Ley 35/2006, de 28 de noviembre, del Impuesto sobre la Renta de las Personas F韘icas y de modificaci髇 parcial de las leyes de los Impuestos sobre Sociedades, sobre la Renta de no Residentes y sobre el Patrimonio

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Sumario

Ley 35/2006, 28 noviembre rectificada por Correcci髇 de errores (獴.O.E.� 7 marzo 2007). LE0000241591

JUAN CARLOS I REY DE ESPA袮

A todos los que la presente vieren y entendieren.

Sabed: Que las Cortes Generales han aprobado y Yo vengo en sancionar la siguiente ley.

PRE罬BULO

I. Antecedentes

El Impuesto sobre la Renta de la Personas F韘icas es un tributo de importancia fundamental para hacer efectivo el mandato del art韈ulo 31 de la Constituci髇 Espa駉la, que exige la contribuci髇 de todos �... al sostenimiento de los gastos p鷅licos de acuerdo con su capacidad econ髆ica mediante un sistema tributario justo inspirado en los principios de igualdad y progresividad que, en ning鷑 caso, tendr� alcance confiscatorio�.

La idea de un impuesto personal sobre la renta de las personas f韘icas de car醕ter general, personal y progresivo, se introdujo en Espa馻 con la reforma tributaria de 1978, si bien ha conocido diferentes modelos derivados de los distintos objetivos de pol韙ica econ髆ica y social que se han articulado a trav閟 de esta figura impositiva.

El proceso se inici� con la Ley 44/1978, norma que llev� hasta sus 鷏timas consecuencias la idea de generalidad y comunicaci髇 entre las diferentes fuentes de renta, de manera que se dise耋 un impuesto sint閠ico en el que la compensaci髇 entre cualquiera de ellas se permiti� con absoluta libertad. Con el tiempo, el dise駉 inicial hubo de ser rectificado en dos aspectos b醩icos: de un lado, la total libertad en la compensaci髇 de rentas propici� que aquellas que pod韆n realizarse con absoluta discrecionalidad, caso de las p閞didas patrimoniales, se utilizaran como instrumento para reducir el impuesto a satisfacer por el resto de fuentes de renta. De otro, la acumulaci髇 obligatoria de las rentas de la unidad familiar, en un impuesto de naturaleza progresiva que considera como contribuyente al individuo, estuvo en el origen de la Sentencia del Tribunal Constitucional de 20 de febrero de 1989 y oblig� a modificar la regulaci髇 del impuesto para adecuarlo a su naturaleza esencialmente individual.

Estas modificaciones se consolidaron en la posterior evoluci髇 del impuesto. As�, las posteriores regulaciones ya no configuraron un impuesto absolutamente sint閠ico, sino que mantuvieron la diferenciaci髇 en el tratamiento fiscal de determinadas fuentes de renta, en especial las ganancias y p閞didas patrimoniales, respecto del resto, y al tiempo configuraron el impuesto con un car醕ter marcadamente individual, quedando la tributaci髇 conjunta como una opci髇 para aquellas unidades familiares que as� lo decidieran. En particular, en las sucesivas reformas se ha venido manteniendo una definici髇 muy similar de las diferentes categor韆s de renta y de los supuestos de no sujeci髇 y exenci髇, es decir, de los conceptos b醩icos en la determinaci髇 de la renta.

Las 鷏timas de estas reformas del IRPF, la de la Ley 40/1998 y la de la Ley 46/2002, han supuesto una reducci髇 tanto de los tipos de gravamen como del n鷐ero de tramos de la escala, al tiempo que han sustituido las deducciones en la cuota en concepto de circunstancias personales y familiares por reducciones en la base imponible, y han mantenido, en buena medida, la diversidad en el tratamiento de las distintas f髍mulas del ahorro.

En cuanto al Impuesto sobre Sociedades, en los 鷏timos a駉s se ha producido una mayor aproximaci髇 entre las normas fiscales de c醠culo de la base imponible y el resultado contable, manteniendo una estabilidad en los tipos nominales de gravamen e incorporando numerosos incentivos fiscales. Al mismo tiempo, se ha ampliado sustancialmente el 醡bito de aplicaci髇 del r間imen fiscal de las peque馻s y medianas empresas.

La creciente globalizaci髇 de la econom韆 est� introduciendo una importante preocupaci髇 por la productividad y el crecimiento econ髆ico. Va acompa馻da de nuevas tendencias en la fiscalidad internacional, en las que se destacan la reducci髇 de tipos nominales para empresas y personas f韘icas, la simplificaci髇 de tarifas e incentivos fiscales, as� como la b鷖queda de una disminuci髇 en la tributaci髇 del factor trabajo. Al mismo tiempo cabe se馻lar, como factores relevantes, el intento de lograr una mayor homogeneidad en el tratamiento fiscal del ahorro, vinculado sin duda a la creciente libertad de circulaci髇 de capitales, y una mayor importancia relativa de la imposici髇 medioambiental.

La reforma que se aborda se inscribe en este marco. Se profundiza en la modernizaci髇 del sistema tributario espa駉l con una visi髇 estrat間ica e integral que contribuir� a la mejora del modelo de crecimiento y de la competitividad, planteamiento que se adecua a la realidad social y econ髆ica de Espa馻. Las novedades que se proponen se incorporan en el cuerpo normativo actual, manteniendo en lo posible la estructura de los textos actualmente vigentes y el contenido que se considera adecuado. Por otra parte, la reforma relativa al Impuesto sobre Sociedades y a los impuestos medioambientales tiene una dimensi髇 temporal, ya que est� prevista su implantaci髇 gradual.

II. Objetivos y aspectos relevantes de la reforma

El Gobierno fij� como principios directores de la Pol韙ica Econ髆ica el crecimiento sostenido y equilibrado, basado en la productividad, as� como la mejora del bienestar y la cohesi髇 social. Para ello, sobre la base del respeto al principio de estabilidad presupuestaria y suficiencia financiera, se han adoptado diversas iniciativas en materia presupuestaria, primando las pol韙icas de gasto con impacto en la productividad, que se complementan con la reforma fiscal.

En este contexto, se act鷄 de manera inmediata sobre la tributaci髇 de la renta de las personas f韘icas y jur韉icas, y se desarrollar� en un futuro pr髕imo la tributaci髇 medioambiental con el objetivo de mejorar la eficiencia energ閠ica y facilitar el equilibrio financiero de la reforma.

La reforma tiene como objetivos fundamentales mejorar la equidad y favorecer el crecimiento econ髆ico, al tiempo que persigue garantizar la suficiencia financiera para el conjunto de las administraciones p鷅licas, favorecer la tributaci髇 homog閚ea del ahorro y abordar, desde la perspectiva fiscal, los problemas derivados del envejecimiento y la dependencia.

Sin perjuicio de la posterior descripci髇 del contenido de la Ley, hay determinados aspectos de la reforma que deben ser objeto de atenci髇 prioritaria.

• 1) Para la mejora de la equidad, se disminuye la carga tributaria soportada por las rentas del trabajo, elevando sustancialmente la reducci髇 establecida para las mismas, especialmente para las rentas m醩 bajas. Se trata de dispensar un tratamiento especial a este tipo de rentas por los siguientes motivos: compensar, mediante una cantidad a tanto alzado, los gastos generales en los que incurre un trabajador; reconocer la aportaci髇 que esta fuente de renta hace al conjunto de la base imponible; su facilidad de control y el que se trata de una renta no fundada o sin respaldo patrimonial.

  Como novedad, esta reducci髇 se aplicar� tambi閚 a determinados trabajadores aut髇omos que, por las especiales circunstancias en que desarrollan su actividad y por estar sus rentas controladas, re鷑en caracter韘ticas muy cercanas a las del trabajador por cuenta ajena.

• 2) Con id閚tica finalidad de mejora de la equidad, se elevan los umbrales de rentas no sometidas a tributaci髇, y se recupera la igualdad en el tratamiento de las circunstancias personales y familiares.

  Hasta 1998, el tratamiento de las mismas se llevaba a cabo mediante deducciones en la cuota del impuesto. Desde 1999 fueron sustituidas por un m韓imo personal y familiar, deducible de la base imponible, cuya funci髇 era cuantificar aquella parte de la renta que, por destinarse a satisfacer las necesidades b醩icas personales y familiares del contribuyente, se consideraba que no deber韆 tributar por el Impuesto.

  La consecuencia de este esquema de reducci髇 en la base imponible, cuando se vincula a un impuesto con tarifa progresiva, es que el beneficio para el contribuyente es directamente proporcional a su nivel de renta (a mayor renta, mayor beneficio) ya que el m韓imo personal y familiar opera a trav閟 del tipo marginal de cada contribuyente. Implica, por tanto, aceptar que una misma necesidad, como pudiera ser la manutenci髇 de un hijo, tenga una distinta consideraci髇 en el impuesto en funci髇 del nivel de renta de la familia.

  Para asegurar una misma disminuci髇 de la carga tributaria para todos los contribuyentes con igual situaci髇 familiar, con independencia de su nivel de renta, se configura un extenso y flexible primer tramo, en el que se computan los m韓imos destinados a reconocer las circunstancias personales y familiares. Por tanto, estos m韓imos, t閏nicamente, se gravan a tipo cero. Esta estructura supone que los contribuyentes no tributan por las primeras unidades monetarias que obtienen y que destinan a cubrir las necesidades vitales, de forma que contribuyentes con iguales circunstancias personales y familiares logran el mismo ahorro, con lo que se mejora la progresividad del impuesto. La introducci髇 de una cuant韆 a la que es de aplicaci髇 un tipo cero permite alcanzar el mismo efecto de equidad que se produce con la aplicaci髇 de las deducciones en la cuota.

  En esta consideraci髇 de las circunstancias personales y familiares cabe efectuar una menci髇 a la opci髇 por la tributaci髇 conjunta. La pol韙ica de no discriminaci髇 por raz髇 de g閚ero y razones de simplificaci髇 de la gesti髇 del impuesto podr韆n justificar su revisi髇. No obstante, se mantiene su tratamiento actual en el impuesto para evitar numerosos perjudicados en los matrimonios en los que alguno de sus miembros no puede acceder al mercado laboral, y por tanto obtiene rendimientos s髄o uno de los c髇yuges, como podr韆n ser los casos de determinados pensionistas con rentas de cuant韆 reducida, o de determinadas familias numerosas.

• 3) Con la finalidad de favorecer el crecimiento econ髆ico, se reduce a cuatro el n鷐ero de tramos de la tarifa, en consonancia con las tendencias actuales en los pa韘es de la OCDE, y se introduce una notable ampliaci髇 del primero de ellos, lo que implicar� que m醩 del 70 % de los contribuyentes de menores rentas vean simplificada su tributaci髇. Por otra parte, por razones de incentivo al trabajo personal, se establece el tipo marginal m醲imo en el 43 %.

  Es especialmente destacable, aunque quiz醩 no tan f醕ilmente perceptible como la reducci髇 de tipos, la ampliaci髇 que se produce en las cuant韆s que delimitan todos los tramos de la tarifa, pues implica una reducci髇 adicional de los tipos de gravamen soportados. El objetivo es una menor tributaci髇 efectiva, lo que se consigue con la combinaci髇 de m韓imos exentos m醩 elevados y la estructura de la tarifa, en la que el primer tramo se alarga y engloba, por lo general, los m韓imos personales.

• 4) Por razones de equidad y crecimiento, se otorga un tratamiento neutral a las rentas derivadas del ahorro, eliminando las diferencias no justificadas que existen actualmente entre los distintos instrumentos en los que se materializa. Con ello, a la vez que se simplificar� la elecci髇 de los inversores, se incrementar� la neutralidad fiscal de los distintos productos y se favorecer� la productividad y competitividad, mejorando la posici髇 de nuestro pa韘 en un entorno internacional de libre circulaci髇 de capitales y de fuerte competencia. De esta manera, se aborda la modernizaci髇 de la tributaci髇 del ahorro, asignatura pendiente de las reformas precedentes.

  Se evita as� que las diferencias en la presi髇 fiscal que soportan los diferentes instrumentos distorsionen la realidad financiera del ahorro (como la denominada rentabilidad financiero-fiscal que mide una rentabilidad por completo ajena a las caracter韘ticas intr韓secas del producto que se pretende comercializar), ya que ello configura un marco tributario caracterizado por la falta de transparencia y diferencias en la tributaci髇 que se utilizan con el objeto de mantener cautivas determinadas inversiones.

  Para ello, se establece la incorporaci髇 de todas las rentas que la Ley califica como procedentes del ahorro en una base 鷑ica con tributaci髇 a un tipo fijo (18 %), id閚tico para todas ellas e independiente de su plazo de generaci髇, pues la globalizaci髇 econ髆ica hace in鷗iles los intentos de fraccionar artificialmente los mercados financieros por tipos de activos o por plazos.

  En relaci髇 con los dividendos, la jurisprudencia comunitaria obliga a otorgar un mismo tratamiento a los dividendos de fuente interna y a los de cualquier otro pa韘 miembro de la Uni髇 Europea. En l韓ea con las tendencias recientes, de retorno a un sistema cl醩ico de no integraci髇 entre el Impuesto sobre la Renta de las Personas F韘icas y el Impuesto sobre Sociedades, y con las reformas operadas en otros pa韘es de nuestro entorno, se ha simplificado su tributaci髇 mediante su incorporaci髇 a la base del ahorro y la aplicaci髇 de un m韓imo exento que excluir� el gravamen, por este concepto, de numerosos contribuyentes.

• 5) Con el objeto de mejorar la cohesi髇 social y de atender los problemas derivados del envejecimiento y la dependencia se incentivan aquellos instrumentos destinados a proporcionar unos ingresos complementarios de las pensiones p鷅licas o a la cobertura de determinados riesgos.

  En todos los pa韘es desarrollados se est� registrando un proceso de envejecimiento de la poblaci髇 que, en el medio plazo, dificulta la sostenibilidad de los sistemas p鷅licos de previsi髇 social. Para hacer frente a este importante reto los pa韘es de la OCDE pusieron en marcha en el pasado medidas de car醕ter fiscal, incentivando el desarrollo de planes de pensiones privados de car醕ter complementario al sistema b醩ico de la Seguridad Social. El objeto de estos reg韒enes es que los individuos puedan obtener, a trav閟 del sistema p鷅lico y de su plan de pensiones privado, una prestaci髇 que permita la aproximaci髇 de sus rentas al 鷏timo salario percibido durante su vida laboral.

  Para el cumplimiento de este objetivo, el Impuesto intenta reorientar los incentivos fiscales a la previsi髇 social complementaria hacia aquellos instrumentos cuyas percepciones se reciban de forma peri骴ica, para lo cual se elimina la reducci髇 del 40 por ciento anteriormente vigente para las retiradas del sistema del capital acumulado en forma de pago 鷑ico. Adicionalmente, se conceden beneficios fiscales a los planes de previsi髇 social empresarial y se prev� un nuevo producto de fomento del ahorro a largo plazo cuando se compromete la constituci髇 de una renta vitalicia con el capital acumulado, el denominado plan individual de ahorro sistem醫ico, si bien este opera de forma diferente a los dem醩 al carecer de incentivo a la entrada.

  Asimismo, por razones de equidad y de complementariedad con el sistema p鷅lico de pensiones, se acotan los l韒ites de las aportaciones. La experiencia de los 鷏timos a駉s demuestra que la media de aportaci髇 no ha superado los 2.000 euros, si bien se han incentivado de forma desproporcionada, y al margen de los objetivos de la previsi髇 social, aportaciones muy elevadas para determinados contribuyentes con elevada capacidad econ髆ica.

  La consideraci髇 de las aportaciones a estos sistemas como salario diferido, la acotaci髇 de los l韒ites y el respeto al contexto de neutralidad en la tributaci髇 del ahorro, justifica que todos los instrumentos de previsi髇 social que cumplan con las caracter韘ticas exigidas apliquen el incentivo de la reducci髇 en la base imponible, sin distinci髇 entre ellos. Y todo ello con la menor incidencia posible en la normativa financiera reguladora los planes y fondos de pensiones.

• 6) Razones de equidad y de cohesi髇 social aconsejan otorgar una especial atenci髇 al problema de la dependencia en Espa馻, incentivando, por primera vez desde el punto de vista fiscal, la cobertura privada de esta contingencia.

  De esta forma se reconoce la realidad social espa駉la, en la que se da un incremento de la esperanza de vida que lleva asociado un problema de envejecimiento y dependencia de una buena parte de los ciudadanos, existiendo adem醩 otros factores que agudizan su dimensi髇 en el sector de poblaci髇 que precisa de una atenci髇 especial.

  Se configuran dos tipos de beneficios: los dirigidos a aquellas personas que sean ya dependientes, para las que se prev� la posibilidad de movilizar su patrimonio inmobiliario con vistas a obtener unos flujos de renta que les permita disponer de recursos para paliar las necesidades econ髆icas, y, por otra parte, los dirigidos a aquellas personas que quieran cubrir un eventual riesgo de incurrir en una situaci髇 de dependencia severa o de gran dependencia.

  Adicionalmente, dado que la vivienda habitual constituye una importante manifestaci髇 del ahorro familiar, se introducen en la Ley mecanismos que permitan, en situaciones de dependencia severa o de gran dependencia, hacer l韖uida esta fuente de ahorro sin coste fiscal, lo que sin duda constituye un medio adicional de cobertura de esta contingencia.

• 7) Por razones de cohesi髇 social, se da continuidad al apoyo fiscal a la adquisici髇 de la vivienda habitual, manteniendo la base de deducci髇 actual y homogeneizando los porcentajes aplicables.
• 8) Las medidas que se proponen deben determinar en el futuro un crecimiento econ髆ico que deber韆 concretarse en una mayor recaudaci髇. No obstante, pueden originar en una consideraci髇 est醫ica una disminuci髇 de los ingresos.

  En este sentido, esta Ley tiene en cuenta que las Comunidades Aut髇omas disponen de capacidad normativa, con el alcance previsto en el art韈ulo 38 de la Ley 21/2001, de 27 de diciembre, por la que se regulan las medidas fiscales y administrativas del nuevo sistema de financiaci髇 de las Comunidades Aut髇omas de r間imen com鷑 y Ciudades con Estatuto de Autonom韆, por lo que podr醤 compensar, si as� lo deciden mediante el ejercicio de esa competencia, el efecto est醫ico de reducci髇 de la recaudaci髇 mencionado en el apartado anterior.

  En el texto de la norma se respeta el actual esquema de reparto de competencias en el Impuesto, con la precisi髇 efectuada respecto de la tarifa. No obstante, la negociaci髇 de un nuevo sistema de financiaci髇 para las Comunidades Aut髇omas podr� requerir, cuando el proceso est� concluido, una nueva regulaci髇 del t韙ulo referido al gravamen auton髆ico y a las competencias normativas y gestoras atribuidas a aquellas.

• 9) La reforma del Impuesto sobre Sociedades ser� gradual, y responde a la necesidad de defender la posici髇 competitiva de nuestras empresas en el 醡bito comunitario, alcanzar una mayor coordinaci髇 fiscal con los pa韘es de nuestro entorno, simplificar la estructura del mismo y lograr una mayor neutralidad en su aplicaci髇, fomentando la creaci髇 de empresas.

  El principio de coordinaci髇 internacional exige que se tomen en consideraci髇 las tendencias b醩icas de los sistemas fiscales de nuestro entorno, m醩 a鷑 en el contexto de un Mercado 趎ico europeo. Este principio halla su fundamento en la internacionalizaci髇 de nuestra econom韆. Medidas tales como la reducci髇 de tipos de gravamen, reducci髇 que se ha ido produciendo paulatinamente en los diferentes Estados, y la simplificaci髇 de los incentivos fiscales son consecuencias de dicho principio.

  Por lo que respecta a los incentivos fiscales, 閟tos han de justificarse con base en desequilibrios del mercado ya que el principio de neutralidad exige que la aplicaci髇 del tributo no altere el comportamiento econ髆ico de los sujetos pasivos y la localizaci髇 de las inversiones, excepto que dicha alteraci髇 tienda a superar dichos desequilibrios. En muchos casos, los est韒ulos fiscales a la inversi髇 son poco eficaces, presentan un elevado coste recaudatorio, complican la liquidaci髇 y generan una falta de neutralidad en el tratamiento fiscal de distintos proyectos de inversi髇.

  Por ello, la eliminaci髇 de los incentivos simplificar� enormemente la aplicaci髇 del tributo y facilitar� su gesti髇 por parte de la Administraci髇 tributaria, satisfaciendo as� el principio de transparencia, que exige que las normas tributarias sean inteligibles y precisas y que de su aplicaci髇 se derive una deuda tributaria cierta.

  Los aspectos mencionados constituyen la primera fase de la reforma prevista en el Impuesto que se completar�, en sus aspectos sustanciales, una vez se haya producido el desarrollo de la adecuaci髇 de la normativa contable a las Normas Internacionales de Contabilidad, dada su relaci髇 con el Impuesto sobre Sociedades.

• 10) Por razones de coherencia y de coordinaci髇 con la regulaci髇 de los Impuestos sobre la Renta de las Personas F韘icas y sobre Sociedades, se introducen una serie de modificaciones en la Ley del Impuesto sobre la Renta de no Residentes, que adem醩 pretenden adecuar la normativa al derecho comunitario, y unos ajustes t閏nicos en la Ley del Impuesto sobre el Patrimonio.

  Por 鷏timo, con objeto de respetar las expectativas de quienes adquirieron determinados compromisos de inversi髇 conforme a la legislaci髇 anterior, se mantiene el tratamiento fiscal actualmente vigente para determinados contratos o inversiones formalizados con anterioridad a la fecha de sometimiento a informaci髇 p鷅lica de esta norma.

III. Contenido de la Ley

La presente Ley est� estructurada en un T韙ulo preliminar, trece t韙ulos y 108 art韈ulos, junto con las correspondientes disposiciones adicionales, transitorias, derogatorias y finales.

En el T韙ulo preliminar se define como objeto del Impuesto la renta del contribuyente, entendiendo por tal la suma de todos sus rendimientos, ganancias y p閞didas patrimoniales e imputaciones de rentas. Frente a la noci髇 anterior de considerar como objeto del Impuesto la renta disponible, es decir la resultante de disminuir las rentas totales obtenidas en el importe de las reducciones por circunstancias personales y familiares, se entiende, por las razones expuestas en el apartado II anterior, que la consideraci髇 de estas circunstancias en el momento del c醠culo del Impuesto elimina las discriminaciones no deseadas que introduce el sistema actual. Se mantiene en sus t閞minos actuales la consideraci髇 del Impuesto como parcialmente cedido a las Comunidades Aut髇omas, si bien ya se ha se馻lado que su configuraci髇 definitiva depender� del nuevo sistema de financiaci髇 que se acuerde, y lo relativo al 醡bito de aplicaci髇.

El T韙ulo I mantiene, en t閞minos muy similares a los actuales, los aspectos materiales (con la introducci髇 de algunos supuestos nuevos de exenci髇), personales (con alguna reordenaci髇 t閏nica), y temporales de sujeci髇 al Impuesto.

El T韙ulo II, integrado s髄o por el art韈ulo 15, constituye el marco general de la determinaci髇 y cuantificaci髇 de la renta que ser� sometida a gravamen, estableciendo las reglas b醩icas que se desarrollar醤 en t韙ulos sucesivos.

As�, el Titulo III se ocupa de la determinaci髇 de la base imponible, con un primer cap韙ulo dedicado a los m閠odos utilizables para efectuar la misma y un segundo dividido en Secciones destinadas al tratamiento fiscal de las distintas fuentes de renta. Como novedades m醩 significativas, cabe destacar:

En los rendimientos del trabajo, se incorporan los supuestos derivados de los nuevos instrumentos de previsi髇 social, y se ubica, de nuevo, en la determinaci髇 del rendimiento neto la reducci髇 por obtenci髇 de este tipo de rendimientos. Su cuant韆 se eleva sustancialmente respecto de la contenida en la regulaci髇 anterior, en especial respecto de las rentas m醩 bajas, dando cumplimiento al compromiso asumido de mejora de esta fuente de rentas.

En los rendimientos del capital mobiliario se mantiene en lo esencial la regulaci髇 anterior, si bien desaparece la norma de integraci髇 de dividendos que anteriormente se conten韆 en la ley, al optar por un sistema cl醩ico de relaci髇 entre el impuesto societario y el de la renta de las personas f韘icas. Consecuencia de esta opci髇 es que desaparece la deducci髇 por doble imposici髇 de dividendos y se introduce una exenci髇 para los que no superen en cuant韆 韓tegra 1.500 euros.

La novedad fundamental que afecta a estos rendimientos es su incorporaci髇 a la base imponible del ahorro, con excepci髇 de determinados supuestos espec韋icos que, por su naturaleza, podr韆n encontrar acomodo tambi閚 en el seno de actividades econ髆icas, como son los derechos derivados de la propiedad intelectual o industrial, los arrendamientos de bienes muebles, negocios o minas, o los derivados de la cesi髇 de derechos de imagen.

Tampoco se plantean modificaciones sustanciales en el tratamiento de las actividades econ髆icas. No obstante, cabe destacar la introducci髇 en el c醠culo del volumen de exclusi髇 del m閠odo de estimaci髇 objetiva por 韓dices, signos o m骴ulos, tanto en el referido a los ingresos como en el vinculado a las compras de bienes y servicios, no s髄o del importe correspondiente al propio contribuyente a t韙ulo individual sino tambi閚 de aquellos importes que pudieran corresponder a las actividades econ髆icas desarrolladas por determinados parientes o entidades en r間imen de atribuci髇 de rentas en las que participen cualquiera de los mencionados con anterioridad. Asimismo cabe destacar que determinados contribuyentes, con estructuras de producci髇 muy sencilla, aplicar醤, cuando determinen su rendimiento por el m閠odo de estimaci髇 directa y cumplan con los requisitos formales que se establezcan reglamentariamente, una reducci髇 equivalente a la que corresponde a los perceptores de rendimientos del trabajo, ya que se asemejan a ellos en cuanto a la dependencia del empleador.

Respetando la estructura de la normativa actualmente vigente, las imputaciones y atribuciones de rentas no se encuentran en este Cap韙ulo sino que se regulan en un T韙ulo espec韋ico, el X, que a su contenido anterior de imputaciones de rentas (inmobiliarias, del r間imen de transparencia fiscal internacional y de derechos de imagen) y de atribuciones de rentas (procedentes de los entes sin personalidad jur韉ica del art韈ulo 35.4 de la Ley General Tributaria) incorpora, como un r間imen fiscal adicional, el correspondiente a determinados contribuyentes que cambian su residencia a territorio espa駉l, que en la actualidad eran objeto de regulaci髇 en el apartado 5 del art韈ulo 9 del texto refundido de la Ley, y un Cap韙ulo relativo a la tributaci髇 de las transmisiones de valores o participaciones de instituciones de inversi髇 colectiva, que anteriormente se regulaba en un t韙ulo espec韋ico.

Los Cap韙ulos IV y V de este T韙ulo contienen lo esencial de las modificaciones que se introducen como consecuencia de establecer una base espec韋ica para todas las categor韆s de ahorro financiero y ganancias y p閞didas patrimoniales derivadas de la transmisi髇 de elementos patrimoniales, diferenciada de la derivada del resto de fuentes de renta. As�, el Cap韙ulo IV establece la distinci髇 entre una renta general, la de los rendimientos, imputaciones y determinadas ganancias y p閞didas que, al no estar vinculadas a una transmisi髇, se integran en la base imponible general, y la renta del ahorro, comprensiva de toda aquella que va a resultar sometida por el Impuesto a un tipo fijo de gravamen en la base imponible del ahorro.

Clasificadas las rentas en estos dos grandes bloques, el Cap韙ulo V es el que establece las normas de integraci髇 y compensaci髇 para cada uno de ellos. Sigue existiendo incomunicaci髇 entre ambas partes de la base imponible. A su vez, tambi閚 existe incomunicaci髇, dentro de la renta del ahorro, entre la procedente de rendimientos y la derivada de ganancias y p閞didas patrimoniales, cualquiera que sea su periodo de generaci髇. Por el contrario, en la base imponible general es posible una compensaci髇 limitada de las p閞didas patrimoniales netas.

El T韙ulo IV se refiere a la determinaci髇 de la base liquidable. Dado que las circunstancias personales y familiares se van a tomar en consideraci髇 en el momento del c醠culo del Impuesto y que la reducci髇 por rendimientos del trabajo se ha incluido en la determinaci髇 de los rendimientos netos, las reducciones a practicar sobre la base imponible general quedan limitadas a aquellas vinculadas con la atenci髇 de las situaciones de envejecimiento y dependencia, en los t閞minos mencionados en el apartado anterior. Adicionalmente se mantiene la posibilidad de reducir las pensiones compensatorias satisfechas por decisi髇 judicial, como en la actualidad.

El T韙ulo V es el destinado a valorar y cuantificar las circunstancias personales y familiares que son objeto de consideraci髇 en el Impuesto. Tras un art韈ulo de p髍tico, en los cuatro art韈ulos posteriores se regulan las diferentes circunstancias relativas al contribuyente (el m韓imo personal, con el correspondiente incremento al alcanzar determinadas edades), descendientes (que incluye la especial consideraci髇 a los hijos menores de tres a駉s), ascendientes (tambi閚 con el incremento aplicable a partir de determinada edad) y discapacidad, tanto del contribuyente como de ascendientes y descendientes a su cargo, incluyendo los incrementos por asistencia a las situaciones de discapacidad de todos ellos. En particular es de destacar el importante esfuerzo llevado a cabo, con la elevaci髇 de los m韓imos, para mejorar el tratamiento de las familias, especialmente de las numerosas.

El T韙ulo VI es el destinado al c醠culo del impuesto correspondiente al Estado. Establece, en su Cap韙ulo I, el sistema de determinaci髇 de la cuota 韓tegra estatal, mediante, como antes se ha se馻lado, la consideraci髇 de las circunstancias personales y familiares, t閏nicamente gravadas a tipo cero, con las especialidades, ya existentes en la actualidad, para los supuestos de anualidades por alimentos a favor de los hijos y gravamen de los residentes en el extranjero. En su Cap韙ulo II se ocupa de la determinaci髇 de la cuota l韖uida estatal, para lo que minora la 韓tegra en el porcentaje correspondiente al Estado de las deducciones establecidas en la ley, coincidentes con las existentes en la actualidad.

El T韙ulo VII es el referido al gravamen auton髆ico. Se mantiene en la norma la actual regulaci髇, aun cuando se es consciente de que este t韙ulo deber� ser objeto de nueva redacci髇 cuando se acuerde un nuevo modelo de financiaci髇 auton髆ica. Mientras tanto s髄o se modifican la tarifa complementaria y el tipo de gravamen fijo correspondiente a la base del ahorro.

El T韙ulo VIII regula la obtenci髇 de la cuota diferencial del impuesto, manteniendo una regulaci髇 similar a la actual con la 鷑ica excepci髇 de la desaparici髇 de la deducci髇 por doble imposici髇 de dividendos, paralela a la supresi髇 de la norma de integraci髇 en la base imponible referida con anterioridad.

El T韙ulo IX regula la opci髇 por la tributaci髇 conjunta. Como se indic� en el apartado anterior se mantiene en t閞minos pr醕ticamente id閚ticos a su regulaci髇 actual, para no perjudicar determinadas situaciones.

El T韙ulo X regula los reg韒enes especiales. Las modificaciones introducidas en el mismo han sido detalladas al analizar el contenido del T韙ulo III, por lo que no cabe a馻dir comentario alguno.

El T韙ulo XI regula la gesti髇 del impuesto. Es de destacar la supresi髇 del modelo de comunicaci髇 para la devoluci髇 r醦ida, ya que la generalizaci髇 del borrador hace pr醕ticamente innecesario su mantenimiento. Asimismo se modifican, como consecuencia de las nuevas disposiciones introducidas, determinados l韒ites y condiciones de la obligaci髇 de declarar.

Los T韙ulos XII y XIII se refieren, con contenido muy similar a los actuales de iguales denominaciones, a la Responsabilidad patrimonial y r間imen sancionador, y al Orden jurisdiccional, respectivamente.

La norma contiene una serie de disposiciones adicionales, transitorias, derogatorias y finales. Conviene destacar que mediante estas disposiciones se pretende respetar las expectativas anteriormente mencionadas de quienes adquirieron determinados compromisos de inversi髇 en el 醡bito de la legislaci髇 anterior.

En relaci髇 con el Impuesto sobre Sociedades, en primer lugar, se reduce en cinco puntos el tipo general de gravamen del 35 por ciento de forma gradual en dos a駉s, de forma que a partir del a駉 2007 quede fijado en un 32,5 por ciento y un 30 por ciento en el a駉 2008. Igualmente en dos ejercicios se reduce en cinco puntos porcentuales el tipo de gravamen de las entidades dedicadas a la exploraci髇, investigaci髇 y explotaci髇 de hidrocarburos, hasta situarse en un 35 por ciento en el a駉 2008. Asimismo, la reforma presta especial atenci髇 a la peque馻 y mediana empresa, como elemento dinamizador de la actividad econ髆ica, de manera que la reducci髇 de cinco puntos de sus tipos impositivos se realiza en un solo ejercicio, por lo que su tipo impositivo, para aquella parte de su base imponible que no supere una determinada cuant韆, quedar� fijado en un 25 por ciento a partir del ejercicio 2007, mientras que el exceso sobre la misma tributar� al tipo del 30 por ciento a partir de ese mismo a駉.

En segundo lugar, se establece que la reducci髇 del tipo impositivo vaya acompa馻da de la progresiva eliminaci髇 de determinadas bonificaciones y deducciones que provocan efectos distorsionadores, manteniendo las deducciones que persiguen eliminar una doble imposici髇, logrando as� una mayor equidad en el tributo. No obstante, se mantiene la deducci髇 por reinversi髇 de beneficios extraordinarios estableciendo limitaciones al objeto de asegurar la inversi髇 en actividades productivas.

La mayor韆 de las deducciones se van reduciendo paulatinamente hasta su completa desaparici髇 a partir del a駉 2011. Esta reducci髇 gradual se prolonga hasta el 2014 respecto de la bonificaci髇 por actividades exportadoras de producciones cinematogr醘icas y de libros, y de las deducciones por inversiones en bienes de inter閟 cultural, producciones cinematogr醘icas y edici髇 de libros.

Menci髇 especial merece la deducci髇 por actividades de investigaci髇 y desarrollo e innovaci髇 tecnol骻ica, cuya aplicaci髇 se mantiene otros cinco a駉s, conservando esta deducci髇 la estructura actual si bien se reducen los porcentajes de deducci髇 en la misma proporci髇 en que se minoran los tipos de gravamen, al objeto de que las empresas puedan adaptar sus pol韙icas de inversi髇 al nuevo marco de ayudas p鷅licas de impulso a estas actividades, dado que se introduce un nuevo instrumento, alternativo al fiscal, incentivador de estas mismas actividades, consistente en una bonificaci髇 de las cotizaciones a la Seguridad Social a favor del personal investigador.

Asimismo, desaparece tambi閚 la deducci髇 por inversiones para la implantaci髇 de empresas en el extranjero en el a駉 2007 dado que el Impuesto contiene otras formulas incentivadoras de la internacionalizaci髇 de las empresas.

En definitiva, con esta Ley se logra una mayor coordinaci髇 fiscal y convergencia en el 醡bito del Impuesto sobre Sociedades, aproximando nuestro tipo impositivo al de los pa韘es de nuestro entorno y reduciendo los incentivos fiscales selectivos, cada vez en m醩 desuso. Adem醩, se avanza en la reducci髇 de las distorsiones generadas por la diversidad de tipos en la Uni髇 Europea.

Con la importante reducci髇 del tipo impositivo y la eliminaci髇 de las bonificaciones y deducciones se pretende que la fiscalidad no distorsione la libertad de movimiento de capitales, bienes y servicios, y que al lograr una mayor coordinaci髇 fiscal internacional mejore nuestra situaci髇 competitiva en el entorno internacional.

Por otra parte, se fija el tipo de retenci髇 o ingreso a cuenta del Impuesto sobre Sociedades en un 18 por ciento, en coherencia con el nuevo tipo impositivo de los rendimientos del ahorro en el 醡bito del IRPF.

Por 鷏timo, se eliminan tambi閚 las deducciones por inversiones en cumplimiento de los programas de apoyo a los acontecimientos de excepcional inter閟 p鷅lico, reguladas en la Ley 49/2002, de 23 de diciembre, de r間imen fiscal de las entidades sin fines lucrativos y de los incentivos fiscales al mecenazgo, modific醤dose la deducci髇 por gastos de propaganda y publicidad de dichos acontecimientos, al objeto de adecuarlos a actuaciones de mecenazgo.

La disposici髇 derogatoria segunda de la Ley deroga, a partir de distintos momentos temporales, la deducci髇 por inversiones para la implantaci髇 de empresas en el extranjero, el r間imen fiscal especial de las sociedades patrimoniales, las bonificaciones por actividades exportadoras, y la mayor韆 de deducciones para incentivar la realizaci髇 de determinadas actividades del Cap韙ulo IV del T韙ulo VI del texto refundido de la Ley del Impuesto sobre Sociedades.

Por lo que se refiere a la supresi髇 del r間imen de las sociedades patrimoniales, conviene recordar que el mismo vino a sustituir al anterior r間imen de transparencia fiscal, con la finalidad de evitar el diferimiento de la tributaci髇, por parte de las personas f韘icas, de las rentas procedentes de bienes y derechos no afectos a actividades econ髆icas mediante la interposici髇 de una sociedad.

Este r間imen estaba construido de forma tal que se alcanzase en sede de la sociedad patrimonial una tributaci髇 鷑ica equivalente a la que hubiere resultado de obtener los socios directamente esas rentas, todo ello en el marco de un modelo donde el Impuesto sobre Sociedades era un antecedente del Impuesto sobre la Renta de las Personas F韘icas. La reforma de este 鷏timo impuesto vuelve al modelo cl醩ico de no integraci髇 de ambos impuestos por cuanto se unifica el tratamiento fiscal del ahorro cualquiera que sea el origen del mismo, lo cual motiva una tributaci髇 aut髇oma de ambos impuestos no estando, por tanto, justificada la integraci髇 que representa el r間imen de las sociedades patrimoniales.

Asimismo, la finalidad antidiferimiento de dicho r間imen pierde ahora su sentido con el nuevo r間imen de la tributaci髇 del ahorro. En definitiva, con la eliminaci髇 del r間imen de las sociedades patrimoniales, cuando un contribuyente realice sus inversiones o lleve a cabo sus actividades a trav閟 de la forma societaria, la tributaci髇 ser� la que corresponda aplicando las normas generales del Impuesto sobre Sociedades sin ninguna especialidad, dado que la elecci髇 de la forma jur韉ica responder� no tanto a motivos fiscales sino econ髆icos. No obstante, se regula un r間imen transitorio al objeto de que estas sociedades puedan adoptar su disoluci髇 y liquidaci髇 sin coste fiscal.

Por otra parte, se a馻den tres disposiciones adicionales al texto refundido de la Ley del Impuesto sobre Sociedades que regulan las reducciones de tipos de gravamen y de incentivos fiscales, as� como seis disposiciones transitorias. La primera de ellas regula el r間imen transitorio de la deducci髇 por inversiones para la implantaci髇 de empresas en el extranjero. La segunda contiene el r間imen de las deducciones para evitar la doble imposici髇 que a la entrada en vigor de esta Ley estuvieran pendientes de aplicar. La tercera disposici髇 transitoria establece las normas que regulan la aplicaci髇 de las deducciones del Cap韙ulo IV del T韙ulo VI que a 1 de enero de 2011, 2012 � 2014 estuviesen pendientes de aplicar, as� como la consolidaci髇 de las deducciones practicadas. La cuarta regula el r間imen transitorio correspondiente a las sociedades patrimoniales que es objeto de derogaci髇. La quinta fija el r間imen transitorio de la bonificaci髇 por actividades exportadoras. Por 鷏timo, la sexta regula el r間imen transitorio de la disoluci髇 y liquidaci髇 de las sociedades patrimoniales.

En lo referente al Impuesto sobre el Patrimonio, la desaparici髇 de las sociedades patrimoniales del marco normativo de la imposici髇 personal sobre la renta de las personas f韘icas y jur韉icas exige trasladar a la Ley 19/1991 los requisitos y condiciones que, recogidos hasta la fecha mediante remisi髇 al art韈ulo 75 de la Ley 43/1995, de 27 de diciembre, del Impuesto sobre Sociedades, vienen siendo exigidos a efectos de la exenci髇 en el Impuesto sobre el Patrimonio de las participaciones en entidades. Se mantiene en el 60 por cien el l韒ite conjunto sobre las cuotas 韓tegras de los impuestos sobre la Renta de las Personas F韘icas y sobre el Patrimonio, si bien operar� sobre la base imponible total del impuesto sobre la renta, tanto la general como la del ahorro.

Respecto al Impuesto sobre la Renta de No Residentes, se introducen modificaciones en los tipos de gravamen, tanto en el general como en los correspondientes a los establecimientos permanentes y los rendimientos del ahorro, para adecuarlos a las modificaciones introducidas en las figuras tributarias mencionadas anteriormente.