Sumario

Ley [COMUNIDAD DE MADRID] 4/2003, 11 marzo, rectificada por Correcci�n de errores (�B.O.C.M.� 23 abril).

La Comunidad de Madrid, en ejercicio de la competencia atribuida por el art�culo 26.3.1.5 de su Estatuto de Autonom�a y de conformidad con lo previsto en la Ley 31/1985, de 2 de agosto, de Regulaci�n de las Normas B�sicas sobre �rganos Rectores de las Cajas de Ahorros (LORCA), dict� la Ley 5/1992, de 15 de julio, de �rganos de Gobierno de las Cajas de Ahorro de la Comunidad de Madrid. Esta Ley se ha revelado como un instrumento eficaz, en orden a la actividad financiera y social de la Caja, de tal suerte que en el per�odo transcurrido se ha duplicado tanto el balance como el beneficio, adem�s de dotar a la Obra Social con un porcentaje cercano al 26 por ciento del excedente total.

La nueva Ley que ahora se presenta, tiene un doble objetivo:

En primer lugar, supone la adaptaci�n a las modificaciones introducidas por la Ley 44/2002, de 22 de noviembre, de Medidas de Reforma del Sistema Financiero (Ley Financiera), que da nueva redacci�n a determinados preceptos de la LORCA, con la finalidad global de aumentar los niveles de democratizaci�n y profesionalizaci�n de las Cajas de Ahorros. En este marco se encuadran las distintas medidas abordadas por el art�culo 8 de la Ley Financiera y, en concreto, las que afectan a las siguientes materias:

• - L�mite del 50 por ciento de la representaci�n p�blica y porcentajes m�nimos y m�ximos de representaci�n de los sectores de impositores y empleados.
• - Requisitos de los componentes de los �rganos de gobierno de las Cajas de Ahorros.
• - Procedimiento de elecci�n de Consejeros Generales en representaci�n del grupo de impositores.
• - Requisitos para acceder al cargo de Consejero General, duraci�n e irrevocabilidad del mandato.
• - Requisitos para acceder al cargo de vocal del Consejo de Administraci�n, duraci�n e irrevocabilidad del nombramiento.

Adem�s, la Ley Financiera se ocupa de aumentar la eficiencia de las Cajas de Ahorros con medidas tales como, permitir la delegaci�n de facultades del Consejo de Administraci�n en los �rganos de gobierno de las entidades que constituyan alianzas entre Cajas de Ahorros, acuerdos de colaboraci�n entre Cajas de Ahorros y fusiones entre Cajas con sedes sociales en diferentes Comunidades Aut�nomas.

En definitiva, con esta nueva Ley de la Comunidad de Madrid se da cumplimiento al mandato contenido en la Disposici�n Transitoria Decimosegunda de la Ley Financiera en relaci�n a la adaptaci�n con la misma, en el plazo de seis meses, de la legislaci�n de las Comunidades Aut�nomas en materia de Cajas de Ahorros.

En segundo lugar, el tiempo transcurrido desde la aprobaci�n de la Ley 5/1992 ha permitido, por una parte, contar con la experiencia necesaria para desarrollar y clarificar diversos aspectos relativos al desenvolvimiento de los �rganos de gobierno de las Cajas de Ahorros con sede social en nuestra Comunidad y, por otra, disponer de una consolidada doctrina del Tribunal Constitucional en relaci�n con el reparto de competencias entre el Estado y las Comunidades Aut�nomas.

Adem�s, el importante n�mero de disposiciones de diferente jerarqu�a dictadas sobre esta materia desde aquella fecha, aconseja introducir cambios tendentes a clarificar las competencias de la Comunidad de Madrid en materia de Cajas de Ahorros y a recoger dichas competencias en una norma de rango suficiente.

Razones de seguridad jur�dica han determinado la conveniencia de elaborar un texto de nueva planta que no se limita a la regulaci�n de los �rganos de gobierno de las Cajas, aunque tampoco es, ni pretende ser, un texto exhaustivo de cuantas materias de diversa naturaleza est�n relacionadas con las actividades de las Cajas.

As�, el T�tulo I, contiene disposiciones generales dedicadas, entre otras prescripciones, al �mbito de aplicaci�n de la Ley, que se limita a las Cajas de Ahorros con domicilio social en la Comunidad de Madrid, quedando, en su caso, para otras disposiciones el ejercicio de competencias de la Comunidad sobre las actividades de las Cajas de Ahorros con domicilio social fuera de la propia Comunidad. En el mismo T�tulo se contempla adecuar el deber de guardar reserva acerca de informaciones sobre clientes y la exclusividad en el ejercicio de actividades y usos de denominaciones reservadas a las Cajas de Ahorros.

Se contempla, adem�s, la existencia de dos Registros, uno, gen�rico, de Cajas de Ahorros en el que deben inscribirse todos los actos relativos a las mismas y otro, espec�fico, de Altos Cargos.

El T�tulo II recoge las competencias de la Comunidad de Madrid en materia de Cajas de Ahorros, que se encontraban hasta ahora en disposiciones dispersas de diferente jerarqu�a, actualiz�ndolas y adecu�ndolas a la legislaci�n b�sica del Estado. As�, por vez primera en sede legal, se regula el r�gimen jur�dico de las Cajas de Ahorros respecto de su constituci�n, transformaci�n y extinci�n, as� como lo relativo a las modificaciones estatutarias y de reglamentaci�n electoral.

Se recogen, adem�s, las competencias m�s destacables de la Comunidad de Madrid en materias tan esenciales para las Cajas como las relativas a su Obra Ben�fico-Social.

El T�tulo III, sobre los �rganos de gobierno de las Cajas de Ahorros, recoge en su Cap�tulo I las disposiciones comunes a todos ellos; regulando, entre otros, los principios de actuaci�n de los miembros que los componen, a quienes se exigen particulares requisitos de honorabilidad comercial y profesional.

Destaca, igualmente, el r�gimen de retribuciones que se adecua a la nueva regulaci�n sobre causas de incompatibilidad de los miembros de determinados �rganos de gobierno.

El Cap�tulo II, regula la Asamblea General, destacando en este �mbito la creaci�n de un nuevo sector de representaci�n de intereses sociales y colectivos. Se trata del sector de Entidades representativas, que se une a los sectores ya tradicionales de Corporaciones Municipales, Impositores, Entidades Fundadoras, Asamblea de Madrid y Empleados. Con esta nueva representaci�n se pretende aumentar el nivel de democratizaci�n de las Cajas, dando cabida a la sociedad civil. Los componentes de este sector de representaci�n vienen mayoritariamente definidos en la Ley, de manera que est�n presentes las Organizaciones empresariales y Sindicales que forman parte del Consejo Econ�mico y Social de la Comunidad de Madrid as� como las Universidades. Adem�s este nuevo sector est� conformado por fundaciones, corporaciones o asociaciones de car�cter cultural, cient�fico c�vico, econ�mico y profesional de inter�s para las Cajas de Ahorros o de reconocido arraigo en nuestra Comunidad. Respetando la autonom�a de las Cajas de Ahorros, estas �ltimas entidades son designadas por acuerdo de la Asamblea General a propuesta del Consejo de Administraci�n.

Otra de las novedades m�s destacables es la modificaci�n de los porcentajes de representaci�n de los distintos sectores. Tal modificaci�n parte de la premisa de que la representaci�n conjunta de Entidades y Corporaciones P�blicas no sobrepase la mitad de los derechos de voto de los �rganos rectores.

En este sentido, se ha producido una reducci�n sustancial de la presencia p�blica en los �rganos de gobierno de las Cajas de Ahorros con domicilio social en la Comunidad de Madrid, de manera que se rebaja el peso tanto de las Corporaciones Municipales como de la Asamblea de Madrid en las Asambleas Generales, Consejos de Administraci�n y Comisiones de Control.

En definitiva, la representaci�n p�blica en las Cajas de Ahorros de nuestra Comunidad se sit�a en torno al 35 por ciento lo que supone cumplir eficazmente el objetivo de aumentar la profesionalizaci�n de los �rganos de gobierno de estas entidades de cr�dito de tanta relevancia econ�mica y social.

Igualmente destacan las modificaciones realizadas en el Estatuto de los Consejeros Generales. En este sentido, siguiendo el objetivo de aumentar la profesionalizaci�n, se establecen nuevos per�odos m�ximos de mandato, mayores requisitos de acceso al cargo y nuevas causas de inelegibilidad e incompatibilidad, adem�s de la irrevocabilidad del nombramiento.

Finalmente, se clarifican algunos aspectos relativos al funcionamiento de la Asamblea. Destaca especialmente la idea de mantener reforzada la toma de decisiones sobre asuntos trascendentes que afecten a las Cajas y que deben ser resueltos mediante la b�squeda y consecuci�n del mayor grado de acuerdo entre los agentes concernidos, como ha venido siendo norma habitual desde la publicaci�n de la Ley 5/1992, sobre todo, en aspectos de gran importancia para el futuro como son las emisiones de determinados instrumentos financieros computables como recursos propios, es decir las cuotas participativas.

Los Cap�tulos III y IV, dedicados al Consejo de Administraci�n y a la Comisi�n de Control, respectivamente, presentan novedades respecto del Estatuto de los vocales del Consejo de Administraci�n y de los miembros de la Comisi�n de Control. La nueva regulaci�n se establece en paralelo a lo ya recogido para los Consejeros Generales.

Destaca especialmente, respecto de los vocales del Consejo de Administraci�n y miembros de la Comisi�n de Control, la existencia de dos nuevas causas de inelegibilidad e incompatibilidad. Una viene determinada por el seguimiento facultativo que hace la presente Ley del l�mite de edad exigido, como requisito para la elecci�n, por parte de la Ley Financiera. Se ha considerado conveniente fijar el l�mite de los setenta a�os como condici�n de elegibilidad.

La segunda causa supone incidir, por v�a auton�mica, en la l�nea de la profesionalizaci�n. As�, si bien con anterioridad a la presente Ley se establec�a como causa de incompatibilidad tener la condici�n de Diputado en la Asamblea de Madrid, ahora se profundiza en este sentido, de manera que es causa de incompatibilidad tener la condici�n de miembro de las Cortes Generales, del Parlamento Europeo, de las Asambleas Legislativas de las Comunidades Aut�nomas as� como, tener la condici�n de Alcalde, Concejal, o Alto Cargo de cualquier Administraci�n P�blica.

El T�tulo IV se ocupa, con car�cter novedoso, de las normas de conducta. Se trata de trasladar a los �rganos de gobierno de las Cajas de Ahorros y a sus miembros algunas t�cnicas de control que se est�n llevando a cabo en el mundo empresarial y que pueden suponer una apuesta mayor por la transparencia, como son la elaboraci�n de normas de conducta y buen gobierno, de acuerdo con el principio de autorregulaci�n.

A continuaci�n el T�tulo V incorpora al contenido sustantivo de la Ley las l�neas b�sicas que deben inspirar la gesti�n de la finalidad social de las Cajas, cual es la reversi�n a la sociedad de una parte importante de su excedente. Se prev� que dicha gesti�n de su Obra Social, pueda realizarse a trav�s de una Fundaci�n cuyo Patronato estar� formado por los miembros del Consejo de Administraci�n de la Caja, si bien, adem�s, el Consejo de Administraci�n podr� decidir la integraci�n, como patronos, de Consejeros Generales que no ostenten la condici�n de Vocales de dicho Consejo de Administraci�n.

Por su parte, el T�tulo VI recoge tambi�n por primera vez, en norma con rango de Ley, como no pod�a ser de otra manera, el r�gimen sancionador aplicable a las Cajas de Ahorros con domicilio social en la Comunidad de Madrid, incorporando la normativa vigente sobre disciplina e intervenci�n de las entidades de cr�dito.

Finalmente se recogen dos disposiciones adicionales y cinco disposiciones transitorias, abarcando estas �ltimas, fundamentalmente, el per�odo temporal entre la entrada en vigor de la presente Ley y la necesaria adaptaci�n de Estatutos y Reglamento Electoral, que deber� preceder a la renovaci�n de los �rganos de gobierno. La Ley finaliza con una disposici�n derogatoria y dos disposiciones finales.