Ley 14/2010, de 27 de mayo, de los derechos y las oportunidades en la infancia y la adolescencia

Art韈ulo 98 Competencia en materia de desamparo

La Administraci髇 de la Generalidad ejerce la protecci髇 sobre los ni駉s y los adolescentes desamparados mediante el departamento que tiene atribuida esta competencia.

Art韈ulo 99 Competencia en materia de riesgo

La Administraci髇 local debe intervenir si detecta una situaci髇 de riesgo de un ni駉 o adolescente que se encuentra en su territorio; debe adoptar las medidas adecuadas para actuar contra esta situaci髇, de conformidad con la regulaci髇 establecida por la presente ley, con la normativa de la Generalidad que la desarrolla y con la legislaci髇 en materia de servicios sociales.

Art韈ulo 100 Deber de comunicaci髇, intervenci髇 y denuncia

1. Los ciudadanos que tienen conocimiento de la situaci髇 de riesgo o desamparo en la que se encuentra un ni駉 o adolescente tienen el deber de comunicarlo a los servicios sociales b醩icos, especializados o del departamento competente en materia de protecci髇 de los ni駉s y los adolescentes, lo antes posible, para que tengan conocimiento de ello.

2. La Administraci髇 debe garantizar la confidencialidad de la identidad de la persona que lleva a cabo la comunicaci髇 a la que se refiere el apartado 1.

3. Todos los profesionales, especialmente los profesionales de la salud, de los servicios sociales y de la educaci髇, deben intervenir obligatoriamente cuando tengan conocimiento de la situaci髇 de riesgo o de desamparo en la que se encuentra un ni駉 o adolescente, de acuerdo con los protocolos espec韋icos y en colaboraci髇 y coordinaci髇 con el 髍gano de la Generalidad competente en materia de protecci髇 de los ni駉s y los adolescentes. Esta obligaci髇 incluye la de facilitar la informaci髇 y la documentaci髇 que sean necesarias para valorar la situaci髇 del ni駉 o el adolescente.

V閍se Acuerdo GOV/135/2024, 14 mayo, por el que se aprueba el Protocolo de actuaci髇 ante cualquier tipo de violencia en el 醡bito educativo (獶.O.G.C.� 16 mayo).LE0000916704_20240605

4. Los contratos que las administraciones p鷅licas catalanas suscriban con las personas o entidades privadas que prestan servicios en los 醡bitos profesionales relacionados en el apartado 3 deben recoger expresamente las obligaciones de intervenci髇.

5. Las obligaciones a las que se refiere este art韈ulo se entienden sin perjuicio del deber de comunicaci髇 o denuncia de los hechos a los cuerpos y las fuerzas de seguridad, al Ministerio Fiscal o a la autoridad judicial.

Art韈ulo 101 Expediente de el ni駉 y el adolescente

1. Los servicios sociales b醩icos y los servicios sociales especializados de atenci髇 a la infancia deben informar al 髍gano competente en materia de protecci髇 de los ni駉s y los adolescentes de las situaciones de riesgo o desamparo que conozcan mediante el sistema de informaci髇 y gesti髇 en infancia y adolescencia. El 髍gano debe incorporar esta informaci髇 al expediente 鷑ico del ni駉 o adolescente.

2. El expediente 鷑ico del ni駉 o adolescente al que se refiere el apartado 1 puede tener, seg鷑 los tipos de procedimiento o de actuaci髇 tramitada, las siguientes piezas:

• a) Informativa.
• b) De riesgo.
• c) De desamparo.
• d) De tutela.
• e) De guarda.
• f) Asistencial.

3. El expediente del ni駉 o adolescente debe permanecer abierto hasta que finalice la actuaci髇 protectora o hasta la mayor韆 de edad, a excepci髇, en este 鷏timo caso, de los expedientes asistenciales.

4. Cualquier persona que, prestando o no servicios en el departamento competente de la Administraci髇 de la Generalidad, la Administraci髇 local o las instituciones colaboradoras, intervenga en los expedientes de los ni駉s o los adolescentes est� obligada a guardar secreto de la informaci髇 que obtenga de los mismos.

Art韈ulo 102 Definici髇 y concepto

1. A los efectos de lo establecido por la presente ley, se entiende por situaci髇 de riesgo la situaci髇 en la que el desarrollo y el bienestar del ni駉 o el adolescente se ven limitados o perjudicados por cualquier circunstancia personal, social o familiar, siempre y cuando para la protecci髇 efectiva del ni駉 o el adolescente no sea necesaria la separaci髇 del n鷆leo familiar.

2. Son situaciones de riesgo:

• a) La falta de atenci髇 f韘ica o ps韖uica del ni駉 o el adolescente por parte de los progenitores, o por los titulares de la tutela o de la guarda, que comporte un perjuicio leve para la salud f韘ica o emocional del ni駉 o el adolescente.
• b) La dificultad grave para dispensar la atenci髇 f韘ica y ps韖uica adecuada al ni駉 o al adolescente por parte de los progenitores o de los titulares de la tutela o de la guarda.
• c) La utilizaci髇, por parte de los progenitores o por los titulares de la tutela o de la guarda, del castigo f韘ico o emocional sobre el ni駉 o el adolescente que, sin constituir un episodio grave o un patr髇 cr髇ico de violencia, perjudique su desarrollo.
• d) Las carencias que, por no poder ser adecuadamente compensadas en el 醡bito familiar, ni impulsadas desde este mismo 醡bito para su tratamiento mediante los servicios y recursos normalizados, puedan producir la marginaci髇, la inadaptaci髇 o el desamparo del ni駉 o el adolescente.
• e) La falta de escolarizaci髇 en edad obligatoria, el absentismo y el abandono escolar.
• f) El conflicto abierto y cr髇ico entre los progenitores, separados o no, cuando anteponen sus necesidades a las del ni駉 o el adolescente.
• g) La incapacidad o la imposibilidad de los progenitores o los titulares de la tutela o de la guarda de controlar la conducta del ni駉 o el adolescente que provoque un peligro evidente de hacerse da駉 o de perjudicar a terceras personas.
• h) Las pr醕ticas discriminatorias, por parte de los progenitores o titulares de la tutela o de la guarda, contra las ni馻s o las j髒enes, que conlleven un perjuicio para su bienestar y su salud mental y f韘ica, incluyendo el riesgo de sufrir la ablaci髇 o la mutilaci髇 genital femenina y la violencia ejercida contra ellas.
• i) Cualquier otra circunstancia que, en caso de persistir, pueda evolucionar y derivar en el desamparo del ni駉 o el adolescente.

Art韈ulo 103 Intervenci髇 de los servicios sociales

1. Los servicios sociales b醩icos deben valorar la existencia de una situaci髇 de riesgo y promover, si procede, las medidas y los recursos de atenci髇 social y educativa que permitan disminuir o eliminar la situaci髇 de riesgo buscando la colaboraci髇 de los progenitores o de los titulares de la tutela o de la guarda.

2. Los servicios sociales b醩icos deben designar a un profesional o una profesional de referencia, para cada caso, del ni駉 o el adolescente, al que corresponde evaluar su situaci髇 y realizar el posterior seguimiento.

3. Si el riesgo es grave y con la intervenci髇 de los servicios sociales b醩icos no se consigue disminuir o controlar la situaci髇 de riesgo, estos servicios deben elevar el informe con la valoraci髇 de la situaci髇 de riesgo que persiste en el ni駉 o el adolescente, el resultado de la intervenci髇 y la propuesta de medidas que consideren oportunas a los servicios sociales especializados en infancia y adolescencia.

4. Los servicios sociales especializados de atenci髇 a los ni駉s y a los adolescentes, atendiendo el informe y las medidas de atenci髇 propuestas, deben completar el estudio y elaborar un compromiso socioeducativo dirigido a los progenitores o a los titulares de la tutela y orientado a la superaci髇 del riesgo que rodea al ni駉 o al adolescente, que debe contener la descripci髇 y la acreditaci髇 de la situaci髇 de riesgo, su evaluaci髇 y la concreci髇 de las medidas que se aplicar醤 desde los servicios sociales b醩icos o desde otros servicios especializados para la superaci髇 de la situaci髇 perjudicial.

5. Antes de firmar el compromiso socioeducativo con los progenitores o, en su caso, con los titulares de la tutela o de la guarda, debe haberse escuchado al adolescente, en cualquier caso, y al ni駉, si tiene suficiente conocimiento.

6. Si no se obtiene la colaboraci髇 de los progenitores, de los titulares de la tutela o de la guarda, o si se niegan a participar en la ejecuci髇 de las medidas acordadas y ello comporta un peligro para el desarrollo o bienestar personal del ni駉 o el adolescente, o si en el transcurso de la intervenci髇 se da cualquier otra situaci髇 de desamparo, los servicios especializados de atenci髇 a los ni駉s y a los adolescentes deben elaborar el informe propuesta y elevarlo al departamento competente para que incoe el correspondiente procedimiento de desamparo.

Art韈ulo 104 Medidas de atenci髇 social y educativa ante las situaciones de riesgo

Las medidas que pueden establecerse una vez valorada la situaci髇 de riesgo son las siguientes:

• a) La orientaci髇, el asesoramiento y la ayuda a la familia. La ayuda a la familia incluye las actuaciones de contenido t閏nico, econ髆ico o material dirigidas a mejorar el entorno familiar y a hacer posible la permanencia del ni駉 o el adolescente en el mismo.
• b) La intervenci髇 familiar mediante el establecimiento de programas socioeducativos para los progenitores, tutores o guardadores con la finalidad de que alcancen capacidades y estrategias alternativas para el cuidado y la educaci髇 de sus hijos o del ni駉 o el adolescente tutelado.
• c) El acompa馻miento del ni駉 o el adolescente a los centros educativos o a otras actividades, y el apoyo psicol骻ico o las ayudas al estudio.
• d) La ayuda a domicilio.
• e) La atenci髇 en centro abierto y otros servicios socioeducativos.
• f) La atenci髇 sanitaria, que incluya la intervenci髇 psicoterap閡tica o el tratamiento familiar, tanto para los progenitores o los titulares de la tutela o de la guarda, como para el ni駉 o el adolescente.
• g) Los programas formativos para adolescentes que han abandonado el sistema escolar.
• h) La asistencia personal para los progenitores, tutores y guardadores con diversidad funcional que les permita asumir sus obligaciones de atenci髇 y cuidado de los ni駉s y los adolescentes.
• i) La asistencia personal para los ni駉s y los adolescentes con diversidad funcional que les permita superar la situaci髇 de riesgo.
• j) Cualquiera otra medida de car醕ter social y educativo que contribuya a la desaparici髇 de la situaci髇 de riesgo.

Art韈ulo 105 Concepto

1. Se consideran desamparados los ni駉s o los adolescentes que se encuentran en una situaci髇 de hecho en la que les faltan los elementos b醩icos para el desarrollo integral de la personalidad, siempre que para su protecci髇 efectiva sea necesario aplicar una medida que implique la separaci髇 del n鷆leo familiar.

2. Son situaciones de desamparo:

• a) El abandono.
• b) Los maltratos f韘icos o ps韖uicos, los abusos sexuales, la explotaci髇 u otras situaciones de la misma naturaleza efectuadas por las personas a las que corresponde la guarda o que se han llevado a cabo con el conocimiento y la tolerancia de esas personas.
• c) Los perjuicios graves al reci閚 nacido causados por maltrato prenatal. A tales efectos, se entiende por maltrato prenatal la falta de cuidado del propio cuerpo, consciente o inconsciente, o la ingesti髇 de drogas o sustancias psicotr髉icas por parte de la mujer durante el proceso de gestaci髇, as� como el producido indirectamente al reci閚 nacido por parte de la persona que maltrata a la mujer en proceso de gestaci髇.
• d) El ejercicio inadecuado de las funciones de guarda que comporte un peligro grave para el ni駉 o el adolescente.
• e) El trastorno o la alteraci髇 ps韖uica o la drogodependencia de los progenitores, o de los titulares de la tutela o de la guarda, que repercuta gravemente en el desarrollo del ni駉 o el adolescente.
• f) El suministro al ni駉 o al adolescente de drogas, estupefacientes o cualquier otra sustancia psicotr髉ica o t髕ica realizado por las personas a las que corresponde la guarda o por otras personas con su conocimiento y tolerancia.
• g) La inducci髇 a la mendicidad, a la delincuencia o a la prostituci髇 por parte de las personas encargadas de la guarda, o el ejercicio de estas actividades llevado a cabo con su consentimiento o tolerancia, as� como cualquier forma de explotaci髇 econ髆ica.
• h) La desatenci髇 f韘ica, ps韖uica o emocional grave o cronificada.
• i) La violencia machista o la existencia de circunstancias en el entorno sociofamiliar del ni駉 o el adolescente, cuando perjudiquen gravemente su desarrollo.
• j) La obstaculizaci髇 por los progenitores o los titulares de la tutela o de la guarda de las actuaciones de investigaci髇 o comprobaci髇, o su falta de colaboraci髇, cuando este comportamiento ponga en peligro la seguridad del ni駉 o el adolescente, as� como la negativa de los progenitores o los titulares de la tutela o de la guarda a participar en la ejecuci髇 de las medidas adoptadas en situaciones de riesgo si ello conlleva la persistencia, la cronificaci髇 o el agravamiento de estas situaciones.
• k) Las situaciones de riesgo que por su n鷐ero, evoluci髇, persistencia o agravamiento determinen la privaci髇 al ni駉 o al adolescente de los elementos b醩icos para el desarrollo integral de la personalidad.
• l) Cualquier otra situaci髇 de desatenci髇 o negligencia que atente contra la integridad f韘ica o ps韖uica del ni駉 o el adolescente, o la existencia objetiva de otros factores que imposibiliten su desarrollo integral.

Art韈ulo 106 Procedimiento de desamparo

1. En el momento en que se tiene conocimiento de que uno ni駉 o adolescente puede encontrarse en situaci髇 de desamparo, el departamento competente en materia de protecci髇 de los menores desamparados debe incoar el expediente de desamparo. Antes del acuerdo de iniciaci髇, el 髍gano competente puede abrir un per韔do de informaci髇 previa con el fin de conocer las circunstancias del caso concreto y la conveniencia o no de iniciar el procedimiento.

2. La incoaci髇 debe notificarse a los progenitores o a los titulares de la tutela o de la guarda del ni駉 o el adolescente, y se les debe informar del derecho que tienen de comparecer en el procedimiento, aportar informes u otros elementos de prueba, o efectuar las alegaciones que consideren procedentes.

3. Para la resoluci髇 del procedimiento los equipos t閏nicos competentes deben evacuar un informe con car醕ter preceptivo. A tales efectos, tienen el car醕ter de equipos t閏nicos los servicios especializados de atenci髇 a los ni駉s y a los adolescentes, y los otros que se determinen reglamentariamente.

4. Los equipos t閏nicos, en su intervenci髇 durante el proceso de estudio y evaluaci髇, deben escuchar al adolescente, y al ni駉 si tiene suficiente conocimiento, as� como a las personas que tengan la potestad parental, tutelar o la guarda, siempre que sea posible. A tales efectos, los progenitores o los titulares de la tutela o de la guarda est醤 obligados a comparecer en la sede administrativa en la que se les convoque.

5. Una vez se haya elaborado el informe propuesta por parte de los equipos t閏nicos y se hayan practicado el resto de actuaciones acordadas, en su caso, de oficio o a instancia de parte, debe darse audiencia y vista del expediente en un plazo de diez d韆s a los progenitores, o a los titulares de la tutela o de la guarda, teniendo mucho cuidado de que no accedan a documentos o a datos que afecten a la intimidad de las personas o sean reservados o confidenciales.

6. El procedimiento finaliza por resoluci髇 motivada que declara la situaci髇 de desamparo o, en caso contrario, ordena el archivo del expediente. La Administraci髇 tiene la obligaci髇 de dictar la resoluci髇 en el plazo de un a駉 a contar desde la incoaci髇 del expediente. Transcurrido este plazo sin que se haya dictado la resoluci髇, el procedimiento se entiende caducado, sin perjuicio de su nueva incoaci髇, si procede. En caso de que, a pesar de no ser procedente la declaraci髇 de desamparo, se constate una situaci髇 de riesgo, el expediente debe derivarse a los servicios sociales especializados o a los servicios sociales b醩icos para que procedan de acuerdo con lo previsto para las situaciones de riesgo.

Art韈ulo 107 Procedimiento simplificado

El organismo competente en materia de protecci髇 de los ni駉s o los adolescentes desamparados puede dictar, sin m醩 tr醡ites, la resoluci髇 que declara la situaci髇 de desamparo, si los progenitores o los titulares de la tutela o de la guarda manifiestan la conformidad con la declaraci髇, y una vez escuchado el adolescente, o el ni駉, si tiene suficiente conocimiento.

Art韈ulo 108 Notificaci髇

1. Las resoluciones que declaran el desamparo deben ser comunicadas al Ministerio Fiscal en el plazo de dos d韆s y notificadas a los progenitores, a los titulares de la tutela o de la guarda y al adolescente.

2. La notificaci髇 a la que se refiere el apartado 1 debe informar de los efectos de la resoluci髇, de la posibilidad de impugnaci髇 y de los plazos para hacerlo, as� como de los requisitos y los tr醡ites que deben cumplirse para el reconocimiento del derecho a la asistencia jur韉ica gratuita.

Art韈ulo 109 Efectos de la declaraci髇 de desamparo

1. La resoluci髇 de declaraci髇 de desamparo comporta la asunci髇 inmediata de las funciones tutelares sobre el ni駉 o el adolescente, mientras no se constituya la tutela por las reglas ordinarias o el ni駉 o el adolescente no sea adoptado, no sea reintegrado a quien tenga su potestad o su tutela, no se emancipe o no llegue a la mayor韆 de edad.

2. La asunci髇 de las funciones tutelares implica, mientras sea vigente, la suspensi髇 de la potestad parental o de la tutela ordinaria y de los derechos derivados, siempre que esta asunci髇 de funciones tutelares no quede sin efecto por resoluci髇 administrativa o resoluci髇 dictada en el correspondiente procedimiento judicial civil.

3. El organismo competente puede pedir, si procede, la privaci髇 de la potestad parental, la remoci髇 de la tutela y reclamar alimentos o ejercer las acciones administrativas o judiciales que sean procedentes en beneficio del ni駉 o el adolescente.

4. La suspensi髇 o la privaci髇 no afectan a la obligaci髇 de los progenitores u otros parientes de hacer todo lo necesario para asistir a los ni駉s o a los adolescentes ni la obligaci髇 de prestarles alimentos en el sentido m醩 amplio.

5. La resoluci髇 de desamparo debe determinar la obligaci髇 de los progenitores u otros parientes de contribuir al pago de los servicios utilizados por el ni駉 o el adolescente.

6. La resoluci髇 de desamparo definitiva conlleva la obligaci髇, por parte del organismo de protecci髇 del ni駉 y el adolescente, de promover la tramitaci髇 inmediata de la documentaci髇 personal del menor o la menor, en caso de que este no disponga de la misma previamente.

Art韈ulo 110 Medidas cautelares

1. El 髍gano competente de la Generalidad en materia de protecci髇 de los ni駉s y los adolescentes, los servicios sociales especializados y los servicios sociales b醩icos tienen la obligaci髇 de prestar la atenci髇 inmediata que necesite cualquier ni駉 o adolescente, en funci髇 de su competencia.

2. Cuando los ni駉s y adolescentes inmigrados no acompa馻dos no puedan acreditar documentalmente la minor韆 de edad o existan dudas sobre la veracidad de la documentaci髇 aportada, el departamento competente en materia de protecci髇 de los ni駉s y los adolescentes debe ofrecerles la atenci髇 inmediata que necesiten mientras se realizan las gestiones y los tr醡ites establecidos por la legislaci髇 sobre estranger韆 para determinar su edad.

3. Cuando exista una situaci髇 de peligro para el ni駉 o el adolescente, o concurra cualquiera otra causa que exija una intervenci髇 urgente y que haga necesaria la separaci髇 del n鷆leo familiar, el organismo competente debe declarar preventivamente el desamparo mediante resoluci髇 motivada y debe aplicar las medidas que sean necesarias, con las notificaciones establecidas por el art韈ulo 108. Simult醤eamente, en caso de no haberlo hecho antes, debe iniciar el procedimiento de desamparo, que debe seguir sus tr醡ites hasta la resoluci髇 definitiva que ratifique, modifique o deje sin efecto la resoluci髇 de desamparo y las medidas provisionalmente acordadas.

4. La declaraci髇 preventiva de desamparo antes del nacimiento es procedente cuando se prev� claramente la situaci髇 de desamparo del futuro reci閚 nacido. En el supuesto de maltrato prenatal, el 髍gano competente en materia de protecci髇 de los ni駉s y los adolescentes puede pedir a la autoridad judicial las medidas necesarias en relaci髇 con la madre para hacer efectiva la futura protecci髇 del reci閚 nacido.

5. Previamente a la declaraci髇 preventiva de desamparo y a la adopci髇 de medidas urgentes, siempre que la situaci髇 lo permita, debe escucharse al adolescente, y al ni駉, si tiene suficiente conocimiento, as� como a los progenitores o a los titulares de la tutela o de la guarda.

Art韈ulo 111 Atenci髇 inmediata y transitoria en familias acogedoras de urgencia o en centros de acogimiento

1. Las familias acogedoras de urgencia o los centros de acogimiento, si procede, deben ejercer la atenci髇 inmediata y transitoria de los ni駉s y los adolescentes desamparados, mientras se analiza la problem醫ica y se determina, en su caso, la medida de protecci髇 m醩 adecuada. El estudio de la problem醫ica del ni駉 y la propuesta de medida protectora deben llevarse a cabo en el plazo que se establezca reglamentariamente, que como m醲imo debe ser de seis meses.

2. En los centros de acogimiento deben crearse unidades de primera estancia para acoger inicialmente, en el per韔do de adaptaci髇 al sistema, a los ni駉s y adolescentes desamparados.

Art韈ulo 112 Auxilio judicial y policial

1. Si por la oposici髇 de los progenitores, o de los titulares de la tutela o de la guarda, o por la existencia de cualquier otro impedimento grave, se obstaculiza o se imposibilita la ejecuci髇 de las medidas de protecci髇 acordadas, el 髍gano competente debe solicitar a la autoridad judicial que corresponda seg鷑 la Ley org醤ica del poder judicial las medidas necesarias por hacerlas efectivas, sin perjuicio de las intervenciones inmediatas que puedan llevarse a cabo si est� en peligro la vida o la integridad del menor o la menor o se vulneran gravemente sus derechos.

2. La Polic韆 de la Generalidad - Mossos d'Esquadra debe prestar la cooperaci髇 y el auxilio necesarios para practicar las actuaciones de investigaci髇 y debe ejecutar las medidas establecidas si existe negativa o resistencia a cumplirlas.

Art韈ulo 113 R間imen de recursos

1. La declaraci髇 de desamparo, sin perjuicio de su eficacia inmediata, es impugnable en los t閞minos establecidos por la Ley de enjuiciamiento civil ante la jurisdicci髇 civil sin necesidad de reclamaci髇 previa por v韆 administrativa en el plazo de tres meses a contar desde la notificaci髇 de la resoluci髇 que se impugna.

2. La impugnaci髇 por parte del adolescente requiere que previamente la autoridad judicial haya nombrado un defensor o defensora judicial. A tales efectos, cuando una vez notificada la resoluci髇, el adolescente manifieste, dentro de plazo, la disconformidad y la voluntad de impugnar, el 髍gano competente que ha asumido la tutela debe promover su nombramiento judicial.

Art韈ulo 114 Acumulaci髇 procesal

El departamento competente en materia de atenci髇 a los ni駉s y a los adolescentes, sin perjuicio de las obligaciones que corresponden al Ministerio Fiscal de acuerdo con la disposici髇 final vig閟ima de la Ley org醤ica 1/1996, de 15 de enero, de protecci髇 jur韉ica del menor, de modificaci髇 parcial del C骴igo civil y de la Ley de enjuiciamiento civil, debe velar porque, incoado un procedimiento de oposici髇 a medidas administrativas de protecci髇 de menores, se resuelvan en un mismo procedimiento todas las acciones e incidencias que afecten a un mismo ni駉 o adolescente o que afecten a hermanos. A tal efecto, debe promover las actuaciones oportunas establecidas por la legislaci髇 procesal.

Art韈ulo 115 Cambio de circunstancias

1. Los progenitores que no han sido privados de la potestad parental o, si procede, las personas titulares de la tutela que no han sido removidas del cargo pueden solicitar al organismo competente en materia de protecci髇 de los ni駉s y los adolescentes, dentro del plazo de un a駉 a contar desde la notificaci髇 de la resoluci髇 administrativa de desamparo, que deje sin efecto la resoluci髇 que la hubiese acordado, si se ha producido un cambio sustancial en las circunstancias que motivaron la declaraci髇 de desamparo y no se ha constituido la medida de acogimiento preadoptivo, velando siempre por el inter閟 superior del ni駉 o el adolescente.

2. La solicitud debe resolverse en el plazo de tres meses. Pasado este plazo, la solicitud se entiende desestimada por silencio, a fin de salvaguardar siempre el inter閟 superior del ni駉 o el adolescente.

3. Contra esta resoluci髇 puede formularse oposici髇 judicial en el plazo de dos meses a contar desde la notificaci髇 o desde la finalizaci髇 del plazo para resolver, en los t閞minos establecidos por la Ley de enjuiciamiento civil.

4. Transcurrido el plazo de un a駉 establecido por el apartado 1, decae el derecho de petici髇 de revisi髇 y no es posible la oposici髇 a las medidas que se adopten para la protecci髇 del ni駉 o el adolescente.

Art韈ulo 116 R間imen de relaci髇 y visitas

1. La declaraci髇 de desamparo y la adopci髇 posterior de una medida de protecci髇 no debe impedir la comunicaci髇, la relaci髇 y las visitas del ni駉 o el adolescente con sus familiares, salvo que el inter閟 superior del ni駉 o el adolescente haga aconsejable su limitaci髇 o su exclusi髇.

2. Salvo en el caso de que se haya acordado el acogimiento preadoptivo y que sea firme, la resoluci髇 que dispone, limita o excluye el r間imen de relaci髇 y visitas o la desestimaci髇 por silencio en el plazo de un mes a contar desde la fecha de la solicitud es impugnable ante la jurisdicci髇 civil, en los t閞minos establecidos por la Ley de enjuiciamiento civil, en el plazo de dos meses a contar desde su notificaci髇 o de la desestimaci髇 presunta por silencio y sin necesidad de reclamaci髇 previa por la v韆 administrativa, a fin de salvaguardar siempre el inter閟 superior del ni駉 o el adolescente.

3. El 髍gano competente de la Generalidad en la supervisi髇 de la relaci髇 y las visitas del ni駉 o el adolescente con sus familiares tiene la obligaci髇 de procurar los mecanismos necesarios para que la visita tenga lugar en los horarios m醩 adecuados de acuerdo con el inter閟 del ni駉 o el adolescente, teniendo en cuenta especialmente su horario escolar.

Art韈ulo 117 Informaci髇 al ni駉 o adolescente desamparado

1. El ni駉 con suficiente conocimiento y el adolescente deben ser informados por el departamento competente en materia de protecci髇 de los ni駉s y los adolescentes sobre su situaci髇 personal, las medidas adoptadas y las actuaciones que hay que seguir, su duraci髇 y contenido, de cu醠es son sus derechos y de los 髍ganos e instituciones a los que pueden dirigirse para defender sus derechos. Esta informaci髇 debe ser comprensible, adecuada a sus condiciones y continua durante todo el proceso de intervenci髇. Sin embargo, el ni駉 o el adolescente tiene derecho a participar en el proceso de estudio de su situaci髇 y en la elaboraci髇 de la propuesta de la medida, si las condiciones de edad o de madurez lo hacen posible.

2. El ni駉 o el adolescente tiene derecho a conocer, en funci髇 de su edad y capacidad, su historia personal y familiar y, si ha sido separado de su familia de origen definitivamente, sus antecedentes culturales y sociales, que deben ser siempre respetados.

3. Alcanzada la mayor韆 de edad, la persona interesada tiene derecho a acceder a su expediente y a conocer los datos sobre sus or韌enes y parientes biol骻icos. A tal fin, el 髍gano competente en materia de protecci髇 de los ni駉s y los adolescentes debe iniciar un procedimiento confidencial de mediaci髇, previo a la revelaci髇 de los posibles parientes biol骻icos, en cuyo marco, tanto la persona interesada como las personas afectadas deben ser informadas de las respectivas circunstancias familiares y sociales, y de la actitud manifestada por la otra parte en relaci髇 con el posible encuentro.

V閍se D [CATALU袮] 169/2015, 21 julio, por el que se establece el procedimiento para facilitar el conocimiento de los or韌enes biol骻icos (獶.O.G.C.� 23 julio).LE0000557033_20150812

Art韈ulo 118 El procurador o procuradora de los ni駉s y los adolescentes

Las funciones de inspecci髇, de atenci髇 a las solicitudes y quejas de los menores tutelados y la atenci髇 de las peticiones de informe del S韓dic de Greuges, as� como la funci髇 de elevar recomendaciones y propuestas en el 醡bito de las situaciones de los ni駉s y adolescentes, pueden atribuirse a un funcionario o funcionaria del departamento competente en atenci髇 a los ni駉s y a los adolescentes, que debe ser nombrado procurador o procuradora de la infancia. En cualquier caso, reglamentariamente debe regularse la figura u 髍gano mencionado dependiente de la unidad directiva competente en la atenci髇 a los ni駉s y a los adolescentes.

Art韈ulo 119 Guarda protectora

1. Los progenitores o las personas titulares de la tutela, si concurren circunstancias graves y ajenas a su voluntad que les impiden cumplir temporalmente las funciones de guarda, pueden solicitar al departamento competente en materia de protecci髇 de los ni駉s y los adolescentes que asuma la guarda del ni駉 o el adolescente mientras se mantenga aquella situaci髇. Esta guarda se realiza mediante el acogimiento en un centro o por parte de una persona o una familia.

2. La guarda protectora no afecta a la obligaci髇 de los progenitores o de otros parientes de hacer todo lo necesario para asistir a los ni駉s o a los adolescentes ni la obligaci髇 de prestarles alimentos en el sentido m醩 amplio.

3. La resoluci髇 administrativa de guarda debe determinar la obligaci髇 de los progenitores u otros parientes de contribuir al sostenimiento del ni駉 o el adolescente en los t閞minos que se establezcan reglamentariamente.

Art韈ulo 120 Tipolog韆 de las medidas

1. Las medidas que deben adoptarse por resoluci髇 motivada, siempre teniendo en cuenta el inter閟 del ni駉 o el adolescente, pueden ser las siguientes:

• a) El acogimiento familiar simple por una persona o una familia que pueda suplir, temporalmente, el n鷆leo familiar natural del ni駉 o el adolescente.
• b) El acogimiento familiar permanente.
• c) El acogimiento familiar en unidad convivencial de acci髇 educativa.
• d) El acogimiento en un centro p鷅lico o concertado.
• e) El acogimiento preadoptivo.
• f) Las medidas de transici髇 a la vida adulta y a la autonom韆 personal.
• g) Cualquier otra medida de tipo asistencial, educativo o terap閡tico aconsejable, de acuerdo con las circunstancias del ni駉 o el adolescente.

2. Las medidas de acogimiento familiar, siempre que sea posible, tienen preferencia respecto de las que conllevan el internamiento del menor o la menor en un centro p鷅lico o concertado.

3. El ni駉 o el adolescente para cuya protecci髇 es necesaria la aplicaci髇 de la medida de acogimiento en familia ajena o en centro tiene derecho a ser acogido lo m醩 cerca posible de su domicilio, salvo que no le resulte beneficioso.

Art韈ulo 121 Procedimiento para la adopci髇 de medidas

La adopci髇 de cualquier medida de protecci髇 debe hacerse mediante resoluci髇 motivada y notificada, de acuerdo con lo establecido por el art韈ulo 108; y, salvo en los supuestos de adopci髇 de medidas cautelares, debe cumplirse el procedimiento determinado legalmente.

Art韈ulo 122 Revisi髇 y modificaci髇

Las medidas de protecci髇 pueden ser revisadas y modificadas en cualquier momento en funci髇 de la evoluci髇 de la situaci髇 del ni駉 o el adolescente. Con esta finalidad, los equipos t閏nicos competentes deben informar semestralmente al 髍gano competente en materia de protecci髇 de los ni駉s y los adolescentes de la evoluci髇 de la situaci髇 y del seguimiento que realizan de la misma.

Art韈ulo 123 Impugnaci髇

1. Las resoluciones que acuerdan las medidas de protecci髇 son impugnables ante la autoridad judicial, sin necesidad de reclamaci髇 previa por la v韆 administrativa, en el plazo de dos meses a contar desde la notificaci髇 de la resoluci髇 que se impugna.

2. A pesar de lo establecido por el apartado 1, una vez transcurrido el plazo de un a駉 establecido por el art韈ulo 115 o confirmado judicialmente el desamparo, los progenitores no pueden oponerse a las decisiones o medidas que se adopten para la protecci髇 del ni駉 o el adolescente, salvo la resoluci髇 que acuerde el acogimiento preadoptivo, siempre que, en este caso, los progenitores no hayan sido privados de la potestad parental.

3. La impugnaci髇 por parte del adolescente requiere que previamente la autoridad judicial haya nombrado a un defensor o defensora judicial, seg鷑 lo establecido por el C骴igo civil. A tales efectos, cuando, una vez notificada la resoluci髇, el adolescente manifieste, dentro de plazo, su disconformidad y su voluntad de impugnar, el 髍gano competente que haya asumido la tutela debe promover dicho nombramiento judicial.

Art韈ulo 124 Extinci髇

Las medidas de protecci髇 se extinguen por:

• a) Adopci髇.
• b) Alcance de la mayor韆 de edad, emancipaci髇 o habilitaci髇 de edad.
• c) Resoluci髇 judicial civil firme.
• d) Constituci髇 de la tutela.
• e) Acuerdo del 髍gano competente que declara que han desaparecido las circunstancias que hab韆n dado lugar a la adopci髇 de la medida.
• f) Muerte o declaraci髇 de defunci髇 del ni駉 o del adolescente.

Art韈ulo 125 Medida de acogimiento familiar

1. El ni駉 o el adolescente desamparado debe ser confiado a una familia o a una persona que haga posible el desarrollo integral de su personalidad.

2. Las personas que reciben a un ni駉 o a un adolescente en acogimiento ejercen su guarda y tienen la obligaci髇 de velar por esta persona, tenerla en su compa耥a, alimentarla, educarla y procurarle una formaci髇 integral, bajo la supervisi髇 de la entidad competente, que debe facilitar la ayuda y el asesoramiento necesarios.

Art韈ulo 126 Clases

1. El acogimiento familiar puede ser simple o permanente.

2. El acogimiento familiar simple debe que acordarse si se prev� que el desamparo ser� transitorio, y puede tener diferentes modalidades; la tipolog韆 y la duraci髇 de las modalidades de acogimiento familiar simple deben establecerse reglamentariamente.

3. El acogimiento familiar permanente debe acordarse si se prev� que el desamparo ser� definitivo y no se considera m醩 favorable para el inter閟 del ni駉 o el adolescente la aplicaci髇 del acogimiento preadoptivo o cuando este no sea posible.

Art韈ulo 127 Acogimiento en familia extensa y acogimiento en familia ajena

1. El acogimiento familiar, simple o permanente, puede constituirse en la familia extensa del ni駉 o el adolescente o en familia ajena.

2. A los efectos de la presente ley, se entiende por familia extensa aquella en la que existe una relaci髇 de parentesco por consanguinidad o afinidad entre el ni駉 o el adolescente y la persona acogedora, o uno de los miembros de la familia acogedora, as� como con los convivientes con el ni駉 o el adolescente en los 鷏timos dos a駉s.

3. El acogimiento simple o permanente en familia extensa tiene preferencia respecto del acogimiento en familia ajena.

4. La elecci髇 de los familiares en el acogimiento simple o permanente en familia extensa debe hacerse teniendo en cuenta, en cualquier caso, que quienes quieren acoger al ni駉 o adolescente han mostrado suficiente inter閟 por su bienestar, que existe v韓culo afectivo con el mismo, que tienen la capacidad de preservarle de las condiciones que generaron la situaci髇 de desamparo, y una aptitud educadora adecuada. Asimismo, no debe haber oposici髇 al acogimiento por parte de las personas que conviven en el domicilio de los acogedores.

Art韈ulo 128 Resoluci髇 de acogimiento

El acogimiento familiar se acuerda por resoluci髇 motivada del departamento competente en infancia y adolescencia, sin necesidad del consentimiento de los progenitores o titulares de la tutela o de la guarda.

Art韈ulo 129 Formalizaci髇 del acogimiento

1. El acogimiento familiar debe formalizarse por escrito. En esta formalizaci髇 escrita debe constar el consentimiento de los acogedores y del adolescente. En el caso de los ni駉s, tienen derecho a ser escuchados si tienen la suficiente capacidad. El acto de formalizaci髇 no es impugnable.

2. En el momento de formalizar el acogimiento, el departamento competente en infancia y adolescencia debe facilitar a los acogedores los documentos necesarios para justificar la identidad del menor o la menor, los informes de salud y educativos de los que se disponga y la informaci髇 de inter閟 para el ejercicio de la guarda y las funciones tutelares delegadas.

3. Los criterios de selecci髇 de la persona o la familia de acogida deben establecerse por reglamento y deben tener en cuenta la edad, la aptitud educadora, la situaci髇 familiar y otras circunstancias en inter閟 del ni駉 o el adolescente.

4. El acogimiento de hermanos debe confiarse a una misma persona o familia, salvo que existan circunstancias que justifiquen su separaci髇, y deben facilitarse las relaciones entre el ni駉 o el adolescente y su familia natural cuando sea posible el reintegro a esta, para favorecerlo, y cuando pueda beneficiar al ni駉 o al adolescente.

Art韈ulo 130 Finalizaci髇 del acogimiento familiar

El acogimiento familiar, adem醩 de por las causas establecidas por el art韈ulo 124, finaliza por muerte, incapacidad o voluntad de la familia o la persona acogedora, y por voluntad del adolescente. En estos casos es preciso establecer a continuaci髇 la medida de protecci髇 que proceda en beneficio del ni駉 o del adolescente.

Art韈ulo 131 Acogimiento convivencial de acci髇 educativa

1. El acogimiento en una unidad convivencial de acci髇 educativa es el ejercido por personas previamente seleccionadas y calificadas por raz髇 de su titulaci髇, formaci髇 y experiencia en el 醡bito de la infancia y la adolescencia.

2. El acogimiento en una unidad convivencial de acci髇 educativa puede acordarse fundamentalmente respecto de ni駉s o adolescentes con diversidad funcional, grupos de hermanos y otros en dificultades especiales o con necesidades educativas especiales.

Art韈ulo 132 Adopci髇 de la medida de acogimiento en centro

1. El acogimiento en centro debe acordarse cuando se prev� que el desamparo o la necesidad de separaci髇 de la propia familia ser醤 transitorios y no ha sido posible o aconsejable el acogimiento por una persona o una familia. Es tambi閚 aplicable cuando, existiendo los requisitos para el acogimiento preadoptivo, este no ha podido constituirse.

2. El acogimiento en centro consiste en ingresar al ni駉 o al adolescente en un centro p鷅lico o concertado adecuado a sus caracter韘ticas, para que reciba la atenci髇 y la educaci髇 necesarias.

3. Los centros deben ser abiertos, integrados en un barrio o una comunidad, y deben organizarse siempre en unidades que permitan un trato afectivo y una vida cotidiana personalizados.

4. Los acogimientos en centros se constituyen por resoluci髇 del 髍gano competente en materia de protecci髇 de los ni駉s y los adolescentes.

5. Los hermanos deben ser acogidos en el mismo centro, salvo que no les resulte beneficioso.

6. El director o directora del centro ejerce por delegaci髇 las facultades y las obligaciones inherentes a la guarda.

7. La estancia durante per韔dos de tiempo cortos, fin de semana o vacaciones de un ni駉 o adolescente con medida de acogimiento en centro, con una persona o familia colaboradora, debe tener lugar en las condiciones que se establezcan reglamentariamente, atendiendo de modo prioritario los casos de los ni駉s o los adolescentes con discapacidades u otras situaciones que dificultan el establecimiento de un acogimiento simple o permanente.

Art韈ulo 133 Centros o unidades de educaci髇 intensiva

1. Cuando sea necesario, en consideraci髇 a las caracter韘ticas o al comportamiento de los adolescentes acogidos, deben crearse centros o unidades con espacios de escolarizaci髇 propios reconocidos por la Administraci髇 educativa con actividades escolares reconocidas por el sistema educativo, y que incorporen en su configuraci髇 arquitect髇ica elementos constructivos de protecci髇, con el objeto de favorecer la eficacia de los programas educativos, prelaborales o de tratamiento psicol骻ico o terap閡tico.

2. Estos centros tienen como objetivo dar una respuesta educativa y asistencial a los adolescentes que presentan alteraciones de conducta que requieren un sistema de educaci髇 intensiva.

3. En estos centros pueden restringirse o suprimirse las salidas por un tiempo m醲imo de un mes, de modo que puedan desarrollarse programas individuales. En estos casos, los adolescentes pueden formular una reclamaci髇 en forma de queja a la unidad directiva competente en infancia o adolescencia o al procurador o procuradora de los ni駉s y los adolescentes. La restricci髇 o supresi髇 de las salidas debe ser notificada al Ministerio Fiscal en el plazo de veinticuatro horas desde su adopci髇 y debe ser revisada semanalmente.

4. Debe velarse porque las pr醕ticas de contenci髇 en los centros respeten los derechos de los ni駉s y los adolescentes, de acuerdo con el reglamento que debe desarrollar el departamento competente en materia de atenci髇 a los ni駉s y a los adolescentes. Este reglamento debe limitar los usos de las salas y de las dem醩 medidas de contenci髇 y aislamiento f韘ico de los ni駉s y los adolescentes en los centros de tipo terap閡tico o de educaci髇 intensiva, para que se haga un uso limitado y extraordinario de las mismas para proteger al ni駉 o al adolescente de s� mismo en episodios de violencia, y en ning鷑 caso pueden utilizarse como medidas de sanci髇 o correcci髇. El suministro de psicof醨macos a los menores por parte del personal de los centros debe tener un seguimiento m閐ico y en ning鷑 caso puede convertirse en una metodolog韆 de contenci髇 habitual.

Art韈ulo 134 Derechos de los ni駉s y los adolescentes acogidos en centros

Los ni駉s o los adolescentes, mientras son acogidos en centros, tienen, respecto de las personas que los guardan, los mismos derechos y deberes que les corresponden en la relaci髇 con el tutor o tutora establecidos por la legislaci髇 civil. Especialmente, tienen los siguientes derechos:

• a) El derecho a ser respetados en su intimidad personal y en sus pertenencias individuales en el contexto educativo que rige el centro.
• b) El derecho a ser informados por los responsables del centro de su situaci髇 legal y a participar en la elaboraci髇 de su proyecto individual.
• c) El derecho a ser escuchados en las decisiones que les afectan, si tienen suficiente entendimiento.
• d) El derecho a participar activamente en la elaboraci髇 de la programaci髇 de actividades internas o externas del centro y en el desarrollo de estas actividades.
• e) El derecho a ser escuchados en caso de queja y a ser informados de todos los sistemas de atenci髇 y reclamaci髇 que tienen a su alcance.
• f) El derecho a mantener relaciones con sus familiares y recibir visitas de los mismos en el centro, seg鷑 el marco establecido por la legislaci髇 vigente.

Art韈ulo 135 Deberes de los ni駉s y los adolescentes acogidos en centros

Durante la estancia en los centros de acogimiento o residenciales, los ni駉s o los adolescentes deben:

• a) Cumplir las normas de funcionamiento y convivencia de los centros.
• b) Respetar la dignidad y las funciones del personal del centro y de los dem醩 residentes.
• c) Desarrollar con dedicaci髇 y aprovechamiento las actividades educativas, laborales y de formaci髇, organizadas, dirigidas y coordinadas por el mismo centro de acogimiento o residencial, que formen parte de su proyecto educativo.

Art韈ulo 136 Incumplimiento de los deberes de convivencia en el centro

Son incumplimientos de deberes de la convivencia por parte de los ni駉s y los adolescentes las siguientes conductas:

• a) El incumplimiento de las normas de funcionamiento y de convivencia del centro.
• b) La promoci髇 y la participaci髇 activa en actos o conductas que comporten la alteraci髇 del orden del centro o la insubordinaci髇 respecto del personal del centro.
• c) El abandono del centro sin autorizaci髇 o el hecho de intentarlo de forma reiterada.
• d) El causar da駉s en las dependencias, los materiales y los efectos del centro o en las pertenencias de otras personas.
• e) Los actos de incorrecci髇 o desconsideraci髇 para con los compa馿ros o el personal del centro.
• f) Las faltas de puntualidad.
• g) Cualquier otra incorrecci髇 que altere el desarrollo normal de la convivencia en el centro.

Art韈ulo 137 Medidas educativas

En caso de incumplimiento de los deberes de la convivencia, pueden aplicarse las siguientes medidas educativas correctoras:

• a) Amonestaci髇.
• b) Privaci髇 de actividades cotidianas de tiempo libre, deportivas o de car醕ter l鷇ico, ya sean diarias, de fin de semana o especiales, o limitaci髇 horaria o de incentivos, por un per韔do m醲imo de quince d韆s.
• c) Realizaci髇 de actividades de inter閟 para la colectividad en el propio centro, por un per韔do m醲imo de quince d韆s.

Art韈ulo 138 Incumplimientos de deberes gravemente perjudiciales para la convivencia

Son incumplimientos de deberes gravemente perjudiciales para la convivencia por parte de los ni駉s o los adolescentes las siguientes conductas:

• a) La introducci髇, la posesi髇 o el consumo en el centro de sustancias t髕icas, incluyendo sustancias psicotr髉icas o estupefacientes.
• b) La introducci髇 o la posesi髇 en el centro de armas o instrumentos especialmente peligrosos.
• c) La sustracci髇 de materiales o efectos del centro o de pertenencias de otras personas.
• d) Los actos graves de indisciplina, las injurias y ofensas contra compa馿ros y la falta de respeto al personal del centro.
• e) Las vejaciones o humillaciones contra cualquier miembro del centro, especialmente las que tienen una implicaci髇 de g閚ero, sexual, racial o xen骹oba, o se dirigen a los compa馿ros del centro especialmente vulnerables.
• f) Las amenazas, las agresiones f韘icas, las actuaciones que atentan contra la integridad o que son perjudiciales para la salud cometidas contra compa馿ros.
• g) El deterioro grave, causado intencionadamente, de las dependencias del centro, del material que contiene o de los objetos y las pertenencias de los otros miembros del centro.
• h) Los actos injustificados que alteran gravemente el desarrollo normal de la convivencia en el centro.
• i) La comisi髇 de conductas, de forma sistem醫ica y reiterada, contrarias a los deberes de convivencia del centro.

Art韈ulo 139 Medidas educativas en caso de incumplimientos gravemente perjudiciales

En caso de incumplimientos de deberes gravemente perjudiciales para la convivencia, la persona que tiene la guarda del ni駉 o adolescente puede aplicar las siguientes medidas educativas correctoras:

• a) Realizaci髇 de actividades de inter閟 para la colectividad en el mismo centro, por un per韔do m醲imo de un mes.
• b) Privaci髇 de actividades cotidianas de tiempo libre, deportivas o de car醕ter l鷇ico, ya sean diarias, de fin de semana o especiales, o limitaci髇 horaria o de incentivos, por un per韔do m醲imo de un mes.
• c) Separaci髇 del grupo con privaci髇 o limitaci髇 de incentivos por un per韔do m醲imo de tres d韆s.

Art韈ulo 140 Criterios para la aplicaci髇 de las medidas educativas

Para la aplicaci髇 de las medidas educativas correctoras, deben tenerse en cuenta los siguientes criterios:

• a) La edad y las caracter韘ticas del ni駉 o del adolescente.
• b) El proyecto educativo individual.
• c) El grado de intencionalidad o negligencia.
• d) La reiteraci髇 de la conducta.
• e) La perturbaci髇 del funcionamiento del centro.
• f) Los perjuicios ocasionados a los dem醩 residentes, al personal o a los bienes o las instalaciones del centro.

Art韈ulo 141 Audiencia de la persona interesada

La actuaci髇 educativa como respuesta a los incumplimientos de deberes debe garantizar siempre el derecho de la persona interesada a ser informada y escuchada en relaci髇 con el hecho.

Art韈ulo 142 Contenido y funci髇 de las medidas educativas

Las medidas educativas correctoras deben tener un contenido y una funci髇 fundamentalmente educativos. No pueden aplicarse medidas correctoras que impliquen directa o indirectamente castigos corporales, privaci髇 de la alimentaci髇, privaci髇 del derecho de visita de la familia, privaci髇 del derecho a la educaci髇 obligatoria y de asistencia al centro escolar, o que atenten contra la dignidad del ni駉 o del adolescente.

Art韈ulo 143 Petici髇 de excusas y reparaci髇 de los da駉s

La petici髇 de excusas a la persona ofendida, la restituci髇 de los bienes o la reparaci髇 de los da駉s pueden dar lugar a la suspensi髇 de las medidas educativas correctoras, siempre que no se reitere la conducta que se quiere corregir.

Art韈ulo 144 Aplicaci髇 de la medida

1. La aplicaci髇 de la medida corresponde al educador o educadora que tiene a su cargo el ni駉 o el adolescente, si se trata de una actuaci髇 educativa que se aplica como respuesta a incumplimientos de deberes de la convivencia establecidos por el art韈ulo 136.

2. La aplicaci髇 de la medida correctora como respuesta a incumplimientos de deberes gravemente perjudiciales para la convivencia establecidos por el art韈ulo 138 debe ser resuelta por el director o directora del centro mediante la instrucci髇 de expediente disciplinario, en la que debe nombrarse un instructor o instructora. En todos los casos se debe dar audiencia al infractor o infractora.

Art韈ulo 145 Infracciones penales

Si el incumplimiento de deberes es susceptible de constituir una infracci髇 penal, debe darse cuenta de ello inmediatamente al Ministerio Fiscal, de conformidad con la legislaci髇 sobre responsabilidad penal del menor.

Art韈ulo 146 Transici髇 a la vida adulta y a la autonom韆 personal

1. Las medidas de transici髇 a la vida adulta y a la autonom韆 personal deben consistir en ofrecer acompa馻miento en la inserci髇 sociolaboral y de vivienda para garantizar una preparaci髇 progresiva para la independencia personal, de acuerdo con las necesidades formativas y de integraci髇 social y laboral de cada adolescente.

2. Estas medidas pueden acordarse, fundamentalmente, respecto de adolescentes mayores de diecis閕s a駉s, con su consentimiento, que se encuentren con escasas posibilidades de retorno al n鷆leo familiar de origen o sin perspectivas de integraci髇 en otros n鷆leos de convivencia y que tengan riesgo de exclusi髇 social al alcanzar la mayor韆 de edad.

Art韈ulo 147 Medida de acogimiento preadoptivo

1. La medida de acogimiento preadoptivo, como paso previo para la adopci髇, se acuerda en los siguientes casos:

• a) Cuando no es posible la reintegraci髇 del ni駉 o adolescente en su familia de origen y se considera que lo m醩 favorable a su inter閟 es la plena integraci髇 en otra familia mediante la adopci髇.
• b) Cuando los progenitores o titulares de la tutela lo solicitan a la entidad p鷅lica competente y hacen abandono de los derechos y de los deberes inherentes a su condici髇.

2. A los efectos de lo establecido por el apartado 1, se entiende que no es factible la reintegraci髇 del ni駉 o el adolescente en su familia biol骻ica cuando, a pesar de que existe una posibilidad de reintegraci髇, esta requerir韆 el transcurso de un per韔do de tiempo durante el cual podr韆 producirse un mayor deterioro psicosocial en el desarrollo evolutivo del ni駉 o el adolescente.

3. Acordada la medida de acogimiento preadoptivo, deben suspenderse las visitas y las relaciones con la familia biol骻ica, para conseguir la mejor integraci髇 en la familia acogedora, si conviene al inter閟 del ni駉 o del adolescente.

Art韈ulo 148 Resoluci髇 de acogimiento

1. El acogimiento preadoptivo se acuerda por resoluci髇 del 髍gano competente sin necesidad de consentimiento de los progenitores y habiendo escuchado al ni駉, si tiene suficiente conocimiento. En el caso de los adolescentes, es necesario su consentimiento.

2. Los progenitores que no est醤 privados de la potestad, los titulares de la tutela a quienes no les ha sido removida, siempre y cuando no hayan dado su consentimiento, o la madre que ha hecho abandono voluntario antes de haber transcurrido treinta d韆s desde el parto, pueden oponerse judicialmente al acogimiento preadoptivo en el plazo de dos meses a contar desde la notificaci髇 de la resoluci髇.

3. Cuando ha adquirido firmeza la resoluci髇 que acuerda el acogimiento preadoptivo, no es necesario el asentimiento de los progenitores a la adopci髇.

Art韈ulo 149 Formalizaci髇 del acogimiento

El acogimiento preadoptivo debe formalizarse por escrito. En esta formalizaci髇 escrita debe constar el consentimiento de los acogedores y del adolescente. La formalizaci髇 no es impugnable.

Art韈ulo 150 Finalizaci髇 del acogimiento preadoptivo

El acogimiento preadoptivo finaliza por las causas generales de extinci髇 de las medidas de protecci髇 establecidas por el art韈ulo 124 y, adem醩, por las espec韋icas que determina la legislaci髇 civil. La finalizaci髇 por muerte, incapacidad o voluntad de los acogedores, por voluntad del adolescente y por decisi髇 de la entidad p鷅lica competente comporta necesariamente el establecimiento de la medida de protecci髇 m醩 apropiada para el beneficio del ni駉 o el adolescente.

Art韈ulo 151 Medidas asistenciales

1. Alcanzada la mayor韆 de edad, la emancipaci髇 o la habilitaci髇 de edad, se extinguen las medidas de protecci髇. Sin embargo, el organismo competente de la Generalidad puede disponer las medidas asistenciales que considere necesarias, mediante resoluci髇 motivada y con el consentimiento de la persona interesada o, en su defecto, si se trata de un presunto o una presunta incapaz, mediante autorizaci髇 judicial.

2. Estas medidas asistenciales pueden tener contenido econ髆ico, jur韉ico y social o consistir en el otorgamiento o el mantenimiento de una plaza en centro y pueden extenderse hasta los veinti鷑 a駉s de edad.

3. El abogado o abogada de la Generalidad puede representar y defender en juicio a las personas extuteladas que al alcanzar la mayor韆 de edad, la emancipaci髇 o la habilitaci髇 de edad lo soliciten, siempre que la representaci髇 y defensa se haya iniciado durante la minor韆 de edad.

Art韈ulo 152 Programas de apoyo a la emancipaci髇 y a la autonom韆 personal de los j髒enes extutelados y en situaci髇 de riesgo para promover la igualdad de oportunidades

1. El organismo competente debe facilitar la orientaci髇, la formaci髇 y el apoyo necesarios a los j髒enes extutelados que al llegar a la mayor韆 de edad, a la emancipaci髇 o a la habilitaci髇 de edad lo soliciten, siempre que cumplan los requisitos establecidos por los programas de autonom韆 personal.

2. Los programas de autonom韆 personal tienen como objetivo ofrecer a los j髒enes extutelados los recursos de apoyo personal, de vivienda, formativos y laborales necesarios para asesorarles y acompa馻rles en el ejercicio de la plena ciudadan韆 en condiciones de igualdad, con responsabilidad y con el m醲imo grado de integraci髇 en la sociedad en la que viven.

3. Los programas de autonom韆 personal deben incluir metodolog韆s de inserci髇 fundamentadas en el an醠isis de g閚ero para asegurar la adquisici髇 de competencias profesionales que permitan mejorar la empleabilidad de los j髒enes extutelados.

Art韈ulo 153 Coordinaci髇 interadministrativa

Los sistemas de protecci髇 y el sistema de justicia juvenil deben mantener la coordinaci髇 debida con el objeto de asegurar la mayor efectividad de la acci髇 desarrollada por cada uno, simult醤eamente o sucesivamente, sobre una misma persona menor.

Art韈ulo 154 Menores de catorce a駉s que cometen infracciones penales

1. Cuando el Ministerio Fiscal, en cumplimiento de lo establecido por la legislaci髇 reguladora de la responsabilidad penal de los menores, remita el testimonio de particulares por hechos cometidos por menores de catorce a駉s al departamento competente en materia de protecci髇 de los ni駉s y los adolescentes, este debe valorar la posibilidad de que exista una situaci髇 de riesgo o desamparo y, si procede, debe derivar o incoar el procedimiento correspondiente.

2. Sin perjuicio de lo establecido por el apartado 1, debe valorarse la posibilidad de efectuar una actividad mediadora con la v韈tima, y deben derivarse, si procede, los particulares al equipo t閏nico del departamento competente en materia de protecci髇 de los ni駉s y los adolescentes para llevar a cabo esta actividad.

Art韈ulo 155 Mayores de catorce a駉s

Cuando el Ministerio Fiscal o el Juzgado de Menores, en cumplimiento de lo establecido por la legislaci髇 reguladora de la responsabilidad penal de los menores, remitan el testimonio de particulares por hechos cometidos por mayores de catorce a駉s al departamento competente en materia de protecci髇 de los ni駉s y los adolescentes, este debe valorar la posibilidad de que exista una situaci髇 de riesgo o desamparo y, si procede, debe derivar o incoar el procedimiento correspondiente.