46 Definici髇 y clasificaci髇

Se consideran infracciones administrativas en materia de caza el incumplimiento de los requisitos, obligaciones o prohibiciones establecidos en la presente Ley y se clasifican en leves, menos graves, graves y muy graves.

Art韈ulo 47 Infracciones leves

Son infracciones leves:

• 1. Cazar siendo titular de una licencia v醠ida, pero no presentarla cuando sea requerido para ello por el personal de guarder韆 o agentes de la autoridad.
• 2. Cazar con autorizaci髇 sin llevarla consigo, en un terreno sometido a r間imen cineg閠ico especial.
• 3. El ejercicio de la caza por los menores de edad no emancipados que, estando en posesi髇 de la licencia de caza, no vayan acompa馻dos por otro cazador mayor de edad provisto de licencia.
• 4. Entrar con armas u otras artes en terreno cercado no acogido a otro r間imen cineg閠ico especial, cuando existan en sus accesos se馻les o carteles que proh韇an la caza en su interior.
• 5. Cercar, sin autorizaci髇 del cabildo insular, terrenos que formen parte de un coto de caza ya establecido.
• 6. Incumplir las normas que se establezcan sobre la actividad cineg閠ica en relaci髇 con determinados terrenos o cultivos.
• 7. Entrar con armas o perros en terrenos abiertos sometidos a r間imen cineg閠ico especial para cobrar una pieza de caza, herida fuera de 閘, que se encuentre en lugar visible desde la linde.
• 8. Cazar con perros de caza que no est閚 debidamente identificados de acuerdo con la legislaci髇 vigente y emplear hurones que no cumplan los requisitos establecidos en el art韈ulo 7.3 de esta Ley.
• 9. Permitir que los perros vaguen sin control por terrenos sometidos a r間imen cineg閠ico especial en 閜oca h醔il, o por terrenos de aprovechamiento cineg閠ico com鷑 o especial en 閜oca de veda.
• 10. Transitar con perros sueltos por zonas de seguridad.
• 11. Utilizar perros o hurones con fines cineg閠icos en terrenos en que, por raz髇 de 閜oca, especie o lugar, est� prohibido hacerlo.
• 12. Incumplir las normas que regulan el adiestramiento o entrenamiento de perros de caza en las zonas que se establezcan al efecto.
• 13. Cazar en terrenos de aprovechamiento cineg閠ico com鷑 mediante el procedimiento llamado de ojeo o combinando la acci髇 de dos o m醩 grupos de cazadores haciendo uso de medios que persigan el cansancio o agotamiento de las piezas.
• 14. No hacer llegar a la Consejer韆 del Gobierno de Canarias competente en materia de medio ambiente y conservaci髇 de la naturaleza las anillas o marcas utilizadas para el marcado cient韋ico de animales cuando, al cobrar alguna pieza de caza, 閟ta sea portadora de tales se馻les.
• 15. Cazar en los llamados d韆s de fortuna.
• 16. El abandono de cartuchos usados o nuevos.

Art韈ulo 48 Infracciones menos graves

Son infracciones menos graves:

• 1. Falsear los datos en la solicitud de la licencia de caza.
• 2. Cazar sin armas sin tener contratado y vigente el seguro establecido en el art韈ulo 33 de esta Ley.
• 3. Cazar sin autorizaci髇 en terreno sometido a r間imen cineg閠ico especial.
• 4. Incumplir las normas que dicten la Consejer韆 del Gobierno de Canarias competente en materia de medio ambiente y conservaci髇 de la naturaleza o los cabildos insulares sobre se馻lizaci髇 de terrenos sometidos a r間imen cineg閠ico especial.
• 5. Incumplir las condiciones t閏nicas que dicten los cabildos insulares sobre el cerramiento de terrenos constituidos en cotos privados de caza.
• 6. Infringir las normas espec韋icas contenidas en la orden regional de caza y disposiciones concordantes respecto a la caza en terrenos sometidos a r間imen cineg閠ico com鷑 y especial.
• 7. Dificultar la acci髇 de los agentes de la autoridad encargados de inspeccionar el buen orden cineg閠ico que debe existir en cualquier clase de terreno o negarse a mostrar el contenido del morral, la munici髇 empleada o la documentaci髇 reglamentaria.
• 8. Permitir que los perros propios vaguen sin control por terrenos sometidos a r間imen cineg閠ico especial en 閜oca de veda.
• 9. Descuidar la vigilancia y control de los perros que utilizan los pastores de ganado permitiendo que da馿n o persigan a las piezas de caza.
• 10. Utilizar cebaderos artificiales para atraer y capturar especies cineg閠icas.
• 11. Cazar de esp韆 o de acecho antes de la salida del sol y despu閟 de su puesta con cualquier tipo de armas.
• 12. Incumplir las normas fijadas por la Consejer韆 del Gobierno de Canarias competente en materia de medio ambiente y conservaci髇 de la naturaleza y en la orden regional de caza respecto a los cupos y modalidades para cazar en los terrenos sometidos a r間imen cineg閠ico com鷑 y especial.

Art韈ulo 49 Infracciones graves

Son infracciones graves:

• 1. Cazar sin licencia.
• 2. Cazar con armas sin tener contratado y vigente el seguro establecido en el art韈ulo 33 de esta Ley.
• 3. Incumplir las condiciones exigidas para el establecimiento de un coto privado de caza as� como el falseamiento de sus l韒ites y superficies.
• 4. Incumplir los planes t閏nicos de caza en terrenos sometidos a r間imen cineg閠ico especial.
• 5. Subarrendar o ceder a t韙ulo oneroso o gratuito los derechos que lleven consigo el uso y disfrute del aprovechamiento de la caza de un terreno sometido a r間imen cineg閠ico especial.
• 6. Llevar armas o artes dispuestas para cazar en terrenos sometidos a r間imen cineg閠ico especial debidamente se馻lizados sin estar en posesi髇 del permiso necesario. Se considera que las armas se hallan dispuestas para cazar cuando, estando desenfundadas, no se porten descargadas.
• 7. No declarar, por parte de los titulares cineg閠icos, las epizootias o zoonosis que afecten a la fauna cineg閠ica que habita en sus terrenos.
• 8. Incumplir, por parte de los titulares cineg閠icos, las medidas que se ordenen para prevenir o combatir las epizootias o zoonosis que pudieran afectar a la fauna cineg閠ica.
• 9. Colocar, suprimir, alterar, destruir o da馻r gravemente los carteles o letreros que se馻licen el r間imen cineg閠ico de los terrenos para inducir a error sobre ellos.
• 10. Aprovechar abusiva y desordenadamente las especies existentes en un coto privado de caza.
• 11. Cazar, aunque no se haya cobrado pieza alguna, en un terreno cercado no acogido a otro r間imen cineg閠ico especial, cuando est� prohibido hacerlo.
• 12. Cazar palomas mensajeras y deportivas o buchones que ostenten las marcas establecidas al efecto.
• 13. Cazar en 閜oca de veda o fuera de los per韔dos autorizados por la Consejer韆 del Gobierno de Canarias competente en materia de medio ambiente y conservaci髇 de la naturaleza.
• 14. Destruir vivares y nidos de especies cineg閠icas, as� como recoger cr韆s o huevos, salvo los destinados a repoblaciones.
• 15. Reintroducir, repoblar y trasladar piezas de caza sin contar con la autorizaci髇 expresa del cabildo insular correspondiente.
• 16. Impedir a los guardas de caza y a los agentes de la autoridad las labores de inspecci髇 de caza y el acceso a terrenos sometidos a r間imen cineg閠ico especial.
• 17. Entrar sin permiso en terrenos sometidos a r間imen cineg閠ico especial portando artes o medios prohibidos legal o reglamentariamente.
• 18. Cazar con los medios o artes prohibidos en el art韈ulo 43 de esta Ley, excepto lo previsto en los apartados 3, 4, 5, 9 y 10 del art韈ulo siguiente.
• 19. Cazar con escopeta en zonas de seguridad o disparar en direcci髇 a la misma.
• 20. Comercializar piezas de caza vivas o muertas y huevos de aves cineg閠icas sin cumplir los requisitos que reglamentariamente sean establecidos al efecto.
• 21. Cazar animales dom閟ticos.
• 22. Cazar con cualquier tipo de reclamo.
• 23. El abandono de perros de caza.
• 24. Destruir cercas o vallas de terrenos cercados.

Art韈ulo 50 Infracciones muy graves

Son infracciones muy graves:

• 1. Cazar teniendo retirada la licencia de caza o estando privado de obtenerla por sentencia judicial o por resoluci髇 administrativa firme.
• 2. Cazar en aquellas zonas de los espacios naturales protegidos donde est� expresamente prohibido o en los refugios de caza sin estar en posesi髇 del debido permiso, aunque no se haya cobrado pieza alguna.
• 3. El uso con fines cineg閠icos de todo tipo de cebos, gases o sustancias paralizantes, tranquilizantes, atrayentes o repelentes, as� como el fuego.
• 4. Cazar de noche con armas de fuego o accionadas por gas o aire comprimido, auxili醤dose con los focos de un veh韈ulo a motor o con cualquier otro dispositivo que emita luz artificial.
• 5. Cazar desde aeronave, autom髒il o cualquier otro medio de locomoci髇, cuyo uso para esta finalidad no est� autorizado expresamente, transportar en ellos armas desenfundadas y listas para su uso aunque no estuvieran cargadas.
• 6. Cazar cuando la lluvia, nieve, niebla, falta de luz u otras causas similares reduzcan la visibilidad, de forma tal que pueda producirse peligro para las personas o sus bienes.
• 7. Cazar en zonas de seguridad con armas de fuego rayadas.
• 8. Cazar en las proximidades de lugares concurridos o donde se est閚 celebrando actos p鷅licos.
• 9. Cazar con armas que disparen en r醘agas o provistas de silenciador.
• 10. Cazar con municiones no autorizadas.
• 11. El envenenamiento intencionado de los perros de caza.

Art韈ulo 51 Sanciones

1. Las infracciones administrativas tipificadas en los art韈ulos anteriores ser醤 sancionadas:

• a) Las infracciones leves con multa de 5.000 a 25.000 pesetas.
• b) Las infracciones menos graves con multa de 25.001 a 100.000 pesetas.
• c) Las infracciones graves con multa de 100.001 a 500.000 pesetas.
• d) Las infracciones muy graves con multa de 500.001 a 1.500.000 pesetas.

2. En el caso de infracciones menos graves, las sanciones correspondientes podr醤 llevar aparejadas la retirada y revocaci髇 de la licencia de caza y la inhabilitaci髇 para obtenerla durante el plazo m醲imo de un a駉. En el caso de infracciones graves, el plazo podr� ser de un a駉 a cinco a駉s. En las infracciones muy graves, los plazos comprender醤 un espacio de tiempo que va desde los tres a駉s a los ocho a駉s.

3. Las infracciones previstas en los apartados 3, 5 y 11 del art韈ulo 49, pueden llevar aparejadas la revocaci髇 del acotado o el establecimiento de un vedado temporal de caza.

Art韈ulo 52 Comisos

1. Toda supuesta infracci髇 administrativa en materia de caza llevar� consigo el comiso cautelar de la caza, viva o muerta que fuera ocupada, as� como de cuantas artes materiales hayan servido para cometer el hecho.

2. En el caso de ocupaci髇 de caza viva, el agente denunciante adoptar� las medidas precisas para su dep髎ito en el lugar id髇eo, o la libertar� en el supuesto de que estime que pueda continuar con vida.

3. En el caso de ocupaci髇 de caza muerta, 閟ta se entregar� mediante recibo en el lugar que se determine por los cabildos insulares.

4. Cuando al cometer una infracci髇 se utilizasen perros, hurones, aves de presa, reclamos, u otros animales, el comiso ser� sustituido por el abono de una cantidad que no podr� ser superior a 5.000 pesetas por animal; y cuando se trate de animales cuya posesi髇 no requiera un permiso especial, el denunciante los podr� dejar depositados en poder del supuesto infractor, mediante recibo que extender� al efecto y unir� a la denuncia.

Art韈ulo 53 Retirada de armas de caza

1. El agente denunciante proceder� a la retirada de las armas s髄o en aquellos casos en que hayan sido usadas para cometer la infracci髇 o se encuentren desenfundadas, cargadas, montadas y dispuestas para su uso en zonas prohibidas para el ejercicio de la caza, dando recibo de su clase, marca, n鷐ero y dependencia de la Guardia Civil donde hayan de ser depositadas. Asimismo se proceder� a la retirada de las armas cuando el infractor carezca total o parcialmente de la documentaci髇 necesaria para el ejercicio de la caza.

2. La negativa a la entrega del arma, cuando el cazador sea requerido para ello, dar� lugar a la denuncia ante el Juzgado competente, a los efectos previstos en la legislaci髇 penal.

3. A las armas decomisadas no recuperadas por sus due駉s se les dar� el destino establecido en la legislaci髇 del Estado en la materia.

Art韈ulo 54 Devoluci髇 de armas de caza

1. Las armas retiradas ser醤 devueltas cuando la resoluci髇 reca韉a en el expediente fuera absolutoria o de archivo de actuaciones.

2. En el supuesto de una infracci髇 administrativa leve, la devoluci髇 del arma ser� inmediata, por disposici髇 del instructor del expediente. En los dem醩 casos, se proceder� a su devoluci髇, previo abono de la sanci髇. El comiso podr� ser sustituido por una fianza, cuya cuant韆 ser� igual al importe de la sanci髇 correspondiente a la infracci髇 presuntamente cometida, a juicio del instructor, todo ello sin perjuicio de lo que disponga a estos efectos la normativa estatal en materia de armas.

Art韈ulo 55 Circunstancias modificativas de la responsabilidad

1. Ser醤 elementos a tener en cuenta para la graduaci髇 de las sanciones:

• a) La intencionalidad.
• b) El da駉 producido a la riqueza cineg閠ica o a su h醔itat.
• c) El 醤imo de lucro il韈ito y la cuant韆 del beneficio obtenido en la comisi髇 de la infracci髇.
• d) La reincidencia.

2. En el caso de reincidencia en un per韔do de un a駉, el importe de la sanci髇 que corresponde imponer se incrementar� en el 50 por 100 de su cuant韆; y si se reincide por dos veces o m醩 dentro del per韔do, el incremento ser� del 100 por 100. Las reincidencias simples o las sucesivas llevar醤 consigo la retirada de la licencia.

3. Si un solo hecho constituye m醩 de una infracci髇 administrativa, se impondr� la sanci髇 que corresponda a la de mayor gravedad.

Art韈ulo 56 Prescripci髇 de infracciones

1. Las infracciones administrativas contra lo dispuesto en la presente Ley, prescribir醤 en el plazo de cuatro a駉s, las muy graves; en el de un a駉, las graves; en el de seis meses, las menos graves; y en el de dos meses, las leves.

2. El plazo de prescripci髇 comenzar� a contar a partir de la fecha de la comisi髇 del hecho que constituye la infracci髇; dicho plazo se interrumpir� cuando se notifique al presunto infractor la incoaci髇 del expediente sancionador.

3. En cuanto a la interrupci髇 de los plazos de prescripci髇, se estar� a lo que disponga la legislaci髇 estatal sobre el procedimiento administrativo com鷑.

Art韈ulo 57 Delitos y faltas de caza

1. Cuando una infracci髇, aparte de su naturaleza administrativa, revistiese car醕ter de delito o falta seg鷑 la legislaci髇 penal, se dar� traslado inmediato del expediente o de la denuncia a la autoridad judicial, suspendi閚dose la actuaci髇 administrativa hasta el momento en que la decisi髇 penal reca韉a adquiera firmeza, sin perjuicio de la adopci髇 por la autoridad administrativa competente de las medidas cautelares que procedan.

2. La sanci髇 de la autoridad judicial excluir� la imposici髇 de multa administrativa.

3. De no estimarse la existencia de delito o falta, se continuar� el expediente administrativo hasta su resoluci髇 definitiva, teniendo como base, en su caso, los hechos que la jurisdicci髇 de orden penal haya considerado probados.

Art韈ulo 58 Responsabilidad civil del cazador

1. Sin perjuicio de las sanciones penales o administrativas que en su caso procedan, el cazador incurrir� en responsabilidad civil por los da駉s que cause en el ejercicio de la caza, en particular en relaci髇 con la infracci髇 del deber de conservaci髇 de las especies protegidas, que se har� efectiva en el marco de la legislaci髇 espec韋ica.

2. Las indemnizaciones que perciba la Administraci髇 como consecuencia de esta responsabilidad civil del cazador, ser醤 reintegradas a los titulares de aquellos terrenos donde se hubiera cometido la infracci髇. Cuando se trate de especies cineg閠icas, el importe ser� destinado a financiar programas de conservaci髇 de las especies de la fauna amenazada.

Primera

Sin perjuicio de lo establecido en el art韈ulo 43 de esta Ley, el Gobierno de Canarias, motivadamente, podr� aumentar o disminuir reglamentariamente los procedimientos masivos y no selectivos prohibidos para la captura y muerte de animales. Igualmente, y por el mismo procedimiento reglamentario, podr� establecer los per韔dos de regreso hacia los lugares de reproducci髇 de las especies cineg閠icas migratorias.

Segunda

La expedici髇 de las licencias regionales de caza y las matr韈ulas de cotos privados de caza, estar� sujeta al devengo de tasas en la forma y en las cuant韆s que se fijen o se determinen por Ley de la Comunidad Aut髇oma de Canarias.

Tercera

Si la acci髇 de cazar tuviera como finalidad o como resultado la muerte o captura de especies no cineg閠icas, prevalecer� el r間imen sancionador previsto en la legislaci髇 espec韋ica.

Cuarta

A los efectos del art韈ulo 19.2.e) de esta Ley, tendr醤 la consideraci髇 de centros p鷅licos de investigaci髇 el Observatorio de Iza馻, en la isla de Tenerife; y el Instituto Geogr醘ico de Canarias y el Centro del Roque de Los Muchachos, en la isla de La Palma.

Primera

Los planes t閏nicos de caza vigentes a la entrada en vigor de la presente Ley deber醤 ajustarse a lo prevenido en este texto legal en el plazo m醲imo de un a駉.

Segunda

Los cotos privados de caza ya constituidos a la entrada en vigor de la presente Ley y que no alcancen la superficie m韓ima establecida en el art韈ulo 16, continuar醤 rigi閚dose por las condiciones de su autorizaci髇, pero deber醤 en el plazo de un a駉 actualizar sus proyectos t閏nicos de caza y, en el caso de que no lo tengan, presentarlo en el mismo plazo indicado ante el cabildo insular correspondiente para su aprobaci髇.

Tercera

En caso de retirada temporal de la licencia de caza obtenida con anterioridad a la entrada en vigor de la presente Ley, en virtud de resoluci髇 administrativa o sentencia judicial firmes, la rehabilitaci髇 de la licencia requerir� la superaci髇 de las pruebas de aptitud establecidas en el art韈ulo 30, adem醩 del cumplimiento de la sanci髇 o pena objeto de inhabilitaci髇.

Cuarta

Los expedientes sancionadores que se encuentren en tramitaci髇 a la entrada en vigor de esta Ley, se regir醤 por la normativa aplicable en el momento de la comisi髇 de la infracci髇 y, en todo caso, por aquellas disposiciones m醩 favorables para el infractor.

Primera

Se autoriza al Gobierno de Canarias para dictar las disposiciones reglamentarias necesarias en orden al desarrollo y aplicaci髇 de esta Ley, as� como para autorizar y regular, como modalidades de caza, la caza con arco y la pr醕tica de la cetrer韆 mediante el empleo de aves rapaces, fijando las condiciones necesarias para su ejecuci髇 en orden a la protecci髇 y conservaci髇 de la fauna.

V閍se D [CANARIAS] 328/2011, 22 diciembre, por el que se aprueba el Reglamento que regula la pr醕tica de la cetrer韆 como modalidad de caza en la Comunidad Aut髇oma de Canarias (獴.O.I.C.� 3 enero 2012).LE0000470757_20120104

V閍se el D [CANARIAS] 42/2003, 7 abril, por el que se aprueba el Reglamento de la Ley 7/1998, de 6 de julio, de Caza de Canarias (獴.O.I.C.� 29 abril).LE0000187943_20030529

Segunda

El Gobierno de Canarias podr� actualizar, mediante Decreto, el importe de las sanciones previstas en esta Ley, teniendo en cuenta las variaciones del 韓dice de precios al consumo.

Tercera

Esta Ley entrar� en vigor el d韆 siguiente al de su publicaci髇 en el 獴olet韓 Oficial de Canarias�.