Decreto 32/2018, de 12 de abril, por el que se aprueba la Estrategia de Acción frente al Cambio Climático de Cantabria 2018-2030

ACRONIMOS Y DEFINICIONES

1. INTRODUCCIÓN

Un objetivo prioritario y compartido del Gobierno de Cantabria es la acción frente al cambio climático y el fomento del desarrollo sostenible en nuestra comunidad autónoma.

El cambio climático constituye un fenómeno global, tanto por sus causas como por sus efectos y requiere de una respuesta multilateral basada en la colaboración de todos los países.

La vigésimo primera sesión de la Conferencia de las Partes (COP21) que tuvo lugar en París del 30 de noviembre al 11 de diciembre de 2015, ha culminado con un acuerdo vinculante dirigido a "reforzar la respuesta mundial a la amenaza del cambio climático, en el contexto del desarrollo sostenible y de los esfuerzos por erradicar la pobrezael Acuerdo de París.

El Acuerdo de París tiene como objetivo fundamental evitar que el incremento de la temperatura media global supere los 20C respecto a los niveles preindustriales, y busca además promover esfuerzos adicionales que hagan posible que el calentamiento global no supere los 1,50C. Con este texto, se sanciona la voluntad de los Estados de actuar con la mayor ambición posible para reducir los riesgos y los impactos del cambio climático en todo el mundo.

El 23 de octubre de 2008 se aprobó mediante acuerdo del Consejo de Gobierno la Estrategia de Acción frente al Cambio Climático de Cantabria, formulada para el período 2008-2012, incluyendo una serie de medidas para la mitigación de emisiones y la adaptación a los efectos del cambio climático.

Desde la aprobación de esta Estrategia, se han dado pasos en el marco internacional y europeo, referidos anteriormente, para avanzar hacia una economía baja en carbono que mitigue los efectos derivados del aumento de la temperatura global.

Finalizado el plazo de vigencia de la Estrategia Cántabra de Acción frente al Cambio Climático, formulada para el período 2008-2012 y con el fin de asumir nuestra cuota de corresponsabilidad en el cumplimiento del objetivo global de reducción de emisiones y protegernos frente a los impactos derivados, el Gobierno de Cantabria decide acometer la elaboración de una nueva estrategia de lucha frente al cambio climático que, partiendo de una metodología bottom-up (de abajo-arriba), basada en la participación, incluya medidas de reducción de emisiones directas y cuantificables en los sectores difusos y de protección frente a impactos, incentivando un cambio de modelo de vida hacia una economía baja en carbono en nuestra comunidad autónoma.

El objetivo principal de esta estrategia es corresponsabilizarse con la consecución del objetivo español de reducción del 10% de las emisiones de GEI de los sectores difusos para 2020 respecto a los niveles de 2005, así como contribuir a que España cumpla en el 2030 la propuesta de objetivo de reducción del 26% de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) respecto al año 2005, derivada del Marco de Políticas de Energía y Cambio Climático 2021-2030, en consonancia con los compromisos contraídos en el Acuerdo de París.

La Dirección General de Medio Ambiente es el órgano coordinador de la elaboración de la Estrategia y encargado de informar sobre la hoja de ruta a los actores participantes. Para su elaboración se ha diseñado un proceso participativo que incluye las aportaciones de los diferentes departamentos del Gobierno de Cantabria (aproximación interna) y de los diferentes actores de la sociedad cántabra (aproximación externa).

En el proceso de participación interna han participado los técnicos designados de 28 Direcciones Generales del Gobierno de Cantabria, a través de la aportación de medidas de mitigación y adaptación en sus respectivos ámbitos competenciales. Se han mantenido diversas reuniones sectoriales con técnicos de la D.G. de Medio Ambiente, y el 28 de septiembre de 2016 se celebró la Ponencia Técnica de Cambio Climático, de conformidad con lo establecido en el Decreto 145/2007.

Como resultado de la aportación técnica de las diferentes D. Generales se elaboró el primer borrador de la Estrategia de Acción frente al Cambio Climático de Cantabria, en el que se ha fijado un horizonte temporal 2018-2030, pero que pretende ser una estrategia abierta donde se vayan incorporando las diferentes medidas que se propongan por parte del Gobierno de Cantabria en años sucesivos.

Con fecha 15 de diciembre de 2016 se reunió la 5a Comisión Interdepartamental sobre Cambio Climático, aprobando las medidas presentadas en el primer borrador.

Con fecha 13 de marzo de 2017 (º registro 3.669) se remite al Consejo Asesor de Medio Ambiente de Cantabria el 2o borrador de Estrategia, dentro del período de participación externa abierto a través de la página web «Cantabria Participa», con la posibilidad de hacer aportaciones a dicho borrador a través dicha web, hasta el 19 de abril de 2017 (durante 8 semanas), aportaciones contestadas a través de la propia plataforma y cuya incorporación constituye el 3o borrador.

De forma simultánea comienzan los procesos de participación de los grupos de interés, que se relacionan a continuación:

• - Universidades e Investigación

  (las aportaciones de este grupo conforman el 4o borrador de Estrategia).

• - Mesas de participación en la Cámara de Cantabria para las organizaciones públicas y para las organizaciones privadas.
• - Proceso participativo realizado por el CIMA, con ONGs, y Ayuntamientos.
• - Jornada de participación empresarial en la CEOE desarrollada el 19 de octubre de 2017.
• - Jornada CCOO "Estrategia de acción frente al cambio climático de Cantabria", 29 de noviembre de 2017.
• - UGT, dentro del proyecto «Los trabajadores ante el cambio climático: Retos y acciones» ha difundido el borrador entre sus afiliados, y campañas de sensibilización con la elaboración de 2 trípticos sobre cambio climático y realización de talleres de difusión de la Estrategia.

En el anexo II se detalla el proceso participativo externo.

La incorporación de las aportaciones (tras consulta a las diferentes Direcciones Generales que forman parte de la Ponencia Técnica), conforman el 5o borrador de Estrategia.

Se emite dictamen favorable de la Comisión Permanente del Consejo Asesor de Medio Ambiente de Cantabria, en reunión de 15 de marzo de 2018 al 5o borrador de la Estrategia.

El 23 de marzo de 2018 se reúne la 7a Ponencia Técnica de Cambio Climático, que presenta algunas aportaciones que configuran el 6o borrador final de la Estrategia, aprobado por la Comisión Interdepartamental de Cambio Climático el 4 de abril de 2018.

Con fecha XX el Consejo de Gobierno de Cantabria, acuerda aprobar la Estrategia de Acción Frente al Cambio Climático de Cantabria 2018-2030 que se presenta en este documento.

2. ANTECEDENTES

2.1 NIVEL INTERNACIONAL

El cambio climático constituye un fenómeno global, tanto por sus causas como por sus efectos y requiere de una respuesta multilateral basada en la colaboración de todos los países.

Para ofrecer al mundo una visión científica clara del estado actual de los conocimientos sobre el cambio climático y sus posibles repercusiones medioambientales y socioeconómicas, se creó en 1988 a propuesta del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC): principal órgano internacional encargado de evaluar el cambio climático.

Desde su creación, el IPCC ha elaborado una serie de Informes de Evaluación sobre el estado de nuestro conocimiento acerca de las causas del cambio climático, sus efectos potenciales y las opciones en cuanto a estrategias de respuesta. Asimismo, ha elaborado informes especiales, documentos técnicos, metodologías y directrices que se han convertido en referencia de uso habitual ampliamente utilizadas por los responsables en la toma de decisiones políticas.

En base al primer informe del IPCC, se creó el 9 de mayo de 1992 en Nueva York la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC). La Convención fue firmada durante la Cumbre de la Tierra en junio de 1992 en Río de Janeiro y entró en vigor en 1994. El objetivo último de la Convención es lograr, de conformidad con las disposiciones pertinentes de la misma, la estabilización de las concentraciones de gases de efecto invernadero en la atmósfera a un nivel que impida interferencias antropógenas peligrosas en el sistema climático. Ese nivel debería lograrse en un plazo suficiente para permitir que los ecosistemas se adapten naturalmente al cambio climático, asegurar que la producción de alimentos no se vea amenazada y permitir que el desarrollo económico prosiga de manera sostenible.

Con el objetivo de asegurar lo estipulado por la Convención, se han establecido diversas instituciones, entre las que se encuentran:

• 1. La Conferencia de las Partes (COP), formada por los países que han firmado el tratado, fue creada para examinar periódicamente (anualmente) el cumplimiento de los objetivos de la Convención.
• 2. La Secretaría, para dar soporte a la Convención.
• 3. El Órgano Subsidiario de Asesoramiento Científico y Tecnológico, integrado por representantes de los gobiernos con competencia en la esfera de especialización pertinente, que informará y asesorará a la Conferencia de las Partes sobre aspectos científicos y tecnológicos relacionados con la Convención.
• 4. El Órgano Subsidiario de Ejecución, integrado por representantes gubernamentales que sean expertos en cuestiones relacionadas con el cambio climático, para ayudar a la Conferencia de las Partes en la evaluación y el examen del cumplimiento efectivo de la Convención.

En la tercera sesión de la Conferencia de las Partes (COP3), celebrada en Japón en 1997, se adoptó el Protocolo de Kyoto, principal acuerdo internacional adoptado en materia de cambio climático. El citado Protocolo, que entró en vigor el 16de febrero de 2005, estableció un compromiso de reducción de gases de efecto invernadero concreto y jurídicamente vinculante para aquellos países desarrollados y en transición a una economía de mercado que lo ratificaron. Este compromiso consistió en que las citadas Partes debían reducir, de forma individual o conjunta, las emisiones medias de GEI en el período de compromiso comprendido entre los años 2008-2012 en no menos de un 5,2% respecto a las emisiones del año base (1990).

Un aspecto muy importante del Protocolo de Kyoto es que contempla la existencia de ciertos mecanismos de flexibilidad, para facilitar a los agentes implicados el cumplimiento de sus compromisos de reducción:

• 1. Mecanismos de Desarrollo Limpio: desarrollo de proyectos de reducción de emisiones en países sin límites a sus emisiones (economías en desarrollo).
• 2. Mecanismos de Aplicación Conjunta: desarrollo de proyectos de reducción de emisiones en un país con límites a sus emisiones (economías en transición).
• 3. Comercio de derechos de emisión: mecanismo bajo el cual los países que hayan reducido sus emisiones por debajo del nivel exigido pueden vender ese excedente a países que superen sus límites de emisión.

La vigésimo primera sesión de la Conferencia de las Partes (COP21), que tuvo lugar en París del 30 de noviembre al 11 de diciembre de 2015, ha culminado con un acuerdo histórico de lucha contra el cambio climático, fundamental para la promoción de un desarrollo bajo en emisiones, resiliente al clima y sostenible: el Acuerdo de París.

El Acuerdo de París, tiene como objetivo fundamental evitar que el incremento de la temperatura media global supere los 20C respecto a los niveles preindustriales, y busca además promover esfuerzos adicionales que hagan posible que el calentamiento global no supere los 1,50C. Con este texto, se consagra la mayor ambición posible para reducir los riesgos y los impactos del cambio climático en todo el mundo.

El Acuerdo pone en valor la importancia de adaptarse a los efectos adversos del cambio climático, estableciendo un objetivo mundial cualitativo de aumentar la capacidad de adaptación, en un contexto en el que todos los países se están enfrentando a los impactos derivados del incremento de la temperatura global. Asimismo, el Acuerdo sienta las bases para una transformación hacia modelos de desarrollo bajos en emisiones. Para ello, se cuenta con un importante paquete financiero que ayudará a la implementación del Acuerdo y que deberá construirse sobre la base del objetivo de movilización de 100.000 millones de dólares anuales, a partir de 2020, a través de distintas fuentes, y que se revisará al alza antes de 2025.

La Unión Europea ratificó el Acuerdo de París el 6 de octubre de 2016, haciendo posible la entrada en vigor del citado acuerdo el 4 de noviembre tras alcanzarse la ratificación de al menos 55 países que representen el 55% de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero.

2.2 NIVELEUROPEO

En el ámbito de la Unión Europea son numerosas las actuaciones para hacer frente al reto del cambio climático. En este sentido, el Parlamento Europeo y el Consejo Europeo han aprobado numerosas Directivas, Decisiones y Reglamentos relacionados con la lucha contra al cambio climático.

En el marco del protocolo de Kyoto (2008-2012), la UE en su conjunto se comprometió a reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero en un 8% respecto al año base. Este objetivo se cumplió con creces al conseguirse reducciones del 11,8% respecto al año base.

En el contexto UE, destaca la aprobación, en 2008, del Paquete Europeo de Energía y Cambio Climático 2013-2020, por medio del cual se establecen los objetivos del 20/20/20 en materia de energías renovables, eficiencia energética y reducción de emisiones de gases de efecto invernadero a alcanzar para 2020. Los objetivos planificados son:

• • Reducir las emisiones de efecto invernadero de la UE un 20%, como mínimo, con respecto a las de 1990.
• • Aumentar al 20% la parte de las energías renovables en el consumo total de la UE.
• • Mejorar la eficiencia energética para reducir el consumo de energía primaria un 20% con respecto al previsto.

En las Conclusiones del Consejo Europeo de octubre de 2014, se aprobó el Marco de Políticas de Energía y Cambio Climático 2021-2030 («Marco 2030»), con el fin de dotar de continuidad al Paquete Europeo de Energía y Cambio Climático. El mismo está en la senda marcada por la hoja de ruta prevista hasta el año 2050, que plantea un objetivo de reducción del 80% respecto a los niveles de 1990.

Así, los nuevos objetivos para el año 2030 son:

• • Reducir un 40% las emisiones de GEI, respecto a los niveles de 1990. Este objetivo se traduce en una reducción del 43% en las emisiones

  ETS y un 30% en las no-ETS, ambos porcentajes tomando como año base el 2005.

• • Aumentar el uso de las energías renovables hasta una cuota del 27% del total del consumo energético.
• • Aumentar la eficiencia energética para alcanzar el 27% de ahorro respecto a un escenario tendencial (aunque esta cifra es meramente indicativa).

Con el fin de lograr el objetivo interno a largo plazo de la Unión Europea de reducir las emisiones en al menos un 80% de aquí a 2050, es necesario un avance continuo para que la transición a una economía hipocarbónica se haga realidad. La transición exige cambios en el comportamiento empresarial e inversor e incentivos en todo el espectro político. Es importante señalar que la transición brindará oportunidades a la Unión Europea para el crecimiento y el empleo. Asimismo, estimulará la inversión y la innovación en energías renovables, contribuirá a la ambición de la Unión Europea de convertirse en un líder mundial y aumentará el crecimiento de los mercados de bienes y servicios producidos en la UE, por ejemplo, en el ámbito de la eficiencia energética. En el contexto de la transición a una energía limpia, habrá que aplicar nuevas políticas y medidas para reducir las emisiones de los Estados miembros. Será necesario estimular firmemente la actuación de los gobiernos locales y regionales, de las ciudades y de las organizaciones locales y regionales. Por su parte, los Estados miembros deberán garantizar la cooperación entre las autoridades centrales y locales a diferentes niveles.

2.3 NIVEL NACIONAL

En el marco del protocolo de Kyoto, a España le correspondió limitar sus emisiones de gases de efecto invernadero a un aumento de las mismas de un 15% sobre las del año 1990, en base al acuerdo entre los países de la Unión Europea de repartir internamente el objetivo común de reducción del 8% en función de su situación de partida y de sus expectativas de crecimiento.

Las previsiones de emisiones para el período de Kyoto no eran demasiado esperanzadoras en cuanto al cumplimiento de los objetivos fijados por parte de España, por ello el Gobierno estableció el objetivo de conseguir durante del quinquenio 2008-2012 que las emisiones totales en España de gases de efecto invernadero no superaran un incremento medio en el período del 37% respecto a las emisiones del año base, como queda recogido en la Estrategia Española de Cambio Climático y Energía Limpia aprobada en el año 2007. Esto supone 22 puntos porcentuales de diferencia respecto al 15% de incremento fijado, de los cuales el 2% se obtendría mediante sumideros y el resto, 20%, mediante mecanismos de flexibilidad (adquisición de créditos de carbono). Gracias a estos mecanismos de flexibilidad, España logró cumplir los objetivos fijados por el Protocolo de Kyoto, situándose sus emisiones en el período 2008-2012 en un +29.88% respecto al año base, compensando el exceso de emisiones con la compra de créditos de carbono.

La Estrategia Española necesitó contar con diversos instrumentos adicionales para asegurar su efectividad en la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero en los plazos requeridos. El instrumento más significativo fue el Plan de Medidas Urgentes de la Estrategia Española que recoge medidas que realizadas a la mayor brevedad posible permitieron alcanzar las reducciones requeridas para el período 2008-2012. Como parte esencial de este Plan de Medidas Urgentes hay que destacar la elaboración de un nuevo Plan de Acción de Ahorro y Eficiencia Energética 20082012, que permitió una reducción de emisiones de C02 a la atmósfera de 238 millones de toneladas.

La concreción de las asignaciones anuales de emisión correspondientes a España para el período 2013-2020 en los sectores difusos (actividades no sujetas al comercio de derechos de emisión) y un mejor conocimiento de las medidas de mitigación en dichos sectores, plantea la conveniencia de la actualización de la Estrategia española. Los primeros pasos se han dado a través de la aprobación en 2014 de una Hoja de Ruta para los sectores difusos a 2020, que parte de una evaluación de las emisiones con las proyecciones más recientes y de los límites impuestos por la Decisión de reparto de esfuerzos de la UE (Decisión 406/2009/CE), que fijan un objetivo de reducción de emisiones difusas para España del 10% en 2020 respecto a los niveles de 2005. Esta evaluación arroja, con los datos disponibles, un repunte de las emisiones y un exceso de 54 Mt C02 eq (equivalentes) sobre el objetivo asignado. Si bien esta evaluación se debe actualizar periódicamente, se hace imprescindible proponer medidas adicionales que permitirían a España crecer y reducir emisiones para, al menos, cumplir con sus compromisos en materia de mitigación del cambio climático.

La Hoja de Ruta propone medidas de actuación en los sectores difusos, adicionales a las ya existentes, cuya puesta en marcha con el grado de intensidad adecuado, permite a España desacoplar crecimiento y emisiones, cumplir con los objetivos adquiridos en materia de mitigación de emisiones de gases de efecto invernadero a 2020 de manera eficiente y además permite avanzar en el cumplimiento del objetivo para 2030 de reducción del 26% de las emisiones difusas de GEI respecto al los niveles de 2005, en cumplimiento de los compromisos contraídos en el marco del Acuerdo de París.

En la actualidad, desde el Gobierno de España se está trabajando en la elaboración de una Ley de Cambio Climático y Transición Energética, que servirá para cumplir con los objetivos de la UE en materia de sostenibilidad, así como los recogidos en el Acuerdo de París.

La adaptación a los impactos se ha convertido en el otro pilar de la lucha contra el cambio climático, conjuntamente con las políticas de mitigación.

El Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático se elabora como marco para la coordinación entre administraciones públicas para las actividades de evaluación de impactos, vulnerabilidad y adaptación al cambio climático.

El Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático es el marco general de referencia para las actividades de evaluación de impactos, vulnerabilidad y adaptación al cambio climático. Los objetivos específicos iniciales son:

• • Desarrollar escenarios climáticos regionales para la geografía española.

  Desarrollar y aplicar métodos y herramientas para evaluar los impactos, la vulnerabilidad y la adaptación al cambio climático en distintos sectores socioeconómicos y sistemas ecológicos en España.

• • Aportar al esquema español de l+D+i las necesidades más relevantes en materia de evaluación de impactos del cambio climático.
• • Realizar un proceso continuo de actividades de información y comunicación de los proyectos.
• • Promover la participación entre todos los agentes implicados en los distintos sectores/sistemas, con el objeto de integrar en las políticas sectoriales la adaptación al cambio climático.
• • Elaborar informes específicos con los resultados de las evaluaciones y proyectos.
• • Elaborar informes periódicos de seguimiento y evaluación de los proyectos y del conjunto del Plan Nacional de Adaptación.

2.4 NIVELAUTONÓMICO

Cantabria también ha querido unirse a los esfuerzos que se están realizando frente al cambio climático. La Administración General del Estado se ha propuesto desarrollar iniciativas entre las que cabe destacar la elaboración, por parte de las Comunidades

Autónomas, de estrategias contra el cambio climático que contemplen medidas de mitigación y adaptación, coherentes con la Estrategia Española.

Con la finalidad de conseguir una mayor eficacia y eficiencia en las actuaciones a desarrollar por la Comunidad Autónoma de Cantabria que afecten o puedan afectar al cambio climático, se aconseja la creación de órganos de coordinación y asesoramiento que actúen de manera colegiada entre los diferentes departamentos de la administración autonómica implicados en la lucha contra el cambio climático. Por este motivo el 8 de noviembre de 2007 se aprueba el Decreto 145/2007, por el que se crea la Comisión Interdepartamental y la Ponencia Técnica sobre el Cambio Climático.

La Comunidad Autónoma de Cantabria elaboró en el 2009 la Estrategia de Acción frente al Cambio Climático de Cantabria para el período 2008-2012. En dicho documento se fijaron cuatro objetivos principales atendiendo a las dos vertientes del cambio climático: mitigación y adaptación. Los objetivos eran:

• • Objetivo 1. La reducción de GEI esperada durante el período 2008-2012, respecto a lo que ocurriría en caso de no poner en marcha ninguna política de mitigación de las emisiones, es de 1.043.000 toneladas de CO2 eq (promedio anual de emisiones totales). Esto permitiría asumir un objetivo de reducción del -12% respecto al escenario tendencial, asumiendo una reducción media de 1,74 toneladas de C02 eq por habitante. El cumplimiento de este objetivo está condicionado a la instalación, para el año 2012, de 1100 MW eólicos, proyectados como modificación principal del Plan de Energías Renovables de Cantabria (PLENERCAN).

  Este primer objetivo no llegó a cumplirse debido a la sentencia de TSJC n0 000752/2012de 17de octubre de2012 mediante lacualse declaró nula la Resolución de 2 de junio de 2009 del Consejero de Industria y Desarrollo TecnológicodelGobiernodeCantabria, por la quese convocaba el concurso público para la asignación de potencia eólica para la instalación de Parques eólicos en la Comunidad Autónoma de Cantabria por una potencia total de 1.261,5Mw.Únicamente fueron instalados 35,3 Mw eólicos de los 300Mw previstosene! PLENERCAN 2006-2011.

• • Objetivo 2. En conjunto, todas las medidas de la Estrategia de Acción frente al Cambio Climático permiten alcanzar una reducción promedio anual de 359.000 toneladas de C02 en el período 2008-2012, frente al escenario tendencial. Es decir, la Estrategia permitiría reducir en un -3% las emisiones directas de GEI durante el período 2008-2012 respecto al año 2005.

  Este segundo objetivo puede darse por cumplido al haber conseguido durante el período de vigencia de la anterior estrategia no solo la reducción del 3% de las emisiones directas de GEI, sino del 8.24% respecto al año 2005, reduciéndose en 1.202.653 toneladas de C02 respecto al escenario tendencial, cifra tres veces superior a la prevista.

• • Objetivo 3. Si se tienen en cuenta solo los sectores difusos, la reducción que se alcanzaría con la aplicación de las distintas medidas contempladas en la estrategia, sería de un -10% durante el período 2008-2012 con respecto a 2005.

  Analizando las emisiones de los sectores difusos durante el período de vigencia de la anterior estrategia, se constata que la reducción únicamente fue del 5,07% frente al 10% previsto.

• • Objetivo 4. Potenciar los sumideros de carbono de Cantabria hasta alcanzar una remoción equivalente al 2% de las emisiones del año 1990.

Sin nuevos datos de remociones de sumideros desde el año 2008 no podemos afirmar que este objetivo se cumpliera. Este objetivo preveía alcanzar una remoción de 0,95 millones de toneladas de C02 en el período de vigencia de la anterior estrategia. El último dato disponible para 2008 obtenido del Inventario de Sumideros deC02 de Cantabria, indica que las absorciones netas para ese año fueron de 0,4 millones de toneladas de C02.

Dentro de las medidas de actuación contenidas en la estrategia regional- como una actuación prioritaria dentro del área de adaptación al cambio climático, orientada a identificar los efectos en el clima de nuestra Comunidad y poder así planificar medidas concretas de adaptación coste-eficientes- en 2010 se realizó un estudio sobre los Escenarios Regionales Probabilísticos de Cambio Climático en Cantabria, centrado en el régimen termopluviómetrico de la región y su proyección futura a lo largo del siglo XXI.

3. EMISIONES DE GEI EN CANTABRIA

En este epígrafe se analizan las emisiones correspondientes a la comunidad autónoma de Cantabria.

Los datos han sido elaborados a partir de la información presentada en el desglose por comunidades autónomas del Inventario de Emisiones de Gases de Efecto Invernadero de España del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (2017).

En el inventario de gases de efecto invernadero se han considerado las emisiones de los gases que son estrictamente denominados como tal en la legislación actual (Anexo II de la Ley 1/2005, de 9 marzo, por la que se regula el régimen de comercio de derechos de emisión de GEI).

Las emisiones de gases de efecto invernadero en Cantabria suponen en torno al 1,6% del total de las emisiones nacionales, porcentaje que se mantiene prácticamente invariable desde el año base. La evolución de estas emisiones en Cantabria se puede dividir en dos períodos. El primero de ellos desde el año 1990 hasta el 2007, marcado por una tendencia ascendente en las emisiones, llegando a alcanzar el punto más alto en el año 2007, con unas emisiones un 51% por encima del año base (1990). Y un segundo período a partir del 2007, año en el que se observa un cambio de tendencia. Las emisiones de GEI van en descenso hasta situarse en un 18,5 % por encima de las emisiones del año

base en el 2015, último año para el cual existen datos, con un total de 5748 kt C02 eq.

Si hacemos una división de las emisiones totales en emisiones derivadas de actividades ETS (sujetas al comercio de derechos de emisión) y actividades difusas (no sujetas al comercio de derechos de emisión) observamos que las fuentes difusas de gases de efecto invernadero son las principales responsables de las emisiones de GEI en Cantabria en el último año (57% de las emisiones de GEI de la Comunidad), con un total de 3.299,8 kt C02 eq. en el año 2015.

Si analizamos las emisiones sujetas al comercio de derechos de emisión (ETS), en concreto son 21 las instalaciones sujetas al mismo en Cantabria, responsables del 44% de las emisiones de GEI de la Comunidad, con un total de 2.448,2 kt C02 eq.

Los sectores difusos representan aquellos sectores de origen de las emisiones menos intensivos en el uso de la energía. Para realizar un análisis de la evolución de las emisiones de GEI en los sectores difusos se han considerado las siguientes categorías confo

de Ruta 2020 de los sectores difusos: residencial, comercial e institucional, transporte, agrícola y ganadero, residuos, gases fluorados, e Industria no sujeta al comercio de derechos de emisión.

Los sectores planteados en esta estrategia no se ajustan a la división en función de las fuentes de origen de las emisiones que sigue el inventario de emisiones de GEI de Cantabria (2017). Para la determinación de las emisiones correspondientes a cada sector se han realizado las correspondientes transformaciones entre categorías (ver Anexo 1).

En el año 2015, último inventario disponible, el transporte y el sector agrícola y ganadero son los principales responsables abarcando el 39% y el 29% de las emisiones de los sectores difusos, con 1,27 y 0,96 MM t de C02 eq respectivamente. Le siguen en importancia, las emisiones atribuibles al sector industrial no ETS con un 14% sobre el total de las emisiones.

Si observamos la evolución de los sectores difusos en los últimos 10 años se

aprecia una tendencia a la baja en cuanto a emisiones se refiere en todos los sectores, a excepción del sector de gases fluorados, siendo la reducción más significativa, un 65,9%. Sectores como Residuos, Transporte, Agrícola y Residencial han registrado unas reducciones del 21,8%, 8,2%, 7,3% y 4,3% respectivamente.

Los datos del sector gases fluorados rompen esta tendencia, aumentando un 0,9% respecto a las emisiones registradas en 2005. En resumen, las emisiones de los sectores difusos en Cantabria se han reducido en un 25,9% en los últimos 10 años (período 2005-2015).

Es necesario comentar el origen de la reducción tan significativa en el sector Industrial no ETS (65,9%). En su mayor parte, no es debido a reducciones reales, sino a la incorporación a partir de enero de 2013, por cambios normativos, de industrias al régimen de comercio de derechos de emisión, con la incorporación al mismo de la fabricación de carbonato fabricación de aleaciones férreas y no férreas. De esta forma, las emisiones de dichas instalaciones dejan de contabilizarse en el sector Industria no ETS a partir de 2013.

Se muestra en el siguiente gráfico el reparto de emisiones de los sectores ETS y no ETS, siendo significativo el peso del sector transporte (22%) respecto del total de las emisiones directas de GEI en Cantabria, valor similar al total estatal (25%).

Los datos aportados hasta ahora se refieren a las emisiones directas, es decir, las emisiones de GEI generadas en Cantabria.

A pesar de que los objetivos de reducción a nivel estatal se establecen sobre la base de las emisiones directas, en Cantabria tiene especial relevancia considerar las emisiones indirectas derivadas de la generación eléctrica, es decir, las emisiones de la electricidad consumida en Cantabria e importada desde centrales térmicas de otras comunidades autónomas. Esto es así, debido al carácter netamente deficitario de Cantabria en relación a la generación eléctrica.

Por otra parte, muchas de las medidas establecidas en esta Estrategia inciden sobre la reducción del consumo eléctrico, por lo que no tendrán su reflejo en la reducción de las emisiones directas, sino en las emisiones indirectas. Se muestran en la siguiente tabla el balance de energía eléctrica en Cantabria.

Como se puede observar en el gráfico, las emisiones indirectas en Cantabria experimentan un pico en el año 2015 de 936.410 t de C02e, reduciéndose en 2016 hasta las 751.410 t.

Por tanto, las emisiones totales directas+indirectas en Cantabria en el año 2015 fueron 6.684.479 t de C02e.

4. IMPACTOS DEL CAMBIO CLIMÁTICO EN CANTABRIA

Tal y como revelan numerosos estudios que se han llevado a cabo para analizar la magnitud y el impacto del cambio climático a nivel mundial, es ya incuestionable que los cambios en las variables climáticas ocasionados por el aumento de las emisiones de GEIs en el último siglo han generado diversas modificaciones en los sistemas físicos y biológicos, y que continuarán haciéndolo pese a las acciones impulsadas para mitigar las emisiones de estos gases. Por tanto, el Gobierno de Cantabria comparte la opinión de las estrategias y planes dirigidos a luchar contra el cambio climático de incluir mecanismos que permitan también hacer frente, de una forma anticipada y al menor coste posible, a los riesgos inevitables que se producirán como consecuencia del calentamiento global.

Dada la diversidad regional de España, los cambios observados y previstos no son homogéneos para todo el territorio. En el caso de Cantabria, los cambios que se prevén afectarán según las proyecciones a los regímenes de precipitación y temperatura, velocidad del viento y elevación del nivel del mar, siendo estos últimos los de mayor impacto dadas las características orográficas y climáticas de la región.

En el período 1951-1980 la temperatura media anual de Cantabria en su conjunto fue de 12,420C, mientras que en el período 1981-2010 el promedio fue de 12,870C, es decir 0,45oC más cálido. En cuanto a la distribución geográfica de las diferencias, ésta fue muy homogénea al igual que ocurrió con la precipitación.

En el período 1951-1980 la precipitación media anual de Cantabria en su conjunto fue de 1.333 mm, mientras que en el período 1981-2010 el promedio fue de 1.209 mm: un 10% menos.

En 2010, la Universidad de Cantabria elaboró el estudio "Escenarios Regionales Probabilísticos de Cambio Climático en Cantabria» con la financiación de la Consejería de Medio Ambiente y la colaboración de la Agencia Estatal de Meteorología. ('http://www.meteo.unican.es/proiects/escenariosCantabria’)

Las proyecciones obtenidas a partir de una batería de modelos predictivos para el s. XXI en Cantabria para diferentes escenarios (B1, A1B y A2) arrojan las siguientes conclusiones:

Las temperaturas aumentarán una media de 30C al final del siglo (4 ± 20C para el peor escenario, A2). Si se consideran las cuatro grandes zonas climáticas de Cantabria (litoral, centro, Ebro y Liébana) se puede concluir que el incremento de temperaturas será más suave en el litoral y centro que en el Ebro y Liébana, (B1 desarrollo sostenible, A1B equilibrado, A2 intensivo).

con diferencias de entre 1«Cy 20C grados a finales de siglo entre estas zonas. Este gradiente es más acusado en verano, donde los incrementos respecto del litoral pueden alcanzar temperaturas hasta de 40C en el Ebro. En el caso de las temperaturas mínimas, los aumentos son más uniformes en toda la región.

Se confirma una disminución de precipitación en toda la región en la segunda mitad del siglo (en la primera mitad la incertidumbre es mayor que la propia señal). Los cambios podrán llegar a descensos del 20% en la región con máximos de hasta del 40% en el valle de Liébana. Además, el patrón de cambio en la precipitación varía estacionalmente, mientras que al aumentar el horizonte de proyección únicamente cambia de intensidad. Las mayores disminuciones de precipitación se dan en primavera y otoño. En invierno, la disminución de precipitación es menos acusada y más uniforme en toda la región. Como es de esperar, la incertidumbre aumenta con el horizonte de proyección de los escenarios. La mayor incertidumbre se da en verano, aunque esto es esperable ya que es la época de menor precipitación y pequeñas variaciones absolutas dan lugar a grandes cambios en la precipitación relativa.

La clasificación climática obtenida para finales de siglo a partir de las proyecciones regionales con los escenarios A1B y A2 indica una clara tendencia hacia un clima de tipo mediterráneo (Csa), sobre todo en el Oriente de la región, valle de Liébana y Ebro, y climas de transición mediterráneo - oceánico (Csb) que van desplazando progresivamente del litoral al clima Atlántico actual.

vulnerables en Cantabria serán las lagunas, ríos y arroyos de alta montaña, así como bosques caducifolios, tipo hayedos y robledales. El haya, estrictamente atlántica, ve disminuida paulatinamente su área potencial. Por el contrario, la encina, una especie de ámbito mediterráneo, experimenta un fuerte incremento de su área potencial de distribución, ocupando tanto los terrenos litorales, en donde hoy día constituye la vegetación potencial dominante, como las áreas más interiores.

En el caso de los ecosistemas marinos el aumento del nivel del mar, las variaciones en la altura e intensidad del oleaje, así como el ascenso de la temperatura del agua afectarán considerablemente a la región cantábrica. Según el mareógrafo de Santander en un período de 55 años, entre 1945 y 1999, el nivel del mar ha aumentado en 2mm por año.

Este hecho, puede hacer que un 40% de las playas de los municipios del litoral cantábrico, entre las que están incluidas las de su capital, Santander, puedan llegar a desaparecer si no se incrementa la alimentación de la arena artificial de las playas.

El incremento de la temperatura del agua puede llegar a generar cambios en las redes tróficas y variaciones en la distribución de las especies, haciendo incluso que alguna de ellas llegue a desaparecer.

Además de la fauna marina, la terrestre también podría verse amenazada, como es el caso del oso pardo cantábrico y del urogallo, los cuales pueden llegar a extinguirse si la temperatura global se eleva rápidamente y no consiguen adaptarse.

El riesgo de incendios en las zonas montañosas y de meseta, así como los deslizamientos por la inestabilidad de las laderas cantábricas serán otras de las consecuencias que se incrementarán debido a los efectos del cambio climático.

Debido a la «mediterraneización» del clima en Cantabria, se modificarán las aptitudes para los diferentes cultivos. Los resultados obtenidos nos indican que para la vid, las condiciones agroclimáticas en el futuro son más favorables, posibilitando su expansión por la región. Esto es debido a la disminución en las precipitaciones y aumento de la termicidad durante el período vegetativo.

En el caso del Arándano y Lolium sp. la progresiva extensión de los tipos mediterráneos (Marítimos y Templados) que conllevan un aumento del déficit hídrico durante buena parte de los períodos vegetativos; además de la influencia de las temperaturas máximas de la estación cálida, influyen negativamente en las aptitudes, disminuyendo su área óptima.

Para el resto de los cultivos estudiados en general, la tendencia es a disminuir sus áreas óptimas debido al aumento de la frecuencia de períodos secos, especialmente afectará a las forrajeras. Sin embargo, el incremento de la termicidad en la estación cálida afectará positivamente a determinados cultivos: frutales enófilos (manzano, peral...) o termófilos (kiwi, feijoa, algunas especies cítricas,....) y hortícolas (alubia, tomate, pimiento...). Hay que resaltar que el riego favorecería la aptitud óptima y mejoraría los rendimientos tanto en cultivos hortícolas como de frutales

(extraído de «impacto del cambio climático en el territorio de la mancomunidad de municipios sostenibles de Cantabria: resultados aplicables a la gestión del territorio)

El turismo en Cantabria representa el 11% del Producto Interior Bruto (PIB). Dicho sector puede verse perjudicado debido tanto al aumento del nivel del mar en las costas, como al ascenso de las temperaturas en las zonas montañosas que harían que la cobertura de nieve a bajas latitudes fuera menor.

En el ámbito del Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático (PNACC) el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente abordó, a través del Instituto de Hidráulica Ambiental de la Universidad de Cantabria, la evaluación de los posibles impactos del cambio climático sobre algunos de los componentes más significativos de las costas españolas, publicando en 2014 el trabajo titulado «Cambio Climático en la Costa Española»

Se citan a continuación algunas de las conclusiones más destacables:

El aumento del nivel medio del mar en la zona Atlántico-Cantábrica sigue la tendencia media global observada entre 1,5 y 1,9 mm/año entre 1900 y 2010 y de entre 2,8 mm/año y 3,6 mm/año entre 1993 y 2010.

Considerando un escenario tendencial de aumento de nivel del mar a 2040 (aproximadamente 6 cm), las playas de la cornisa cantábrico-atlántica experimentarán retrocesos medios cercanos a los 3 m.

En el Cantábrico se ha observado un aumento significativo de hasta 0,8 cm/año en el oleaje más intenso (percentil 95 de altura de ola significante).

En el Cantábrico, con el escenario tendencial y horizonte 2040, las pérdidas económicas por inundación asociadas a los servicios ambientales prestados por los ecosistemas costeros en ausencia de medidas de adaptación, varían entre el 0,01 y el 0,12 % del PIB provincial del 2008 dependiendo de la provincia. Cantabria, Coruña y Guipúzcoa son, en este orden, las más afectadas tanto ante inundación permanente como ante eventos extremos.

5. OBJETIVOS DE LA ESTRATEGIA

La Estrategia de Acción frente al Cambio Climático de Cantabria se configura como el instrumento fundamental para garantizar el bienestar social y económico de los ciudadanos de de la Comunidad en el futuro, haciéndolo de forma solidaria con el conjunto de España y en el contexto de la comunidad internacional. Gracias a esta Estrategia, el factor cambio climático será introducido en las diferentes políticas sectoriales desarrolladas por la administración regional.

Los objetivos principales de esta estrategia son:

• 1. Mitigar los efectos del cambio climático, mediante la reducción de las emisiones de GEI en Cantabria, de acuerdo con la Hoja de Ruta de una Economía Hipocarbónica en Europa, y los compromisos contraídos en el acuerdo de París (COP23).

  Para ello, Cantabria se corresponsabiliza con la consecución de los objetivos de reducción de España, establecidos en un 10% de las emisiones de GEI de los sectores difusos para 2020 respecto a los niveles de 2005, así como la contribución al objetivo de reducción del 26% de España en el 2030 de las emisiones de GEI de los sectores difusos respecto al año 2005.

  Así mismo, Cantabria se corresponsabiliza en la consecución del objetivo de reducción del 80% de las emisiones de GEI en Europa en el año 2050, mediante el fomento de una economía más respetuosa con el clima y con menor consumo de energía.

• 2. Fomentar la resiliencia de Cantabria al cambio climático, a través del estudio de los impactos y vulnerabilidades, y la adopción de Planes de Adaptación en los diferentes sectores socio-económicos y sistemas naturales expuestos a los efectos del cambio climático.

  La consecución de los objetivos se lleva a cabo a través de actuaciones en los siguientes sectores:

  • • SECTOR RESIDENCIAL, COMERCIAL E INSTITUCIONAL. Incorporar medidas para incrementar la multifuncionalidad, la diversidad y la mezcla de usos urbanos con el fin de incrementar la eficiencia energética, la disminución del consumo de recursos y de gases de efecto invernadero. Asimismo, se pretende fomentar la participación y toma de conciencia ciudadana, en relación con el cambio climático.
  • • SECTOR TRANSPORTE. Reducir las necesidades de movilidad, fomentando las estrategias de proximidad entre usos y actividades y los modos de movilidad no motorizados y el transporte público como vectores principales de la estructura urbana.
  • • SECTOR AGRICOLA Y GANADERO. Proteger las zonas naturales, agrícolas, ecosistemas, y en especial las reservas forestales para preservar e incrementar la capacidad de sumidero de carbono.
  • • SECTOR RESIDUOS. Fomentar el uso eficiente de materiales atendiendo a su ciclo de vida y el fomento de la reducción, la reutilización y el reciclaje de los residuos en los pueblos y ciudades para reducir emisiones de gases de efecto invernadero, de acuerdo con los principios de la Unión Europea sobre Economía Circular.
  • • SECTOR GASES FLUORADOS. Controlar las operaciones realizadas sobre los equipos que utilizan estos gases: sistemas de refrigeración y aire acondicionado, sistemas de extinción de incendios, aerosoles, espumas de aislamiento y equipos eléctricos, disminuyendo las fugas y sustituyendo los gases por otros de menor potencial de calentamiento.
  • • SECTOR INDUSTRIAL NO ETS. Mejorar la eficiencia energética de las instalaciones y reducir el consumo de combustibles en el sector de forma que se reduzcan las emisiones de GEI.
  • • SECTOR TRANSVERSAL. Planificación en materia de cambio climático, incorporación de la variable de cambio climático en la planificación territorial y urbanística. Estudio de los impactos del cambio climático y las vulnerabilidades. Planes de Adaptación al cambio climático. Acciones de difusión, concienciación y formación en materia de cambio climático.

Esta estrategia no fija unos objetivos cuantitativos para Cantabria, sino que fija unos objetivos cualitativos en línea con los de España y Europa. El motivo fundamental es que no existe un reparto de la reducción de emisiones entre las Comunidades Autónomas puesto que los objetivos marcados por la Comisión Europea comprometen al Estado en su conjunto y corresponde a la Administración General del Estado la coordinación de las medidas a establecer por las diferentes

Comunidades Autónomas y otras Administraciones para la consecución de este objetivo ya que muchas medidas exceden el ámbito regional.

6. MEDIDAS

Atendiendo a las dos vertientes del cambio climático, mitigación y adaptación, se propone la siguiente estructura para clasificar las medidas, estructurado en tres niveles. En el nivel superior se sitúan los sectores de actividad, en segundo nivel las líneas de actuación y finalmente en el nivel inferior las medidas directamente aplicables.

El sistema de clasificación de las emisiones de GEI del inventario nacional no coincide en todas las ocasiones con los sectores de actividad. Así, el inventario de emisiones está estructurado en función de las fuentes de origen de éstas. Sin embargo, las medidas aquí planteadas se distribuyen por sectores de actividad para facilitar su puesta en marcha. Por ejemplo, las emisiones derivadas del transporte de piensos se imputan (en el inventario) en las emisiones del grupo transporte pues la fuente directa son las de los vehículos, sin embargo, éstas se derivan de la actividad ganadera por lo que las medidas dirigidas a reducir estas emisiones estarán en el sector de la ganadería y no en el del transporte.

En este nivel se han establecido siete sectores de actividad coincidiendo con los sectores establecidos en la Estrategia Nacional, a los que hay que sumar el que se ha denominado «transversal». Este último sector agrupa medidas que por su carácter horizontal podrían aparecer en todos o varios de los sectores de actividad.

Dentro de los sectores de actividad se han definido cinco grandes líneas de actuación. Se han definido dos tipos de líneas: las que responden a la naturaleza del origen de las emisiones y las que responden a la naturaleza de las medidas. Este segundo tipo engloba las medidas de carácter horizontal como la investigación, formación, y sensibilización.

Las medidas recogidas, independientemente de su clasificación, estarán catalogadas como medidas de mitigación (M) o de adaptación (A).

A continuación se detallan las medidas concretas para cada sector y línea de actuación:

• 1. SECTOR RESIDENCIAL, COMERCIAL, INSTITUCIONAL.

  

  

  

  

  

  

  

  

  

  

  

  

  

  

  

• 2. SECTOR TRANSPORTE

  

  

  

  

• 3. SECTOR AGRICOLA Y GANADERO/PESQUERO

  

  

  

  

  

• 4- SECTOR RESIDUOS

  

  

  

• 5.- GASES FLUORADOS

  

  

• 6. SECTOR INDUSTRIAL NO SUJETO AL COMERCIO DE DERECHOS DE EMISIÓN

  

• 7. SECTOR TRANSVERSAL

  

  

  

  

  

  

  

  

7. PRESUPUESTO

Las medidas de mitigación y adaptación recogidas en la presente estrategia suponen una inversión total de 44.992.162 euros para el período 2018-2030.

No se debe considerar un presupuesto cerrado, sino una valoración de las medidas propuestas en el momento de redacción de este documento, medidas que podrán ser ampliadas o modificadas en el período, en función del seguimiento que se haga de su implantación y efectividad.

En algunos casos, las diferentes Direcciones Generales sólo han podido comprometer un gasto para un año concreto (2017 o 2018 generalmente). En otros casos, se ha podido fijar un presupuesto anual. En esta segunda situación, se ha considerado la continuidad de este presupuesto anual hasta cinco años, ya que podrían sufrir modificaciones en el futuro (tanto las medidas en sí, como su partida presupuestaria).

Teniendo en cuenta las anteriores consideraciones, se desglosan a continuación los importes presupuestados por capítulos (algunos capítulos tienen presupuesto cero por ejecutarse las medidas con medios propios):

8. PLAN DE SEGUIMIENTO

La Estrategia de Acción frente al Cambio Climático de Cantabria tiene un horizonte 2018-2030, pero teniendo en cuenta los objetivos que persigue y el número de medidas definidas para su consecución, se hace indispensable establecer un sistema de seguimiento ágil que permita comprobar cada dos años el grado de avance en la ejecución de los objetivos perseguidos en cada sector, así como incorporar nuevas medidas en línea con los objetivos de la estrategia. De esta forma, periódicamente se dispondrá de información suficiente sobre el avance de la Estrategia de forma que permita la toma de decisiones que ayuden al cumplimiento de los objetivos fijados para 2020 y 2030.

El seguimiento bienal de esta estrategia permite revisar de manera regular la estructura y el contenido contemplados en este documento para adaptarlo al avance normativo, técnico y científico, a la evolución de las medidas emprendidas por otros agentes y a las conclusiones de la evaluación y seguimiento de la propia Estrategia.

El órgano de seguimiento y gestión de la Estrategia es la Comisión Interdepartamental sobre el Cambio Climático, cuyas funciones son:

• 1. El estudio y valoración de todo tipo de propuestas (incluidas las de naturaleza normativa), medidas y actuaciones a desarrollar en la Comunidad Autónoma de Cantabria que Directa o indirectamente tengan por objeto prevenir y reducir los efectos nocivos de las emisiones de gases de efecto invernadero.
• 2. El seguimiento de la aplicación y/o ejecución de las propuestas, medidas y actuaciones indicadas en el apartado anterior.
• 3. El asesoramiento en materia de cambio climático.
• 4. La coordinación de las funciones y actuaciones del Gobierno de la Comunidad Autónoma en materia de cambio climático, haciendo especial mención a aquellos aspectos transversales entre los diferentes departamentos de la Administración de la Comunidad Autónoma de Cantabria.
• 5. Elaboración, aplicación y seguimiento de una estrategia de lucha contra el cambio climático en Cantabria.

La composición de este órgano abarca representantes de prácticamente todas las consejerías del Gobierno de Cantabria y está apoyado técnicamente por la Ponencia Técnica sobre el Cambio Climático.

La Dirección General de Medio Ambiente del Gobierno de Cantabria impulsará y coordinará las labores de seguimiento y actualización de la Estrategia.

Para realizar un correcto seguimiento de la Estrategia, anualmente, las Consejerías del Gobierno de Cantabria implicadas en la Estrategia, a través de sus respectivas Direcciones Generales, elaborarán un informe en el que se detallará el avance de las medidas de las que son responsables. A partir de la información sectorial aportada por

las distintas Consejerías y presentada en las reuniones de la Comisión Interdepartamental sobre el Cambio Climático, los inventarios anuales de emisiones de GEI de Cantabria y los resultados del sistema de seguimiento de la Estrategia, la Dirección General de Medio Ambiente elaborará cada dos años un informe que evaluará el grado de cumplimiento de la Estrategia.

En este sentido, en la presente estrategia se incluye un sistema de indicadores, destinado a evaluar el grado de implementación de las medidas de lucha frente al Cambio Climático, sus condicionantes, y sus resultados

La propuesta de indicadores no es una propuesta cerrada, sino que permite la incorporación de nuevos indicadores que puedan ser relevantes o el descarte de otros por dificultades en su cálculo o evaluación, o la pérdida de representatividad de los mismos.

9. REFERENCIAS

• • Estrategia Cántabra de Acción frente al Cambio Climático, formulada para el período 2008-2012. Consejería de Medio Ambiente, Gobierno de Cantabria.
• • Estrategia Española de Cambio Climático y Energía Limpia 2007-2012-2020. MAPAMA.
• • Plan de Acción de Ahorro y Eficiencia Energética 2008-2012. MAPAMA
• • Hoja de Ruta para los sectores difusos a 2020, MAPAMA.
• • Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático MAPAMA
• • Inventario Nacional de GEI desagregado por CCAA 2017 (Serie 1990-2015).MAPAMA
• • Gutiérrez J.M. et. al., Escenarios Regionales Probabilísticos de Cambio Climático en Cantabria, Instituto de Física de Cantabria, con la financiación de la Consejería de Medio Ambiente y la colaboración de la Agencia Estatal de Meteorología, 2010.
• • Alonso del Val, F. Javier, et. al., Impacto del cambio climático en el territorio de la mancomunidad de municipios sostenibles de Cantabria, 2012. http://aeclim.ora/wp-content/uploads/2016/02/0068 PU-SA-VIII-2012-FJ ALONSO.pdf
• • Losada, I. et.al. Cambio Climático en la Costa Española, MAPAMA/ Instituto de Hidráulica de Cantabria (IH) 2014 http://www.mapama.gob.es/es/cambio-climatico/temas/impactos-vulnerabilidad-v-adaptacion/2014 INFORME C3E final tcm7-352338.pdf

ANEXO 1:
CÁLCULO DE EMISIONES DE GEI EN CANTABRIA POR SECTORES

Como se mencionó en el capítulo 3, los sectores planteados en esta estrategia no se ajustan a la división en función de las fuentes de origen de las emisiones que sigue el inventario de emisiones de GEI de Cantabria (2017), para ello se han realizado los cálculos explicados a continuación.

Se ha partido de los datos del inventario nacional de GEI del año 2017 que abarca el período 1990-2015, regionalizado por comunidades autónomas. Este inventario clasifica las emisiones en categorías CRF (Common Reporting Format), formulario común para informes según lo previsto por la Convención Marco de NNUU sobre Cambio Climático (UNFCCC, en sus siglas en inglés) y su Protocolo de Kioto, así como por el Reglamento 525/2013 de la UE de notificación de emisiones de gases de efecto invernadero.

Las categorías CRF son las siguientes:

Por otra parte, el Sistema Español de Inventario (SEI) realiza el inventario de contaminantes atmosféricos regionalizado. El Inventario de contaminantes atmosféricos recopila la información relativa a las emisiones de NOx, SOx, NH3, COVNM, partículas, metales pesados y otros contaminantes atmosféricos según lo previsto por el Convenio de Contaminación Atmosférica Transfronteriza a Larga Distancia (CLRTAP) y la Directiva UE/2016/2284 de Techos Nacionales de Emisión.

Se realiza una clasificación de emisiones según categorías SNAP (acrónimo derivado del inglés Selected Nomenclature for Air Pollution). Se muestra a continuación la estructura (simplificada debido a su extensión) de dicho inventario:

Para el cálculo de las emisiones de los sectores establecidos en esta Estrategia, se trabajado con los dos inventarios (categorías CRF y SNAP), según lo establecido en la siguiente tabla:

ANEXO 2
: PARTICIPANTES EN LA ELABORACIÓN DE ESTA ESTRATEGIA

• • Desde el Servicio de Prevención y Control de la Contaminación han intervenido en la elaboración y revisión de contenidos:

  José A. Fernández Ferreras, Berta González Arreba, Susana Alonso Lanza Sergio Castro González, Ma Paz Gil Duran, Mónica Valdor Muñoz.

1) PROCESO DE PARTICIPACION INTERNA

2) PROCESO DE PARTICIPACIÓN EXTERNA

• - Universidades e Investigación, reunión celebrada el 27 de junio de 2017, con los siguientes participantes convocados (se somete a revisión el 3o borrador):
  • - Agencia Estatal de Meteorología.
  • - Instituto deFísicadeCantabria.
  • - Instituto Español de Oceanografía.
  • - Instituto de Hidráulica de Cantabria.
  • - Departamento de Geografía, Urbanismo Y O. del Territorio UNICAN.
  • - Centro de Investigación y Formación Agraria de Cantabria.
  • - Departamento de Ingenierías Química y Biomolecular UNICAN.

  Las aportaciones de este grupo conforman el 4o borrador de Estrategia.

• - Mesas de participación en la Cámara de Cantabria los días 16 de noviembre de 2017 para las organizaciones públicas, y el 23 de noviembre de 2017 para las organizaciones privadas. Los participantes fueron los siguientes:

  Mesa del 16de noviembre

  • - Universidad de Cantabria
  • - Mancomunidad Miengo Polanco
  • - Ayuntamiento de Limpias
  • - Colegio de Veterinarios de Cantabria
  • - Instituto Nacional de la Seguridad Social
  • - Asociación Cántabra de Empresarios de la madera y del comercio del mueble
  • - Gobierno de Cantabria
  • - MARE Cantabria
  • - Bosques de Cantabria
  • - Instituto Español de Oceanografía
  • - Plataforma de Edificación Passive-Haus
  • - ONG Ecologistas en Acción
  • - Cimas Consultaría
  • - Besarte Fibra natural
  • - Cámara de Comercio de Cantabria
  • - Otros asistentes en calidad de autónomos, asociaciones de vecinos, etc. Mesa del 23 de noviembre
  • - Bosques Sostenibles
  • - Investalga AHTI SL
  • - Universidad de Cantabria
  • - Besarte Fibra Natural
  • - Hospital Santa Clotilde
  • - Evobus Ibérica SAU
  • - CIMAS Innovación y Medio Ambiente
  • - Gobierno de Cantabria
  • - Birla Carbón Spain
  • - Direct English
  • - Turybike-Ecove
  • - Pangea Proyectos
  • - Cabeza y Barreda Consultores
  • - Environy
  • - Cámara de Comercio de Cantabria
  • - Otros asistentes en calidad de autónomos y particulares
• - Proceso participativo realizado por el CIMA, con las siguientes actuaciones: Entrevistas personales con los siguientes participantes convocados:
  • - Federación de Municipios de Cantabria
  • - Red Local de Sostenibilidad de Cantabria
  • - Red Cántabra de Desarrollo Rural
  • - Ayuntamiento de Santander
  • - Ayuntamiento de Torrelavega

  (Ayto. de Camargo y Astillero y la Mancomunidad de Municipios Sostenibles, no se pudo concertar entrevista)

  • Sondeo realizado a los siguientes Ayuntamientos:

    Ayuntamiento de Comillas Sondeo

    Ayuntamiento de Hazas de Cesto Sondeo

    Ayuntamiento de Reocín Sondeo

    Ayuntamiento de Rionansa Sondeo

    Ayuntamiento de Rúente Sondeo y mesa redonda

    Ayuntamiento de San Miguel de Aguayo Sondeo

    Ayuntamiento de Santa María de Cayón Sondeo y mesa redonda

    Ayuntamiento de Santander Sondeo y entrevista

    Ayuntamiento de Villacarriedo Sondeo

    Ayuntamiento de San Vicente de la Barquera Mesa redonda

    Ayuntamiento de Ampuero Mesa redonda

    Ayuntamiento de Camargo Mesa redonda

    Federación de Municipios de Cantabria Entrevista

    Red Local de Sostenibilidad de Cantabria Entrevista y mesa redonda

    Red Cántabra de Desarrollo Rural Entrevista y mesa redonda

  • Participación de ONGs (entrevistas’)

    Ecologistas en Acción SEO/ Birdlife

    Fundación Naturaleza y Hombre Carlos Sánchez Asociación Cultural Bosques de Cantabria Red de Semillas de Cantabria Asociación Costa Quebrada

  • Asociación Centinelas
  • Mesa redonda multisectorial. celebrada en las instalaciones del CIMA el 24 de octubre de 2017:

    Secretaría de la Red Local de Sostenibilidad de Cantabria

    Servicio de Prevención y Control de la Contaminación de la

    Dirección General de Medio Ambiente

    Centro de Investigación del Medio Ambiente

    Técnico participación

    Concejal de Obras y Servicios

    Medio Rural y Medio Ambiente del Ayuntamiento de San Vicente de la Barquera

    Técnico del Ayuntamiento de Santa María de Cayón Arquitecto del Ayuntamiento de Rúente Técnico de medio ambiente del Ayuntamiento de Camargo Alcalde del Ayuntamiento de Ampuero

    Director Técnico de la Oficia Técnica de Desarrollo Rural de la Red

    Cántabra de Desarrollo Rural

    Técnico de la Red Cántabra de Desarrollo Rural

    Ecologistas en Acción

    Surf & Nature Alliance

    Fundación Naturaleza y Hombre

    Fundación Naturaleza y Hombre

    Asociación Rutas Turísticas 4x4

    SEO/Birdlife

    Asociación Cultural Bosques de Cantabria

• - Jornada de participación empresarial en la CEOE desarrollada el 19 de octubre de 2017, con los siguientes participantes:

  Soningeo

  Solvay Química S.A.

  Ferroatlántica S.A.

  Sain Gobain S.A.

  Ferroatlántica S.A.

  Equipos Nucleares S.A.

  Textil Santanderina S.A.

  D.G. de MedioAmbiente

• - Jornada CCOO "Estrategia de acción frente al cambio climático de Cantabria", 29 de noviembre de 2017.
• - UGT, dentro del proyecto «Los trabajadores ante el cambio climático: Retos y acciones» ha difundido el borrador entre sus afiliados, y campañas de sensibilización con la elaboración de 2 tríptico sobre cambio climático y realización de talleres de difusión de la Estrategia.