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13/09/2022 16:40:12 LIDIA ZOMMER DESPACHOS 4 minutos

¿Qué medidas de sostenibilidad se pueden implementar en un despacho de abogados?

Cada industria tiene riesgos específicos y cada letra del ESG impacta de un modo diferente para cada una. Por eso, el único modo de ser sostenible en un programa de sostenibilidad es priorizar.

LIDIA ZOMMER

Experta en marketing jurídico y socia directora de la consultora de estrategia para abogados Mirada 360º

¿Qué medidas de sostenibilidad se pueden implementar en un despacho de abogados?

 

¿Qué medidas de sostenibilidad se pueden implementar en un despacho de abogados?

 

Lidia Zommer

Experta en marketing jurídico y socia directora de la consultora de estrategia para abogados Mirada 360º

 

 

 

 

Cada industria tiene riesgos específicos y cada letra del ESG impacta de un modo diferente para cada una.

Cualquier empresa, pero especialmente los despachos de abogados tenemos recursos limitados. Sin embargo, las expectativas de los grupos de interés suelen tender al infinito.

Por eso, el único modo de ser sostenible en un programa de sostenibilidad es priorizar.

Un análisis de materialidad ayuda a priorizar lo que realmente importa a un bufete de abogados en términos de sus objetivos ambientales, sociales y de gobernanza (ESG).

Es la guía de las políticas e indicadores clave de rendimiento y el único modo de garantizar que la estrategia se centra en las áreas que resultan más relevantes para los grupos de interés prioritarios y para la empresa y nos permite adaptarnos a un entorno que evoluciona rápidamente.

Solo con la escucha proactiva y bien planificada y realizada de nuestros stakeholders, sumada a un buen análisis de sus expectativas, podemos realizar reflexiones que nos ayuden a identificar lo verdaderamente relevante. Es el único método eficaz para la toma de decisiones estratégicas.

Y hay algo importante a tener en cuenta: la "S" y la "G" de ESG son más importantes que la "E" en la abogacía, ya que el impacto medioambiental de un bufete es relativamente bajo comparado con otras actividades económicas. Cada sector y organización tiene que identificar aquello en lo que su impacto puede ser verdaderamente positivo y no sumarse irreflexivamente a modas imitativas.

Los despachos deberían reducir los temas a tratar mediante un análisis de materialidad identificando los riesgos más relevantes en relación con su modelo de negocio, pero también las oportunidades en su entorno competitivo. Con ello, en función de los recursos (limitados por definición) priorizar los objetivos y los proyectos con los que comprometerse y avanzar.

Veamos ejemplos de temas que actualmente los despachos suelen incluir en sus memorias de información no financiera:

Medio ambiente

- Digitalización de los archivos

- Gestión eficiente de la energía en las oficinas

- Reducción de los viajes reemplazando reuniones presenciales por virtuales cuando sea posible

- Utilización de medios de transporte con menos emisiones

- Fomento del teletrabajo

Social

- Diversidad, igualdad e inclusión en sus equipos en todas las cateogrías profesionales

- Conciliación del trabajo con la vida personal

- Trabajo probono para colectivos desfavorecidos

- Apoyo a las instituciones del Estado de Derecho

- Compromiso con las facultades de derecho y los estudiantes por medio de docencia y beca

 

Gobernanza

- Transparencia y objetividad en el acceso a la sociatura

- Medidas para el incremento de la representación de socias mujeres y de minorías en los consejos de administración y puestos de responsabilidad

- Sistemas de detección de conflictos de interés de los encargos que se reciben de los clientes

- Prevención del blanqueo de capitales y de la financiación del terrorismo y otros riesgos penales

- Confidencialidad y secreto profesional

 

¿Se puede ir más allá?, ¿se puede buscar compromisos con temas relevantes y más diferenciadores? Seguramente que sí.

En los últimos años, los criterios ESG han pasado de ser considerados algo tangencial y vinculado al cumplimiento a convertirse en un marco general que forma parte de la estrategia de las grandes empresas. La tendencia indica que su obligatoriedad se está extendiendo hasta empresas más pequeñas.

Los factores ESG están reestructurando la actividad empresarial y los despachos cada vez recibirán más presión de sus clientes corporativos, de sus profesionales y de los operadores del sector para incluirlas en su estrategia.

El mejor momento para empezar a preocuparse por cómo minimizar el impacto negativo y maximizar el positivo ya pasó. El segundo mejor momento es hoy.

Estamos a tiempo: el despacho que abrace su propia sostenibilidad y la sostenibilidad de la sociedad en la que opera como pilares de su estrategia puede lograr una ventaja competitiva. Mañana quizás sea simplemente necesario para sobrevivir.

El Legal Management Forum que se celebrará los próximos días 18 y 19 de octubre dedicará una de sus mesas “Sostenibilidad: oportunidad y obligación para las firmas” a este tema. Toda la información en este enlace.

 

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